Érase Una Vez Un Ángel y Un Demonio (YEWOOK)

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El ángel comenzó a vivir lo que era la desesperación, no quería irse, no quería separase de Yesung, pero << ¿Por qué?>>, sería que se había enamorado del demonio, pero ¿Y Sungmin? ¿Siwon? ¿el pequeño Donghae?, el demonio estaría dispuesto hacer una promesa y cumplirla, pero en la mente de Yesung pasaban los mismos pensamientos << ¿Wookie estaría dispuesto a dejarlo todo para regresar?>>

El reloj marcaba nueve de la noche los chicos habían terminado de comer, Ryeowook se encontraba en el cuarto arreglando su pequeña maleta con mucha tristeza apretó con sus manos sus ojos le comenzaban arder y demasiado, cuando inesperadamente lagrimas comenzó a caer de su rostro, no podía parar era algo que necesitaba, sentía dolor y era horrible, Yesung entro corriendo asustado al sonido desgarrador que daba en el ángel y se paró en el umbral al ver a Wook llorar.

- Ryeowook ¿estás llorando? - pregunto acercándose y él lo miro.

- ¿Llorar? .- se dio cuenta que lo hacía de dolor, era su primera vez llorando.

- Ryeowook, los ángeles no lloran.- el demonio le seco una su lagrimas.- He escuchado que hay escapes de los demonios para...- Yesung callo al sentir los brazos delgados rodeándolo.

- ¡No me quiero ir! - hablo llorando el ángel. - ¡No me quiero separar de ti! -volvió hablarle el pelinegro lo abrazo. - Me enamore de ti.- confeso haciendo que el pelinegro vea a esos castaños cabellos y quiso llorar pero de emoción.- Te amo Yesung.- Wookie levanto la mirada para verlo y el demonio lo vio.

- Yo también me enamore de lo prohibido. - confeso el pelinegro tomando el rostro para comenzar a besarlo.

Un beso que comenzó tierno se fue volviendo a pasional, El demonio carnal volvió aparecer, pero esta vez junto al demonio racional, Ryeowook sabía lo que pasaría lo había aprendido, iban unir lazos, iban unir corazones, iban unir almas, pero lo más importante iban unir sus destinos.

Yesung recostó a Wookie en la cama, se miraron, el pequeño sonrió, el pelinegro toco su rostro delicadamente y lo volvió a besar. Poco a poco despejaron sus ropas juntos, el mayor comenzó a descender por el cuello blanco dándole pequeños mordiscos, sacando los primeros gemidos de Ryeowook, eso excitaba; el demonio siguió descendiendo hasta parar en las tetillas del ángel y les dio la atención debida poniéndolas erguidas; Ryeowook era un ángel, a él nunca le iba avergonzar su cuerpo, pero quería el ambiente más romántico y con un chasquido con los dedos apago las luces del cuarto.

El demonio rio con eso.

- Voy a corromper a un ángel - Yesung le dijo para volver a besar y después dirigirse al ombligo del castaño.

- ¡Agh! No es justo. - dijo entre gemidos el ángel, Yesung lo miro de donde estaba.

- Claro que lo es, tú me corrompiste haciéndome amar.- Ryeowook lo quiso ver ante lo dicho pero Yesung fue más rápido y metió el miembro de Wook en su boca para ganarse un gemido de su amor.

Ryeowook sentía placer, sensaciones nuevas en su larga existencia, ahora sabía que era pecar. Sin esperar mucho agarrando fuertemente la sabana tuvo su primer orgasmo viniéndose en la boca de Yesung, este se separó de su miembro y bajo a su entrada y comenzó a prepararla con su propia lengua cuando el ser negro pensó que era suficiente volvió a subir y dio un beso en la frente del ser divino.