11

773 95 0
                                    


Un repentino ruido les hizo aterrizar de golpe en la realidad y se levanto a toda prisa, con los dedos temblorosos se abrocho el pantalón y puso su polera, abrió la puerta despacio y sólo asomo medio cuerpo, era uno de los vigilantes que había subido a hacer su rondín habitual.

– Buenas noches señor Kim, ¿todavía por aquí? – dijo amablemente.

– Sí, terminando una campaña, pero ya casi me voy.

– ¿Quiere que le pida un taxi?

– No es necesario, gracias.

le sonrió y caminó a los elevadores, apretó los ojos de miedo y cerro de nuevo la puerta. se dio la vuelta y yoongi estaba parado justo detrás de el, con su dedo pulgar delineó sus labios y luego acarició su mejilla y bajó a su cuello acariciándolo también.

– Debemos irnos, los policías estarán a la expectativa de mi salida, además, deben saber que estás aquí.

– Dijo que iba a otro piso, no saben que estoy aquí contigo, es una gran ventaja que las ventanas de tu oficina tengan persianas, no se dio cuenta de mi presencia – dijo mientras besaba suavemente su cuello y acariciaba su cintura.

– yoongi, por favor – dijo con un hilo de voz, su cuerpo estaba reaccionando de nuevo a sus caricias haciéndole perder la perspectiva de donde se encontraban.

– Sólo una vez más, haré un viaje de negocios y no sé cuando pueda regresar a seul, quizá nos veamos hasta el día de la boda – anunció lamiendo su oreja en tanto sus manos acariciaban sus pezones por encima de la polera.

– Aún no te he confirmado que iré.

– Con mayor razón, necesito hacerte mío una vez más esta noche.

le besó apasionadamente mientras quitaba su polera y la subía dejando al descubierto sus hombros, dio pequeños besos en uno y después siguió por su cuello y paso hasta el otro hombro, tenía sus manos entre sus cabellos. le cargó y lo depositó sobre el escritorio, como pudo hizo a un lado las cosas y tiro el portarretratos al suelo, él se rió y sintió como separaba suavemente sus piernas para enterrar su cabeza y besar su miembro. No pudo reprimir el gemido al sentir como movía su tibia lengua al rededor de su pene, puso un dedo en su propia boca y comenzó a chupárselo para no gritar, estaba totalmente envuelto en las magníficas sensaciones que le estaban provocando sus besos, en esa parte tan sensible.

Sintió que iba a explotar y él se detuvo, lo miro casi con furia y él pálido sólo le sonrió, se colocó un nuevo condón, tomó sus piernas y entro en el de golpe, moviéndose con desesperación, gimiendo al unísono, lo veía morderse el labio inferior, totalmente perdido en la excitación y en la lujuria del momento, gruñó cuando llegó al clímax, lo que provocó que también lo alcanzara instantes después y luego salió de su interior.

El sonido de su celular hizo que pegara un grito del susto y hasta se llevo la mano al pecho, yoongi se rió a carcajada abierta y jin le dio una mirada de odio. Alcanzo el aparato y los colores se le fueron de la cara cuando vio que era una llamada de Jungkook, no quería siquiera imaginar que hubiera pasado si se le hubiera ocurrido llamar dos minutos antes. No muy seguro contesto, sabía que insistiría.

– Hola – dijo conteniendo la respiración.

– Hola jin, adivina donde estoy.

– Ni idea – no tenía cabeza ni para pensar del uno al cinco menos para adivinar.

– Afuera de tu oficina, marqué a tu casa, pero como no me contestaste supuse que estarías aquí, te invito a cenar.

– Que sorpresa, en unos minutos bajo – dijo nervioso y le colgó.

¿ESTAS LIBRE ESTA NOCHE? -YOONJIN- (ADAPTACIÓN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora