Capítulo 28

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Jimin sostenía suavemente una de las manos de su padre entre las suyas mientras suspiraba con tristeza, esta era la primera vez en años que estaba así de cerca de su progenitor, y le dolía mucho que fuera en esa situación.

Su padre y el nunca habían sido los más cercanos, pero al menos de niño cuando Jimin le mostraba sus buenas calificaciones Sung-rok le daba una mirada indescifrable, una pequeña sonrisa y luego le revolvía el cabello con la mano antes de decirle "Espero que sigas así".

Bueno eso fue antes de que Jimin empezara a amar el baile, después todo se fue una caída cuesta abajo hasta que esos lazos se rompieron totalmente.

Pero Jimin no podía evitar preocuparse y sentirse mal por todo lo que le estaba pasando a su familia, su hermana internada en sitio para alcohólicos, su hermano en la cárcel, su padre en esa camilla de hospital tratando de recuperarse y su madre ausente.

Era irónico pero ahora que Jimin estaba surgiendo como bailarín tenía un gran trabajo, tenia de pareja a Jeon Jungkook un exitoso y atractivo que lo amaba y lo hacía feliz, su familia estaba en el fondo del abismo, cuando siempre había sido al revés.

Jimin miró su reloj era casi media noche, Jungkook había salido de la habitación hace poco para conseguirle un café ya que Jimin se negaba a dormir, su novio no lo había dejado solo, estaba atento a cualquier cambio de su padre y aunque sabía que el doctor estaba preocupado por su salud a ese síndrome que tenía su padre ser genético le daba gracias por dejar de presionarlo para que se hiciera esos estudios.

Es que el fondo Jimin tenía miedo de descubrir que también estaba enfermo, era cobarde de su parte no querer enfrentarlo de inmediato pero por el momento solo deseaba quedarse allí a sostener la mano de su padre entre la suya y tratar de hacer que su mente asimilara todo lo que había sucedido en unas simples cuantas horas.

La puerta de la habitación se abrió y llamando la atención de Jimin que pensó que era Jungkook, pero cuando se dio levantó la mirada de encontró con el rostro de su madre, se veía desencajado, su maquillaje estaba corrido y sus ojos rojos e hinchados, Jimin jamás en su vida había visto a su madre con ese aspecto.

-Mamá ¿Te sientes bien?, ¿Fuiste a ver a Jae Hyun? ¿Cómo está el? - Preguntó Jimin de inmediato levantándose.

- No hagas preguntas estúpidas Jimin. ¿Cómo quieres que esté? ¿Cómo crees que me siento? ¡Jae Hyun está en la maldita cárcel y no tenemos ni siquiera para pagar un abogado! - Contestó ella con voz ronca.

-Mamá, de alguna manera vamos a lograr sacarlo todo estará bien - Trató de animarla Jimin para acercarse a ella.

-No seas idiota nada va a estar bien - Dijo SoHyun alejándose, le dio una mirada mordaz y llena de tanto odio que Jimin se quedó sorprendido - ¡Nada de esto hubiera pasado si no fuera por ti! - dijo entre dientes.

Jimin se quedó paralizado ante tal afirmación - ¿Qué? -

SoHyun negó con la cabeza - No nos queda nada, pensé que casándome con Sung-rok nunca volvería a vivir en la miseria, pero ahora no tenemos nada ni fortuna, ni prestigio, ni reputación, ¡ya no aguanto más! - Gruñó - mis hijos uno en la cárcel y la otra una alcohólica y Sung-rok muriéndose ¿para qué seguir ocultando la verdad? ¡De nada sirvió al final terminaste siendo la maldita destrucción de esta familia! -

- ¿D-de que hablas mamá? - Preguntó Jimin con un nudo en la garganta, no entendía que quería decir su madre pero esas palabras sin dudas estaban siendo tan dolorosas como dagas en su corazón.

- ¡Deja de llamarme mamá! Estoy harta de escucharte decime mamá los últimos 24 años de mi vida, ¡Yo no soy tu maldita madre! - soltó sin piedad con sus ojos llenándose de lágrimas, pero eran lágrimas de amargura y rencor.

𝕮𝖔𝖗𝖆𝖟𝖔𝖓𝖊𝖘 𝕰𝖓𝖗𝖊𝖉𝖆𝖉𝖔𝖘  ⁵ ♡KookMin♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora