Soobin está un poco inquieto, muy nervioso, y tener la mirada de muchas personas puesta en si no es de gran ayuda y mucho menos reconfortante en lo absoluto.
Están un poco cerca a llegar al centro en donde recibirían su primer premio, tiene miedo de que por los nervios termine diciendo algo totalmente tonto, no quiere humillarse y mucho menos a los demás chicos.
El solo pensar que otra vez la inseguridad le consuma para terminar siendo el payaso como esas veces cuando estaba en la escuela, le causaba sensaciones en su corazón como si este temblara de angustia. En realidad, todo él estaba temblando, solo se percibía un poco, pero Soobin sentía tanto.
De inmediato, todos esos pensamientos negativos fueron esfumados al sentir una cálida mano sujetar la suya tan temblorosa y sudorosa. Y entinces, es cuando se encuentra con la dulce sonrisa de Yeonjun, quien no dijo ninguna sola palabra en el acto, solo le dedicó un guiño del que puede afirmar que fue un acto del que en vez de causarle nervios como siempre hacía, ésta vez fue el causante de soltar esa horrible sensación que sentía atorada en la garganta.
Taehyun y Hueningkai son los que habían llegado de primeros a recibir el premio en sus manos, él como Yeonjun y Beomgyu solo dieron una inclinación por detrás de los otros menores.
Sintió un tirón de su mano, de la que aun sostiene con fuerza la de Yeonjun, y es que los miembros están en la espera de que se acerque a ese micrófono y dé por todos, el primer agradecimiento por su primer premio como el líder.
La inseguridad regresa cuando toma una gran calada de aire al tener de frente el micrófono y ver a la lejana las muchas luces.
Traga duro, siente como si la voz no le saliera, pero vuelve a sentir ese apretón en su mano, ese fuerte agarre del que lo acompaña siempre.
Mira por un momento los ojos de Yeonjun tan brillosos que le transmiten ese ánimo y alegría, tiene que hacer esto, no es difícil, no cuando está a su lado.
Mira el agarre en sus manos. Y ya.
Ya, está dispuesto a hablar.
