Capitulo 10

199 9 0
                                    

Campamento.

Carlota.

Cada vez faltaba menos para el regreso de Ernesto y los  hermanos de Yolotl las chicas trataban de aprovechar el tiempo para estar juntas. Hasta ahora habían hecho el amor en todos los rincones del lugar, se habían acercado bastante y ambas se enamoraban cada vez mas una de la otra.

Fue algo apresurado y también carnal cualquiera opinaría que la relación solo se mantiene gracias al sexo pero ambas chicas sabían completamente que no era así, si no algo mas fuerte que no podían controlar.

-Gracias por ayudarme en esto lota, sinceramente si no estuvieras aquí hubiera tocado fondo- pronuncio la de ojos verdosos, depositando un beso en los labios de la castaña.

-Gracias a ti que le diste un sentido a mi vida, yo era un barco a la deriva, sin rumbo, perdido pero llegaste tu a poner todo de cabeza y te convertiste en mi brújula .-le sonrió de vuelta mientras acariciaba su mejilla.- Ahora dame todo lo que consideres que te hace daño de este lugar.- sostenía una caja de cartón vacía.

La mayor había propuesto tirar a la basura todo aquello que le dañara a la rubia, era un primer paso muy grande para ambas, Yolotl acepto dudosa tal vez le costaría dejar aquello que la hizo feliz aún que fuera momentáneo pero ahora estaba ella y seria quien le bajara las estrellas si fuera necesario para una vez más verla  sonreír.

-Tal vez deberías ayudarme , me será difícil despegarme de toda esta mierda.-ambas comenzaron a rebuscar por todo el cuarto, encontrándose de todo tipo, es decir, carlota se encontró con Marihuana, Cocaína, LSD,  botellas de vodka, de tequila, y muchas cuchillas.

-tu te co... .-la menor la miro con vergüenza y contesto.- cuando mi cuerpo  comenzaba a cambiar lo odiaba nunca creció como el de las demás, nada de mi se había desarrollado y parecía estar encerrada en un cuerpo de 10 años, así un día solo escuche a una chica comentar que se sentía bien y lo intente, al principio solo lo hacia a veces después se volvió una necesidad y lo hacia todo el tiempo hasta que probé cocaína, mi ansiedad había encontrado un nuevo acomodo.-comento con la mirada abajo.

-ahora lo importante es que estas aquí y quieres cambiar, debemos dejar de cargar el pasado para ser feliz, tu ahora quieres cambiar ,no importa lo que hiciste si no que quieres cambiarlo.-le beso la punta de su nariz .-¿Es todo?

-No... .-se acerco a su armario y saco un par dependientes de oro.- Creo que es hora de dejarla ir, mi sufrimiento a sido causado por su muerte, debo aceptar que ella no esta, debo dejarla ir para poder ser feliz... a tu lado por supuesto.-Carlota la miro asombrada.- Cariño pero si son los pendientes de tu madre...

-Quiero deshacerme de todo lo que recuerde a ella, no quiero llorar mas, no quiero lamentar mas su muerte... ella ya no esta aquí y lo acepto, lo único que quiero tener de ella es saber que me amo y que dio su vida por mi.-coloco los accesorios dentro de la caja y la cerro junto a todo lo que había eliminado del cuarto.

-Estoy tan orgullosa de lo fuerte que eres, te admiro tanto ojitos.- tomo su hombro mientras cerrada la caja.- Todo es gracias a ti  complementas esta fuerza que existe en mi.

Ambas tiraron la caja a la basura, encerrando en ella todas las inseguridades, la tristeza, el pasado, el dolor, el llanto y la ansiedad todo eso permanecía en aquella vieja caja de cartón.

Horas mas tarde.

-¿y que debo empacar? .-gritaba desde el otro lado de la casa la rubia.

-No empaques mucho, solo serán un par de días ojitos.-contesto empacando una muda de ropa y su pijama.- Solo llevare lo necesario .-se asomo al cuarto de la niñera con una enorme maleta de color rosa.

La Niñera  ~Carlotl~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora