El Chico De Mis Sueños ©

CAPITULO 1

CAPITULO I

-Entonces, solo fue mi imaginación?- Pregunto con los ojos llenos de lágrimas a la señora Martha, mi psicóloga, de algunos cuarenta años, si no me equivoco.

-Cariño, era tu subconsciente.- responde y quedo aún más confundida.

04/04/2014, Tres años antes.

- ...Mírala, tiene ropa de la década pasada.

- ...No tendrá vergüenza de sí misma?

Escucho mientras camino al aula de clases junto a mi mejor amiga, Valentine, sé que hablan de mí, normalmente no estoy muy a la moda, ni tampoco soy la más querida en mi instituto, pero estoy bien con lo que soy, me costó mucho trabajo aceptarme como soy y ellos no van a arruinar mi estupendo trabajo.

-Si no me hubieras prometido ese helado, los estaría golpeando a todos, lo juro, Yaz- dice Valentine entre dientes, tirando la puerta del casillero, le prometí un helado a cambio de que no discutiera nada, no quiero problemas.

-Churca, relájate, sabes que ese tipo de comentarios dejo de afectarme hace mucho, ade...

-Además tienes tu propia esencia y nadie cambiara tu pensar.- termina ella por mí y me sonríe de boca cerrada.

-Por eso te quiero tanto, eres tan fuerte.- continua- oye - se da cuenta de el apodo que he usado y frunce el ceño, Valentine tiene el cabello rizado, por lo mismo algunas veces le digo churca, cosa que ella odia, pero sabe que es de cariño.

-Claro, lo dice la chica que comió brócoli puro sin escupirlo – digo y ambas reímos.

Levantamos la mirada y al final del pasillo están Alex y Eduard Jersey, los fucboys del instituto, todas las chicas dicen que están guapos, pero yo solo veo a dos más.

Siento unas caderas chocar con las mías a modo de baile cómico, de inmediato, deduzco que es Dan, mi mejor amigo, volteo y lo abrazo muy fuerte, estuvo todo el verano en Inglaterra, con sus abuelos maternos, realmente lo extrañe.

-Por el carajo!, Dan te extrañe un montón.- digo aun abrazándolo.

-Am... linda, creo que me confundes.- Un momento, ¿Qué?, miro hacia arriba y, definitivamente este no es mi mejor amigo.

-Oh, lo-lo siento mu-mucho- siento mis mejillas arder, es un chico guapo, deberás que es guapo, no lo había visto por aquí, de seguro es nuevo.

El chico esta sonrojado, al igual que yo supongo, pero, no lo culpo, que te abrace una desconocida el primer día de clase de la manera en que lo hice?, pobrecito.

Tiro del brazo de mi amiga hacia el aula de clase, respiro profundo, esperando su show.

-Vi lo que vi, picarona la Yazmine- Dice Valentine subiendo y bajando las cejas de forma picara, y rimando con sus palabras.

-Pero de que hablas?, solo lo confundí con Dan, es todo.- de seguro estoy más roja que tinkerbell cuando se molesta.

-Claro, confundes un muy pero muy guapo chico nuevo con tu feo mejor amigo, lo abrazas como si el mundo se fuera a acabar y para cerrar con broche de oro, tartamudeas al pedir disculpas, tu nunca tartamudeas Yazmine, nunca lo haces.- me mira con cara de victoria, tiene razón nunca lo hago.

-Bien, tu ganas, me parece atractivo.- lo admito, si no lo hago hay un 100% de probabilidades de que me moleste con eso durante todo el día hasta que lo haga, es mejor ceder sin molestia.

-LO SABIA!, eso es lo que llamo, tecononoscomejordeloquecrees.- río por su palabra y ubico con la mirada el mejor asiento, en la esquina de la primera fila.

Me siento y acomodo mis cosas, llegamos al menos treinta minutos más temprano de lo normal.

