Érase Una Vez Un Ángel y Un Demonio (YEWOOK)

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"Quiero todo de ti, mientras yo sea libre"

No sabía cómo, ni cuando, había sido arrastrado hasta un parque, usando una diadema de las orejas de un tal Mickey Mouse en sus negros cabellos, empujando al delgado hombrecito, que se encontraba feliz en el columpio; pensó que posiblemente lo había engatusado con su belleza para traerlo hasta acá, pero recordó un pequeño detalle; El alma del chico era pura, sin pisca de pecado, ¿Entonces? ¿Qué le hizo ese muchacho?, lo que no sabía y no entendía Yesung es que el "amor" era el arma más grande del mundo.

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- ¡¿ENTONCES TAMBIÉN ERES UN EXTRANJERO?! - quiso despejar un poco la idea del que chico era maravilloso, poniendo en prioridad, el porqué de su venida, era más que obvio que necesitaba a esa alma para al menos tener donde descansar.

Pero no siempre las cosas salen como uno las espera, Yesung entablo una conversación para nada aburrida con Ryeowook, más bien era divertida y amena, pero al punto de poner su plan en marcha, se enteró que Wook también pasaba de visita.

- Sí, quise conocer este lugar - Ryeowook era sincero - Solo me quedare pocos días- explico.

- ¡Mh! - Yesung se sentía confundido sabía que tenía que buscar otra persona pero no quería separarse de la cosa linda que tenía en sus narices.

- ¡Espera! - el pequeño paro de comer y miro a Yesung. - Es decir, ¿ Qué también te encuentras solo en este lugar? - lo cuestiono y Yesung le sonrió.

- Sí, pero no es cosa del otro mundo, solo serán pocos días y...- no pudo terminar de hablar ya que Wook se había parado de su lugar.

- Nada de eso, no es bueno que una persona haga memorias solo, yo te acompañare - lo paro de su asiento y comenzó a llevarlo a las fuera del restaurante - ¡Mh! – puso su dedo índice en su barbilla - ¿Por dónde comenzamos? - vio que el Wook rascaba su cabeza.

- Ryeowook, enserio no es necesario, yo creo que...- volvió a callar al ver la expresión

- Entiendo – lo soltó desilusionado - Quieres estar solo y yo lo estoy impidiendo. - dijo en voz baja.- Esta bien, espero que su viaje sea inolvidable, Dios te bendiga.- eso le había caído a Yesung como balde de agua fría, era la primera vez que lo bendecían en su existencia y era extraño.

Vio como Ryeowook se alejaba ante su vista, solo basto segundos en que le diera órdenes a sus piernas para correr tras el castaño y llegar a su lado.

- Bueno y... ¿A dónde vamos primero? - pregunto al quedar a lado del chico, el cual al principio se sorprendió, pero enseguida le sonrió.

◄ FIN FLASHBACK►

- ¡Oh! Entonces fue así como llegue aquí - llego a la conclusión, sin darse cuenta había pensado en voz alta y columpio también había parado.

- ¿Yesung? - escucho su nombre miro al castaño bajo el y rio al ver la imagen que vio. - Eres un poco raro, hablas y te ríes solo de la nada. - Wook río igual.

- No me río de la nada.- Yesung actuó ofendido.- La verdad es que tienes helado en toda la cara.- y volvió a estallar de risa al ver la expresión de Wook.