Una Casa Sorprendente

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Y me estacione y busque la dirección o a los chicos y los encontré sentados en el pavimento y apoyados en el auto.

-por fin llegas, zurie-dijo mity poniéndose de pie-el señor no nos deja entrar

-yo me encargo-le guille el ojo mientras pasaba a su lado para tocar a la puerta verde.

Mire la casa por fuera, puerta verde pero un verde lindo y tranquilizador, los ladrillos naranjas encajaban perfectamente con su toque clásico de la casa, algunas enredaderas y plantas apenas saliendo, ya quería ver lo de dentro.

- ¿zurie well? - pregunto por un sistema de seguridad.

-si- dije presionando el botón de regreso- ¿puedo pasar ya?

Se escuchó un clic y abrí la puerta para encontrarme con un señor mayor con un traje perfectamente pulcro.

-buenas tardes, srita. Well. La estaba esperando.

-aprecio mucho su espera ¿le importa si mis amigos van metiendo mis cosas?

-oh para nada, que entren.. Siento no a verlos dejado entrar pero soy un viejo desconfío de todos.

-no tiene por qué disculparse- saqué la cabeza por la puerta y les hice una seña para que entrarán.

-bueno señorita ¿quiere dar un recorrido? - pregunto el haciendo una seña para que lo siguieran.

Dios la casa era fin hermoso la sala estaba junto a un pequeño comedor con cocina integrada, el baño era lindo y aprender, con una tina, había dos cuartos uno grande y uno mediano, un pateó con piscina de un tamaño aceptable para estar todos aquí.

- ¿una piscina? - pregunte con la boca abierta.

-sí, sí, a mi sobrina le gustaba nadar de niña pero lo ha dejado - comento viendo con nostalgia la piscina.

La casa estaba pintada de blanco con muchos adornos antiguos, era de dos pisos y dios ya estaba enamorada por su estilo antiguo-moderno.

- ¿y qué le parece? Le dejaré las alcobas tal y como están - o comento cuando bajamos las escaleras.

Cada cuarto tenía una cama matrimonial, igual que cuando rente la otra, la verdad estaba feliz que me dejarán la cama o si no tendría que dormir en el sofá por un tiempo.

-oh dios, gracias - comenté en un susurro para que no me escuchará el señor.

-están los pagos al corriente hasta el próximo mes que es donde tú ya lo pagarás... Ummm si decides tener todavía la seguridad te recomiendo que cambies de contraseña ¿quieres que te diga cómo? Para que la cambies ahora.

-oh si... Eso sería grandioso.

Me guio a una pequeña caja que se encontraba detrás de un cuadro grande en el cuarto, me enseñó como conectarlo a mi tiempo y comodidad, del 1 al 9 tenía que escoger los 9 dígitos para poder abrir la puerta y cerrarla, decidí poner esta *573196248* era una forma fácil de recordarla, la puerta era así, además de poner llave tenías que poder el dígito por si no encontrabas la llave tenías esa forma de entrar. También había cámaras de seguridad.

-en realidad yo no tenía todos estos sistemas programados pero cuando vino tu padre y su hermano creo yo me dijeron que si lo podía poner y como negarme a ese señor ¿cómo se encuentra?

-acaba de fallecer- comenté con bilis en mi boca.

-oh como lo siento no fue mi intención... Tenía años por vivir.

-todos pensamos eso- comenté de nuevo un poco más tranquila.

-bueno, me retiro. Si necesita algo llame deje mi número junto al refrigerador.

se mi tatuadora(tokio hotel)(bill kaulitz)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora