La sombra que me sigue

Cap2-Sueños extraños

Trate de hacer mi rutina diaria pero me era imposible centrarme sin pensar en lo que me dijo y como simplemente su voz me hacia volver a sentir escalofríos
—¡Kimiko!— sentí un grito detrás de mi lo que hizo que me detuviera y volteara viendo a Daph correr detrás de mi como si su vida dependiera de ello — Llevo 2 cuadras detrás de ti—hizo una pausa para tomar aire lo que hizo que yo hablara
—¿Para que necesitas a mi humilde persona? — la observe
—Haz estado tan distraída hoy que no haz ni notado que tenemos que entregar pasado mañana a primera hora un informe de mates y es en equipo— dijo mirándome con esa mirada que conozco bien— ¿Estas bien?
—Si estoy perfecta, y supongo que me toco contigo —dije escuchándose mas como un reclamo que como una duda
—Supones bien te toco mi excelente presencia como compañera de equipo—dijo acomodándose el uniforme para luego hacer una pose que según ella le quedaba"cute"
—¡¡Baf!!—solté un suspiro— Sólo dime que esta vez harás algo para que si se pueda decir que es un trabajo de equipo—mire como ella negaba con la cabeza— Lo supuse, vamos

Fuimos a mi casa y nos pusimos a hacer el trabajo digo a hacer yo el trabajo después de un rato se fue y decidí echar una siesta antes de bajar a comer

~Sueño~
Sentía que debía correr porque mi vida dependía de aquello sentía esos pasos tenebrosos atrás de mi y no se que me daba más miedo si que era de noche y estaba sola en un lugar que no conocía o sentir unos pasos junto a una sonrisa sicópata que se sentían cerca y cada vez mas cerca, apurada mire a todos lados ya que era una parte de una cuidad aunque muy poca iluminada me escondí adentro de un bote de basura ( aunque no habían muchos escondites) pues deje un poco de espacio para ver si pasaba por ahí aquello que tanto me aterraba en aquel sueño y lo vi el mismo chico que veía en todos lados estaba aquí en mi sueño
—¡No podrás esconderte para siempre Kimiko!— lo vi como se giraba y me buscaba pude ver una sonrisa macabra en sus labios y en la mano derecha tenia unas tijeras que botaban gotas de sangre — ¡NO TENGO ELECCIÓN TENGO QUE MATARTE!— hubo otro silencio de mi parte

<< Venga no es que valla a gritar : Y a mi que me importa para que aquel chico venga y me mate>> pensé

Sentí la vida cuando algo se movió llamando la atención de aquel psicópata con bastante silencio intente salir de ahí lo cual no sirvió de mucho porque cuando ya había casi abierto totalmente la tapa hizo un  ruido totalmente alto lo que hizo que se volteara
—Te encontré — vi como sonrió de lado y salte de aquel contenedor de basura y corri
—¡Dejame en paz bastardo! — sentía que debía correr y eso hacia pero mis ojos traicioneros comenzaron a llorar sentía mi pecho oprimido señal que me faltaba el aire y entonces lo vi ahí un niño pequeño de apenas unos 3 añitos aproximadamente con un osito de felpa en su mano izquierda y en la derecha una manta

<< Que mierda>> pensé

Pase por alado de aquel niño pequeño tan adorable y seguí corriendo hasta que sentí que grito mi nombre aquel diabólico ser

— ¡Kimiko!— volteo y lo vi con aquel niño en manos sonriendo mientras el niño lloraba tan desconcertado como yo— Quiero que presencie tu primera muerte cariño
—¡Nooooo!— pero fue demasiado tarde empezaba a apuñalar aquel niño y yo corrí hacia donde sabia que decía peligro—¡ Monstruo !— su rostro mostraba maldad y su cara con salpicaduras de la propia sangre de aquel chico vi como cogió la tijera y lo abrió en dos, mire hacia lado para intentar vomitar pero lo sentí como algo se encajo en mi
— A que sabrá tu sangre nena— y vi como toco la zona y metió dos dedos donde antes había estado las tijeras y los giro haciendo que yo soltara un gemido se dolor— Deliciosa pero es hora de morir— sentí las tijeras enterarse sobre mi pecho y solté un grito de dolor y con el mismo grito me levante doliendome en el mismo lugar del apuñalamiento de aquel maniático

—Hija estas bien— sentí que giraba la minija de la puerta y entraba a mi cuarto pues no veía nada ya que solo lloraba agarrando mía piernas  a mi pecho — ¿Mi bebe que te pasa? Estas toda sudada y llorando
—Ma.... Solo fue una horrible pesadilla— comencé a llorar más y mi mama me abrazo
—Kimi ve a bañarte y despeja la mente al menos si — y yo acentí con la cabeza y me dirijo a el maldito baño a darme una pequeña ducha para "olvidar mis miedos"

<<Algún día llegare a olvidarte y ahí seré la persona más feliz de este mundo porque aunque te tenga miedo todo en la vida acaba hasta la propia vida>> pensé