Las almas gemelas deben de permanecer juntas de por vida, deben amarse sin prejuicios y perdonar cuando es debido.
Yeonjun siempre ha sido un alfa dulce y amable, ¿pero que pasará cuando alguien intenté arrebatarle lo que es suyo?
Soobin siempre se...
{Espero que disfrutéis de está última canción, la cuál también formará parte de la playlist de está historia y que creó que a muchos de vosotros os gustará 💫🥰}
{Seguramente mañana o pasado estaré subiendo la playlist completa ¿O talvez alguna nueva historia se acerca?🤭💕}
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Podía escuchar perfectamente el ruido del mar a lo lejos, el traje me apretaba demasiado aunque mi madre había insistido en qué está era la talla indicada
- Cariño, deja de quejarte y ponte la corbata, quedan menos de veinte minutos para que empiece la ceremonia- me dijo mi madre mientras acaba de arreglarse los puños de su propio traje, como toda una buena alfa
Hacé ya más de un año que salí de aquél hospital y qué Jieun fue echada de la empresa después de que se descubriera que ella fue la causante de mi intoxicación, a día de hoy nadie sabe él porque lo hizo.
Después de que saliese del hospital, los chicos vinieron a visitarme muy a menudo y hasta la propia Somi se ofreció a cuidar a Soojun para que yo pudiese descansar.
Al ver que todo fue a mejor y que la toxina acabo desapareciendo de mi cuerpo, decidimos que era buen momento para formalizar nuestra relación y casarnos ¿Porqué no?
Soojun se a vuelto una bebé demasiado extrovertida con tan sólo un año de edad. Le gusta qué le canten por las noches alguna nana o qué le demos galletas con chispas de chocolate cuando hacé algo bien, hasta Yeonjun a dicho que parece más un pequeño cachorro juguetón que una bebé.
Hace tan solo un par de meses decidimos que la boda se celebraría en Jeju, ya que nos apasionaba la idea de casarnos al lado del mar juntó a las preciosas vistas que tiene la isla. Al principio mi madre se negó a viajar hasta aquí, pero cuándo se enteró de que la madre de Yeonjun había accedido no dudó ni un segundo en coger el avión, porque todavía se negaba a quedar por debajo de la señora Choi.
