Capítulo Dos: 𝓔𝓼𝓹𝓮𝓻𝓪 𝓹𝓸𝓻 𝓶𝓲́.

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Observé con cuidado cada parte de su rostro y sonreí inconciente cuando él lo hizo. Se levantó y camino hasta donde me encontraba, extendió sus brazos y me envolvió en un abrazo, recoste mi cabeza en su pecho cerrando los ojos y disfrutando el aroma del perfume que tenía -Buenos días -Dijo separandonos lo suficiente solo para volver a hacer contacto visual. -Buenos días - Le respondí con una sonrisa.

Caminamos de regresó al comedor tomados de la mano, no podía dejar de ver su rostro, me acercó una silla para que pudiera sentarme, y en ese momento mi mirada se dirigió al comedor y me di cuenta de lo que se encontraba en el, HotCakes, fresas, miel, plátanos, manzanas picadas, jugo de naranja y leche.

-Tu mamá me ayudó a hacer los HotCake - Me sonrió con una mirada dulce pero la convirtió en una llena de orgullo cuando volteó a ver los HotCakes mientras levantaba una de sus cejas y cruzaba los brazos.

-Espero que te gusten -Volvio a verme y sonrió, se notaba muy feliz.

Estaban deliciosos excepto por uno que estaba un poco quemado de las orillas, vio mi reacción cuando le di el mordisco, sonrió algo apenado y bajo un poco la mirada, lo conozco y sé que no es bueno cuando se trata de cocinar, pero cuando se propone algo, no se rinde y da todo de él hasta lograrlo.

Terminamos de comer, bueno de que terminará de comer ya que él dijo que había comido antes, porqué yo había despertado muy tarde y más regaños de su parte.

-Vamos -Se levantó y extendió su mano hacia mi esperando la mía y después sonrió.

- ¿A dónde? - Solté una pequeña risa y fruncí un poco el ceño, estaba algo desconcentra pero no podía dejar de sonreír.

- Saldremos - Me arrastró hasta la puerta.

Subimos a su auto y nos pusimos en marcha.

-¿Ahora si me puedes decir hacía donde vamos? - Volteé a verlo y él movía sus dedos sobre el volante como si estuviera escuchando música.

Me dirigió una mirada rápida, volvió hacia el frente y sonrió mostrando sus dientes.

-Es una sorpresa.

Después de algunos minutos de viaje nos detuvimos en un estacionamiento y pude ver de que se trataba.

Bajamos y nos dirigimos a la entrada, donde compramos los boletos y entramos.

La música, los olores y las luces nos invadieron al entrar. No habían muchas personas porqué era algo temprano aún, caminamos por los alrededores hasta que vimos a lo lejos un juego mecánico de gran altura que tenía en grandes letras color azul la palabra "SKY".

-Wow..- Lo vi con los ojos muy abiertos y los labios entreabiertos , no soy fanática de las alturas y menos si te pone de cabeza a tal altura. Volteé a verlo y sus ojos brillaban, tenían una pequeña sonrisa mostrado un poco de sus dientes, se notaba emocionado, cuando veía ese tipo de atracciones su energía aumentaba y lo hacía ver como un niño. En cambio conmigo, le tengo cierto temor a todos los juegos mecánicos.

-Ese~ -dijo levantado ligeramente su brazo y apuntandolo con su dedo índice. Paso su dedo por debajo de su nariz y volteó a verme sonriendo hasta arrugar su nariz. Yo lo veía asustada frunciendo un poco el ceño y los labios.

Siempre que venimos se limita por mis miedos, pero hoy quiero que se divierta. Dejé mis miedos de lado y me arme de valor.


-Vamos - Lo tomé de la mano y caminamos hacía el juego, yo temblaba más a cada paso qué daba, hacía un gran esfuerzo, quería verlo feliz, al llegar compramos los tickets y nos subimos, tengo que admitirlo, tenía miedo, pero al verlo sonreír tan entusiasmado mi miedo disminuía. Nos abrocharon los cinturones de seguridad y bajaron la protección que era de los hombros hasta el torso.

Pasaron unos minutos hasta que se llenará el juego, bajaron una tipo de reja y la cerraron.

El juego comenzó a moverse lentamente y los latidos de mi corazón aumentaban con cada movimento al igual que mi respiración.

Volteé a verlo y justo él a mi, tomó una de mis manos y con ese pequeño tacto sentí que volvía a respirar. El juego tomaba velocidad, apreté su mano y cerré con fuerza los ojos, escuchó que suelta una pequeña risa. Mientras el juego continuaba menos miedo me causaba, hasta que llegamos a la cima en dónde nos quedamos unos minutos de cabeza, yo mantenía los ojos cerrados y los abrí solo unos segundos para ver a Jungkook que me estaba viendo con una sonrisa, su cabello colgaba y unas pequeñas venas se marcaban en su frente y cuello. Cuando el juego bajo sin aviso, me hizo soltar un grito y volver a cerrar los ojos, mientras que Jungkook grito un "Wuu" y solo se reía.

Cuando el juego por fin paró, bajamos y sentí que vomitaria los hotcakes que me preparó Jungkook.

Subimos a otros juegos y se me ocurrió la grandísima idea de colocarme los audífonos y escuchar Intro de The XX  mientras nos subiamos a un juego y así disminuyera un poco mi miedo, pero solo provocó que los dañara, pesíma idea lo sé.

Me comencé a sentir un poco mareada, nos detuvimos y nos sentamos en un banco. Me dolía el estómago y realmente sentía que vomitaria, Jungkook se levantó tomó mis manos y me dijo - Espera aquí, iré a buscar agua.

Vi como se alejaba y sentí que mi respiración se agitaba, intenté tranquilizarme y me recoste en el árbol que estaba detrás mío. Pasaron unos minutos y no regresaba, el lugar se comenzó a llenar de gente y me puse de pie para intentar verlo, pero mi altura no ayudaba mucho, comenzó a faltarme el aire y mi vista se nublo un poco, sentía que caería.

Me volví a sentar pero me sentía inquieta, me levanté y caminé entré la multitud para buscarlo, me invadió el miedo hasta que sentí que tomaron mi brazo he hicieron que me regresará, era él, su mirada mostraba preocupación al igual que la mía, al ver su rostro suspiré y lo abrace con fuerza mientras pequeñas lágrimas tibias caían sobre mis mejillas.

약속 ❦𝙾𝙽𝙴 𝚂𝙷𝙾𝚃⭒Donde viven las historias. Descúbrelo ahora