❝ǫᴜᴇ ᴅᴇᴄɪᴅᴀ ᴇʟ❞↬тαєjıηkσσk

*17*

By: SeokJin

Después de dormir toda la noche como un bebé me levanté a desayunar pero primero una ducha, cambiarme de ropa y salir fresco para un nuevo día de trabajo.

Luego de la noticia de Minho y Chan que no nos sorprendió en los más mínimo ya que cualquiera podría notar lo enamorado que están esos dos y me alegra mucho por ellos, es difícil encontrar a una persona a la que amar y en la que confiar.

-Buenos días Jinnie- me saludo Sun hee

-Buenos días- le devolví el saludo

-Me cae bien-

-¿Mmh?- no sabía a qué se refería

-Que me cae bien Taehyung-

-Si es agradable-

-A mi no me engañan que son solo amigos Jinnie- alzo una ceja

Suspiré -Sabia que a ti no podría ocultartelo-

-Te mira con los ojos- me respondió ella

-Claro, no me va a mirar con la nariz- solté un carcajada

-Ya, mocoso- me pegó juguetona- digo que te mira con los ojitos brillosos, brillan cuando te ven, como si fueras la obra maestra más hermosa del mundo.

No pude evitar sonrojarme un poco-No exageres Sun hee-

-No exagero mi niño, y ese rubor en tus mejillas me dicen que a ti también te gusta- empezó a hacerme cosquillas haciendome reír como loco.

Después de una serie de cosquillas y burlas por parte de Sun Hee sobre Taehyung, me subí al auto y fuimos rumbo a mi trabajo, en el camino no pude evitar pensar en lo que dijo mi Nana ¿Taehyung me gusta? Mientras hacía una lista mental de los pros y contras de él, habíamos llegado, mientras entraba todos me miraban y sonreían también susurraban con su compañero de trabajo, eso me désconserto, la última vez que estubieron así cuchichiando salí escrachado en una revista.

Rápidamente subí al ascensor para dirigirme al mi lugar de trabajo, pero al abrirse esté indicando que había llegado a mi destino, unas rosas muy rojas estaban frente a mi puerta en unas manos grandes y varoniles, que eran dueñas de un hombre muy hermoso camine hacia el con una sonrisa, me encantan los detalles haci tan lindos y simples. Mientras caminaba me cuestionaba de nuevo la pregunta que me hice en el auto, ¿Me gusta Taehyung?

-Espero que te guste la sorpresa bonito- me dijo mientras me las extendía con una hermosa sonrisa a la cual me acostumbré y con esos ojitos brillantes.
¿Me gusta Taehyung? Si, me gusta Taehyung

-Gracias Tae, si me encantan- las tomé en mis manos mientras las apreciaba.

-¿Las rosas nomás?- levanto una ceja

-Tu también- le respondí con una sonrisa

-¿O sea que te encanto? - abrió los ojos grandes seguido de una enorme sonrisa

-Yo no dije eso- le golpeé en forma de juego

-Auch- yo reía - dijiste que te encantan las rosas y yo también, ya lo dijiste no puedes cambiarlo- yo solo seguía riendo - Me tengo que ir, paso más tiempo en tu empresa que en la mía, ya mis trabajadores me tomaran la empresa - me dió un beso en los labios súper rápido -Chau - y se marchó al ascensor mientras yo lo saludaba con la mano.

-Al parecer Kim tiene un lado tierno a parte del egocéntrico- me di la vuelta encontrándome con Jungkook, no lo ví cuando llegue al lugar de Taehyung.

-Si, al parecer si- sonrió sin ganas y empujó la lengua en su mejilla, un gesto bastante... Sexi y también confuso para mí -¿El café es para mí?- cambie de tema para liberar tensión, había visto que en su escritorio estaban dos vasos de café.

-Si, lo era, esperaba a que llegara y beber de el juntos mientras, si usted quería- aclaro -hablaramos sobre el caso de su madre -

-¿Porque "era"? Ya no lo es -

-Esta frío, llego más tarde que antes-

-Ya desayuné supongo que tú también-

-No, yo lo estaba esperando...- que lindo y que culpable me sentí

-Bien, entonces trae dos cafés más, te estaré esperando-

-Pero me dijo que ya desayuno-

-Eso no importa, tu no lo hiciste-

-Puedo hacerlo solo - se encongío de hombros

-Pero yo disfruto de tu compañía así que te espero - desaparecí entre las puertas antes que diga algo más.

Después de unos minutos llegó con lo pedido en sus manos, tomo asiento y me extendió uno a mi.

-Son lindas- dijo de repente

-¿Que cosa?- dije confuso

- Las rosas - fijo su mirada en un jarrón que reposaba en una de las mesitas de la habitación.

-Ah, si lo son- dije mirándolas

-¿Están saliendo?- me ahogue con el café por lo directo que fue en su pregunta

-No, no lo estamos o al menos formalmente-

-Ahh, ¿Lo quieres?-

-¿Disculpa?-

-Lo siento no es de mi incumbencia- respondió rapido

-No te preocupes-

-¿Tienes noticias nuevas del agente?- dejo su vaso vacío en el escritorio y se volvió a acomodar - Digo, se te ve tan cómodo que parece que no pasó nada-

-¿Que insinuas?- pregunté a la defensiva, no sabía a dónde llevaba esto

-Parece que ahora están tan ocupado con Taehyung que ya no te importa el caso, ayer mientras llorabas en mi consuelo no parecía así- tenía un semblante despreocupado y eso me dolía, que tan despreocupadamente diga algo que me afecte tanto

- ¿Dices que no me importa mi madre? - me levanté de mi lugar y lo encare - ¿Que por qué estoy en compañía de un hombre mi madre y el que su probabilidad de que esté víva no me importen? - lágrimas comenzaron a amenazar en salir y su rostro cambio a uno de preocupación

-Perdon no quise decir eso SeokJin no es cierto- se levantó rápido de su lugar intentando acercarse

-lo hiciste lo dijiste Jungkook, tu fuiste testigo de lo que te conté de todo lo que me dolió en el pasado y ahora en presente sin saber ¡que mierda paso! -

-Si lo sé, se que estas preocupado y dolido, no se que me pasó pregunté lo de Taehyung más lo que ví en la entrada, me volvió loco- no entendía nada de los que decía

-¿Que quieres decir? No entiendo- me calme y lo mire esperando respuesta, el se pasó las manos por el pelo sin decirme nada - Habla Jungkook por Dios, tu no eres de hablar así ¿Que te pasa? - saco sus manos de su cabellera y se acercó más a mí.

-¿Quieres saber que me pasa?- yo asentí un poco perdido en el negro intenso de sus ojos -Tu me pasas...- solo de repente y bajo.

-¿Yo que hice?- pregunté sin entender, pero no escuché respuesta alguna, solo ví su rostro muy cerca del mío y después me beso, me quedé estatico estaba desconcertado solo sentía sus labios moviéndose sobre los míos, pero después de unos segundos me deje llevar en la danza del movimiento de sus labios, entonces pasó, se intensificó, pero no introdujo su lengua en ningún momento, fue dulce.

Se separó de mi, con sus labios levemente rojizos y ojitos más intensos que nunca, yo debo estar tan rojo como un tomate.

-Me vuelves loco SeokJin, eso me pasa-