"Hermosos recuerdos, solo eso queda. Recuerdos que nublan los malos momentos, aquellos momentos que nos dejan cicatrices imposibles de borrar. Solo eso queda, aquello que nos hace vivir en un momento de ensoñación, bajo el hechizo de un pasado que no nos quiere dejar ir".
-Hermana que puedo decirte que no sepas, eres mi luz, lo que más quiero en está vida. Aún recuerdo como era nuestras mañanas; eras mi despertador con todas tus ocurrencias. Fuiste mi gran apoyo cuando nos quedamos solas.
-Sabes siempre admire tu fortaleza; fortaleza con la que le hacías honor a tu nombre. Hubiera querido tan solo tener un poquito de la fuerza que tienes, para poder haber afrontado de frente todo aquello que nos hizo daño.
-Hermanita lamento no ser la hermana que hubieras querido tener, siento tanto no haber hecho nada y haberte dejado cuando más me necesitabas. Siento no haber cumplido la promesa de cuidarte, protegerte y no dejarte sola. Lo siento mucho hermana.
Las lágrimas recorren mis mejillas como caudales de rio en plena tormenta. No quiero separarme de ella me niego.
-Emma tienes que descansar, no has comida nada en días.- Camila intenta separarme del féretro, pero me niego totalmente a separarme de ella.
Ella era mi todo y ahora se ha ido, me ha dejado sola. Mi corazón esta hecho trizas, me duele el alma, el tan solo respirar me lastima.
-Todo esto es culpa mía, yo la deje cuando más me necesitaba. Fui una egoísta, solo pensé en mí. No me di cuenta de que ella, estaba sufriendo igual que yo.
-Como pude darle la espalda cuando más me necesitaba, ¿Cómo puede hacerlo Camila?¿Cómo pude?...
Sin más me desplomo, todo mi cuerpo tiembla de dolor, me duele mi pecho; las lágrimas y los sollozos no cesan. Siento que estoy viviendo una pesadilla, pero no es así esto es real. Ella murió y yo no hice nada para ayudarla.
-Amiga tú hiciste todo lo posible para ayudarla, no tienes la culpa de absolutamente nada. Fuiste una gran hermana. -Las palabras de Camila tratan de hacerme creer algo que no fue y jamas podrá ser.
Ella me abraza tratando de consolarme, aunque se que sus palabras son mentira, agradezco que haya tratado de consolarme.
Entre mis sollozos y lamentos, empiezo a escuchar ciertos murmullos, mi amiga se pone tensa y logro ver cierto gesto de ira en su cara al ver hacia la entrada de la funeraria; haciendo que ese gesto suyo me haga voltear a ver a donde se dirige su mirada.
Mi cuerpo inmediatamente se tensa, toda el sentimiento de ira y rencor se adueñan de mi persona. El odio que siento por ellos es tan grande, que solo su presencia me provoca nauseas. Lo único que deseo es que ellos se vayan, ya después encontraré la forma de paguen todo lo que han hecho.
Me acerco a ellos lentamente, con toda la tranquilidad que me da la ira contenida, aquella que esta a punto de salir y hacer justicia por su propia mano. Pero se que con eso no ganaría nada, así que decido mantener todo el control posible ante ellos.
-¿Qué jodidos hacen aquí?¿Quién les dijo que tenían derecho a venir?
El asqueroso de Demian, se me acerca demasiado, ocasionando que sienta nauseas con tan solo tenerlo cerca.
-Vaya, vaya sobrina, no sabía que manejabas un lenguaje tan florido. Al parecer la educación que te dio mi madre no sirvió de nada. Ya vez madre y tú que tanto te preocupaste por darles lo mejor. Al parecer criaste unas malagradecidas, una... bueno una ya no esta con nosotros, que en paz descanse- dice esto mientras hace un gesto religioso emulando la señal de la cruz con sus manos - Y la otra, no puede ser que te quiera correr del funeral de tu nieta.- Dice todo eso mirando a la abuela-.
