se mi tatuadora(tokio hotel)(bill kaulitz)

Bienvenido A Mi Hogar /1

Bullhead city, arizona voy para allá.

Casi no dormí pensando en papá, como me hubiera gustado estar con él... Pero después pensaba que desafortunada me vería con él. Pero amaba a papá, él lo sabía más que nadie.

Me levanté a las 4de la mañana y me puse a buscar mi mejor ropa para un funeral, aunque nuestra familia no era normal y no había funerales iguales, con nosotros tenías que llevar ropa alegre, nada de lágrimas a menos que sean imposibles de guardar o de felicidad, música a todo volumen 15de cualquier invitado y una más favorita del difunto en este caso mi padre.

No podía dormir aún, salí de mi cuarto y vi a los 4dormidos en mis sillones, les hubiera cedido mi cama... Saque una botella de agua y la lleve a mi cuarto. Con mi celular comencé a buscar a alguien.

Connor salió como los más llamados y marque. Un tono. Dos tonos... Tres tonos..

-hola bebe ¿pasa algo? - contesto adormilado.

-no puedo dormir... ¿me cuentas un cuento? - pregunte como una niña.

-ummm claro ¿estas acostada? - me arrastré a mi cama e hice ruido para indicar listo-bien...veamos...había una vez una chica muy fuerte pero no de músculos mi pequeña Suri, fuerza de mente, voluntad entre otros. Ella...

Todo se interrumpió cuando quede dormida acurrucada con su voz adormilada.

7de la mañana y estaba despierta por el ruido de afuera. Me arrastré fuera de mi cama y fui a la cocina.

-buenos días, zurie - dijeron los cuatro en la cocina preparando el desayuno.

-te espera un largo viaje y será mejor que te pongas en movimiento-dijo Gustav, y tenía razón.

-gracias chicos, son tan buenos conmigo-sonrei-ire a vestirme y podemos salir bill.

- ¿ire con estas ropas? -pregunto disgustado al parecer no quería ir con su ropa.

-te ves bien...pero si insistes tengo ropa de los chicos.

-no creo que me las pueda poner, mi ropa es sagrada para mí.

-y no miente, tiene toda la ropa que usaba de más pequeño-dijo tom como si fuera normal la charla-pasa todos los días-me informó.

-bien, podemos pasar a tu casa, igual iremos en tu moto- informe a bill, él asintió contentó.

Fui a mi cuarto y me metí a la ducha mientras escuchaba el ruido de las cazuelas o platos, sonreí... Salí con mi toalla a mi alrededor y cerré la puerta, me seque y busque ropa interior, para después sumergirme en un short gris oscuro con manchas de tinta negra, una Camiseta blanca con un dibujo de una jirafa con globos (la compro papá para mi desde los 14 y bueno no eh cambiado mucho, supuse que haría frío así que me puse un suéter largo de lana y lo deje libre, unas botas vaqueras que me regalo mi hermano Emmett.

Salí y vi a los chicos en la sala con un plato para mí, lo agarré y salimos de mi casa con mis llaves y mi celular listos.

-tu camisa se ve vieja-dijo Georg mirándola bien.

-y lo es - sonreí por recordar cuando papa la compro - mi papá me la regalo.... Supongo que sería bueno llevarla.

Me picaron los ojos y parpadee varias veces para quitar las ganas de llorar.

-pronto estarás en tu casa- prometió Bill.

-sí, lo sé tú me llevarás.

La casa de los gemelos era linda y grande, se veía de un ambiente familiar no que la mía de una vaga en primera, sonreír al entrar pues olía bien, la sala estaba llena de fotos y cosas así. Me quedé asombrada pues dios que más quería, conocer a Tokio hotel, tatuar a Bill y ahora conocer su casa.

-ahora regreso, well-dijo Bill alborotado mi cabello-siéntete como en casa.

-gracias... - seguí a Gustav hasta la sala y me senté a su lado.

-la casa no muerde-dijo burlón, sonreí nerviosa... Podría aparecer su mamá o padrastro en cualquier momento no se.

-mamá salió-grito Tom desde la cocina- ¿Zurie quieres algo de comer?

-solo agua, por favor-pedí con un hilo de voz.

Llego después de unos minutos con un emparedado y un vaso de agua que me dio.

-gracias... ¿Bill tarda mucho? - pregunte cuando prendieron la tele.

-ni lo imaginas-se quedó pensando Tom - ummm... Media hora. Este temprano ¿a qué hora es eso...?

-el funeral-tenía que aceptar que era-siempre es a las 5de la tarde.

- ¿se quedarán a dormir allá? - pregunto exaltado

-supongo... Tranquilo cuidare a tu pequeño hermano.

-te lo agradeceré pero que no pase nada - me gruñó un ojo y sonreí.

Miramos televisión mientras esperábamos a Bill y como lo dijeron fue media hora.

Bajo con una camisa negra y una de cuadros en su cintura, un pantalón ajustado y zapatos normales. Venía hermoso.

- ¿lista zurie? - me levante y me tomó de la mano-nos vemos chicos.

-cuídense - gritaron.

Fuimos a la cochera y Bill saco una gran moto negra, se puso un casco negro y me paso otro del mismo color. Me lo puse sin tener cuidado con mi cabello y me subí abrazándolo.

-voy a arrancar ¿a dónde vamos?

-arizona - dije emocionada