Episodio 23 -Hare lo que haga falta

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UNA VEZ MAS

Ambos comenzaban a desesperarse, Korrina y Ash tomaron la decisión de volver adentro y se dirigieron hacia la enfermera.

-¿Qué sucede?-. Pregunto la rubia.

-Sus pokemon están respondiendo bien a el tratamiento, pero debido a la falta de energía las máquinas de sanación están tardando mucho-.

-Eso comprueba que el equipo Flare está desviando la energía, ese control mental hará que la factura de luz este por las nubes-. Bromeo Bonnie.

-No podemos esperar más, ¿Quiénes están en mejor estado?-. Interrumpió Ash.

-Los pokemon de Bonnie están bien, a excepción de Dedenne que necesita mas descanso, Korrina tu Lucario goza de buena salud y Ash... lamento decirte que tus pokemon son los mas dañados, tal vez puedan ponerse de pie pero en una confrontación no durarían, debes esperar-. 

El rostro serio de la enfermera hizo que Ash perdiera todo animo de reclamar, giro su cabeza hacia sus pokeball y a Pikachu que estaba en una especie de incubadora profundamente dormido.

-¿Qué hay de los pokemon de Serena?-. pregunto Bonnie.

-¿Ellos?... se encuentran por allá-. La enfermera señalo a su Chansey, quien les daba unos pequeños vasos con medicina a los pokemon de la pelimiel.

Ash no tardo en dirigirse con ellos.

-¿Cómo se sienten?-.

-Pan pancham cham-. El pequeño alzo el pulgar mostrando mucha energía.

-Silveoooon-. Silveon coloco su listón sobre el hombro de Ash, mostrándole su apoyo ante la situación.

-Fox-. Delphox mostro su disgusto ante la reciente llegada de Korrina.

-Tranquilízate Delphox, por favor, ella al igual que nosotros nos expresamos de forma errónea-. Agrego Ash.

-Chicos... lo siento-. Korrina agacho la cabeza en señal de vergüenza y perdón, quería que los pokemon de su amiga la aceptaran de nuevo.

-Hay una oportunidad, si logramos ir a la Torre podremos sacar a Serena de ahí-.

Los pokemon se giraron hacia Ash.

-Pero los pokemon de Ash están heridos-. Grito la joven entrenadora.

-Por eso quería pedirles un favor... luchen junto a mí, déjenme enmendar mi error, necesito su ayuda-.

Los ojos de Ash expresaban seguridad, una como nunca antes habían visto. Panchamp vio a cada uno de los presentes con la existencia llena de dudas fue entonces cuando llego a sus compañeras.

Ambas asintieron sin pensarlo, entonces Pancham también asintió, lo ayudarían.

-Gracias-. Sonrió.

-Bien, creo que es hora de irnos-.

-Chicos esperen-. Clemont apenas se mantenía de pie, la enfermera lo estaba ayudando a caminar.

-¿Qué sucede hermano?-.

-Ya que yono podre ir hice esto-. Clemont le extendió una hoja de papal a Ash.

-¿Esto es?-. dijo al abrirla.

-Es un mapa improvisado del sótano, espero que les sirva-.

-Eres genial Clemont, gracias-.

Ash y Bonnie se despidieron, mientras que Korrina se mantuvo unos momentos con el rubio.

-Cuídate-.

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