Mientras acomodo mis pertenencias en el puesto, Valentine socializa con los nuevos estudiantes, no me molesta que me deje sola, me gusta estar sola, además esos estudiantes de nuevo ingreso deben de sentirse fuera de lugar, la mayoría nos hablan dos o tres semanas, mientras hacen más amigos y luego nos ignoran porque, como dije, no somos muy queridas en este lugar.

Siento una sombra sobre mí y al alzar la mirada me encuentro con Dan.

-DAN!, volviste.- Respondo entusiasmada y lo abrazo suave, creo que descargue toda mi energía en el gran abrazo que le di al chico allá afuera.

-Por supuesto cariño, aun no te cuidas sola y es mi deber venir a cuidarte.- dice y ambos reímos.

-Te extrañe mucho.- acariciándole el cabello, Dan es mi mejor amigo desde hace 4 años, él es uno de los pocos que nos siguió hablando después de ser nuevo ingreso, y luego se unió a nuestro pequeño círculo social.

-Yazmine - se sienta y me mira serio pero emocionado a la vez – sabes que investigue un poco más sobre lo que me comentaste de los sueños.- Dice y me emociono.

Soy una chica realmente aficionada a los sueños, me interesa mucho el tema, pues pienso que son realidades alternas a las que tu espíritu accede mientras tu cuerpo duerme, enserio todo lo que tenga que ver con sueños, me encanta.

-¿Qué averiguaste?- lo miro ansiosa.

-Bien, recuerdas que te mencione sobre la gran biblioteca de mis abuelos?-

-¿Si?- le respondo un poco confundida.

-Bueno, pues resulta que indague entre muchos, pero créeme que muchos libros para encontrar respuestas a las locas, pero interesantes preguntas que te formulas diariamente.-

Imposible.

IMPOSIBLE.

-Dan, a que te refie...

-Buenos días, estudiantes.- me interrumpe la coordinadora Eilyn Jersey mientras todos se ubican es sus puestos. Si, Jersey. Alex y Eduard, esos chicos problema que se hacen llamar fucboys, se evitan una gran cantidad de tardes en detención gracias a su querida abuela, la coordinadora.

Pero como quiero a esa vieja.

Realmente, no entiendo como pueden ser familia, la señora Eilyn es un angel, ella siempre estuvo al pendiente de mí y es ella quien me defiende cada vez que puede en los pasillos.

Aunque así suele ser mi relación con los profesores, no soy problemática y tengo excelentes calificaciones, creo que soy la alumna que todos los maestros consideran un ejemplo para los demás.

-Bienvenidos a este nuevo año escolar- dice sonriéndonos a todos – Espero hayan disfrutado de estas vacaciones de verano, nos estaremos viendo seguido, pues me han ascendido el cargo a subdirectora, cualquier problema, no duden en platicarlo conmigo- dice y me sonríe, le devuelvo el gesto - Feliz día para todos.- Y se va.

Trato de ir hacia el otro lado del salón, al puesto de Dan para que me siga contando que averiguo, sin embargo, no logro hacerlo, puesto que escucho el saludo de nuestra maestra de Portugués Jomara Carvalho.

[...]

-Repitan las chicas- dice mi maestra con su peculiar acento portugués, a lo que se entiende más como un: "Ripitan as chicas"

-Eu sou uma garota- repetimos todas lo que dice en la pizarra y alguno chicos repiten, haciendo que otros se burlen.

-Muy bien, chicos hicieron un excelente trabajo el día de hoy, espero que asi sea todo el año.- dice la portuguesa mientras recogemos nuestras cosas para ir a casa.

Valentine se ofreció a llevarme, pero tengo algún tiempo sin caminar y preferí hacerlo de regreso a casa, de igual forma son como veinte minutos, escuchando música, lo que se resume a nada.

Estoy en la esquina de mi calle a una cuantas casas de la mía, y entonces.

Lo veo.

.

Eu sou uma garota.

Yo soy una chica.