¿Recuerdas aquella noche cuando te conocí?
Te dije que sí, sin pensar en el futuro.
Recorrimos caminos duros y difíciles de transitar,
para luego fracasar
y hacer el amor más tarde,
vino el dolor de perderte para siempre.
Y si una cosa te pido es que el día de tu boda me dejes felicitarte,
que quieras mucho a tu esposa,
que cuando tengas un hijo,
y te sientas como PADRE,
le cuentes la triste historia de la mujer,
aquella que pudo ser
su madre.
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Bitácora de una adolescente
شِعرEl corazón de una adolescente, víctima de constantes cambios, siempre encuentra la manera de expresar lo que siente. Aquí les dejo mi corazón de hace unos añitos atrás. (Muchos escritos no son míos, pero igual los incluiré en la bitácora. Créditos p...