La forma en que lo dice, con su sarcasmo estúpido, hace que crezca mas mi enojo. No se como todavía he logrado mantenerme controlada; para no saltar encima de él y agarrarlo a golpes.
La abuela por fin esta por abrir la boca, y soltar la sarta estupideces que esta acostumbrada a decir. Pero antes de que ella empiece con sus reclamos y se empiece a victimizar como siempre; yo empiezo a hablar y decirle varias de las cosas que siempre le he querido decir.
-Que carajos hacen aquí, y sobretodo a tú abuela como se te ocurre venir con este animal al funeral de Valeria. Cuando tu sabes perfectamente que él es el culpable de todo esto; como lo permitiste Natalia. Como permitiste que este asqueroso se acercará a mi hermana, que se acercará a nosotras.
-No sabes cuanto te odio por no hacer nada, por pretender que no pasaba nada; cuando tu sabías absolutamente todo lo que pasaba. Eras cómplice de este asqueroso animal.
-¡Basta!... No te cansas de decir tonterías y levantar falsos. Tu tío es una persona respetable y si no fuera por él... -Contesta la abuela, sumamente ofendida.
-Él que abuela, acaso pretendes decir que gracias a él aun vivo, por dios Natalia ustedes nunca nos dieron nada, solo humillaciones, vejaciones fue lo que obtuvimos de su parte. Y todavía tienen el descaro de pararse aquí y querer hacernos creer como que no paso nada.
-No abuela yo no te perdono el que hayas hecho de mi vida y la de mi hermana un infierno. te odio como no tienes idea. Eres la peor persona, y él es un asqueroso, pero tu eres peor que él porque aun sabiendo que clase de animal es él, nunca has hecho nada par frenarlo. Te odio Natalia, los odio a ambos y espero que algún les llegue esa justicia que tanto anhelo y...
-Ya basta de tanto drama sobrinita, mira como dejaste a tu abuela por tanto reclamo.
El rostro de la abuela parecía que había perdido todo color y sus labios temblaban horriblemente por el coraje que tenía. Pero era lógico que ella solo se iba a quedar callada. Siempre le iba importar más el que dirán, que lo que les pasaba a sus nietas. Esos eran secretos que se deberían de quedar entre las cuatro paredes de su hogar.
- Bueno sobrinita, ya que no somos bienvenidos, pasamos a retirarnos. Madre es hora de irnos.
Agarra a mi abuela de su brazo para que ella lo siga, pero como el infeliz asqueroso que es, hace una última jugada.
-Creo que se me olvida algo, me olvidaba despedirme de ti sobrina .
Se acerca a mi, yo intento alejarme pero el hábilmente me agarra bruscamente de mi brazo; haciendo que me acerque más a él. Se acerca a mi oído y me susurra...
-No creas que me voy a olvidar de ti pastelito, pronto mucho antes de lo que crees va a saber de mi. Hueles delicioso ¿Vainilla?
Por fin logro zafarme de su agarre, mientras él se va con una sonrisa demasiado tétrica en sus labios.
Mi cuerpo no reacciona, estoy en shock. Como pude olvidarlo, como fui tan tonta para hacerlo. Rompo en llanto, como si todo aquello que estaba reteniendo quisiera salir. Camila me abraza queriendo darme consuelo; gesto que agradezco enormemente.
Una cosa si tengo bien clara, jamas voy a dejar que el asqueroso ese me vuelva a hacer daño. Maldito Demian, donde quiera que te encuentres voy a hacer que pagues por lo que nos hiciste a mi hermana y a mí. Gracias a tu estupidez, me ayuste a recordar, aquello que había olvidado, eso es lo que te va a llevar a la ruina.
Juro por mi vida que voy a hacer que pagues por todo.
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Solíamos ser.
ChickLitElla con un gran dolor, remordimiento, desasosiego, ira y un profundo vacío; se encuentra totalmente perdida. Él de corazón frío y alma herida. Que podría ser lo que el destino tiene preparado para estos dos viejos amantes, que pasara cuando s...