¡MI Taemin-hyung!

La imagen y la idea en general de este fanfic pertenecen a la artista MitsuMango, yo solo me aloqué escribiendo esta disparatada historia.

¡Disfruten la lectura!

¡Tímido!

De todas las cosas que pudo haberle dicho Taemin (increíble, atractivo, talentoso) tuvo que decir que era tímido. Podía escuchar las risas escandalosas de Lucas y Mark resonar por toda la habitación, regocijándose de su miseria.

Qué grandes amigos se consiguió.

Les aventó una de sus almohadas como protesta por ser unos idiotas con sus sentimientos, ganándose todavía más burlas de los más jóvenes.

—Vamos, hyung, no puedes negar que es un poco divertido —dijo Mark para justificarse al notar que Ten estaba viendo fijamente las bolas de billar, probablemente debatiéndose en si aventárselas para callarlos de una buena vez.

El mencionado nada más gimoteó mientras se hundía más en su cama, esperando que con su suavidad pueda llevarse sus pesares, pero lamentablemente no, seguía sufriendo por un lindo idiota.

—Es divertido que el seguro y descarado Ten sea descrito como tímido —esta vez fue Lucas quien habló, limpiándose las lágrimas que salieron por reír demasiado —. Jamás creí vivir lo suficiente para escuchar eso.

—No es divertido —se quejó incorporándose para quedar sentado.

—De todas formas, no puedo creer que Taemin-hyung sea tan tonto como para no notar que te gusta, digo, no eres nada sutil con ello.

—Tampoco lo puedes culpar, si yo fuera él creería que Ten-hyung me odia —como siempre, el bueno de Mark defendiendo a los demás incluso sin estar presentes.

Pero (odiaba admitirlo), tenía un buen punto. Las veces que Taemin intentaba acercársele a platicar Ten salía despavorido o simplemente se quedaba incómodamente callado. En su defensa ¿qué podía hacer uno si tu crush de toda tu vida se acerca a ti? Super M fue una oportunidad milagrosa de poder estar junto a su hyung más allá de los escuetos saludos o pequeñas pláticas en los pasillos de la SM, pero nada significativo debido a los ajetreados horarios de ambos; mas ahora podía verlo más seguido ¡y hasta vivir bajo el mismo techo! Un sueño hecho realidad.

Obviamente no era tan ingenuo como para creer que sería sencillo, quitando su condición en que su cerebro dejaba de funcionar cada vez que Taemin entraba en su radar, estaba también el hecho de que el mayor también era su sunbae con más de diez años de carrera como idol encima de él, por lo que sentía que estaba fuera de su liga. Pero tenía esperanza que con el tiempo pudieran volverse amigos y, si se permitía soñar muy lejos, tal vez evolucionar en algo más.

Claro que en el grupo se encontraban dos amigos muy cercanos de Taemin; Baekhyun y Jongin, siendo el último además su mejor amigo de la infancia. Sería congruente que el mayor prefiriera pasar su tiempo con sus dos compañeros, cosa que ocurrió en un principio. Después, gracias a la habilidad nata de Baekhyun de divertir y relajar a todos, lograron hacer que tanto los más jóvenes como los mayores pudieran integrarse con naturalidad, haciendo que lindas amistades surgieran de ello como la adorable relación de hermandad entre Jongin y Mark y la alocada de Baekhyun y Lucas debido a sus personalidades energéticas. Pero nunca imaginó que una de ellas fuera la de Taemin y Taeyong.

No lo malentiendan, Ten está muy feliz en que Taeyong por fin pueda liberarse del inmenso estrés que conlleva ser un líder y dar rienda suelta a su lado más infantil y empalagoso, sobre todo dirigido hacia los mayores. Le alegra por fin a su hyung relajado y más abierto ya que como líder siempre tiene que mantener la integridad y compostura para proyectar esa imagen de firmeza y confianza a los demás miembros. Sólo que no pensó que el objetivo de todo ese cariño recayera mayormente en Taemin. Ten sabe por experiencia lo tímido y un poco torpe que Taeyong puede ser con la gente que apenas conoce pese a su gran atractivo, cosa que tiene en común con Taemin y por eso no creía posible que ellos dos lograran conectarse tan rápido como lo hicieron.