Hay magia allá afuera

Capitulo I: Bienvenida

Hola a todos, Soy Ovidia. Me enganché con la serie Amar es para siempre hace poco tiempo y realmente me encanta la interpretación que hacen Carol y Paula de sus personajes en la misma.

En la reciente entrevista, Carol menciona que le gustaría que la relación entre sus personajes avanzara y se me ocurrió algo trasladado a otra ciudad y con un poco de fantasía, como fan de Harry Potter que soy me dije genial crossover!. 

Espero que les guste, por favor, tenganme paciencia es la primera vez que escribo y desde ya todos los comentarios para mejorar son bienvenidos.

Terminadas las presentaciones.....

Capítulo I Bienvenida

9 February 1979, Leicester square, London, England

El frío se cuela entre la carne y da la sensación de acristalar los huesos. Pilas y montones de bolsas y cartones se conglomeran en las calles, prima un olor fétido, nauseabundo. Las ratas reinan en la ciudad. Más aún sobre estas horas del crepúsculo.

Bajo los pies de una imponente mujer de cabello castaño salpicado de hilos de plata, se lee el titular "Invierno del descontento" con fotos que retratan éste panorama y multitudes enardecidas reclamando algo. La misteriosa mujer suspira con facciones de preocupación, quizás ya no está tan segura de su propósito, aún así, con una mirada tierna acuna más firmemente el pequeño bulto entre sus brazos y marcha elegantemente en dirección a su destino.

Tres golpes en la puerta.

-¿Amelia,puedes ir tú?. Grita desde la cocina de ese pequeño departamento una mujer rubia que acaba de cerrar el horno y se dispone a cortar las zanahorias.

-Si cariño, ya voy. ¿Esperas a alguien?.

-No, es raro que llamen a la puerta a estas horas.

-Veré quién es.

Amelia es una joven de aproximadamente 28 años de edad, lleva su castaño cabello recogido con un pañuelo amarillo que hace de dialema, sus manos se apoyan sobre la puerta, tienen una textura áspera por las horas de trabajo en la fábrica, mientras, un ojo con iris miel y vetas de verde intenta averiguar a través del mirador quien interrumpe su noche.

Una desconocida. Quién estaba detrás de la puerta no era alguien que llamase a su puerta un día cualquiera, podría ser bien la esposa del dueño de la fábrica, todo en ella rememora el dinero. Impresiona estar sola. Tras esto, Amelia abre la puerta con cara de desconcierto.

-Buenas noches,¿puedo ayudarle?. Es en ese momento que Amelia nota el bulto envuelto entre mantas en los brazos de la dama.

-Buenas noches Amelia, ¿podemos pasar?. Contesta la extraña, señalando al niño en brazos.

-¿Le conozco? lo siento, no sé quién es usted.

-Perdón por mis modales, soy Minerva Mcgonagall, por favor permítame seguir con las presentaciones adentro, hace mucho frío y temo por la niña. Responde nuevamente la extraña con tal seguridad y autoridad que Amelia solo abre aún más la puerta dejando paso a las inesperadas visitas.