¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Ojalá todo lo que paso no fuera realidad...
Tomó su cuerpo con manos temblorosas y lo giro de manera lenta hasta conectar su mirada carmesí con la suya, un nudo se formó en su garganta al verlo, desangrandose y muriendo poco a poco
—Tanjiro...— susurro mientras sus ojos violetas se movían frenéticamente, por suerte ya habían llamado a la ambulancia que no tardaba en llegar, el pelirrojo entrecerro sus ojos los cuales se vieron llenos de lágrimas en cuestión de segundos —Tanjiro...
—Kanao...
Se mordió el labio inferior con las lágrimas deslizándose por sus mejillas, lo abrazo sin pensarlo, no le importaba ensuciar su vestido con la sangre de su amado, quería abrazarlo, fuertemente y no dejarlo ir, Tanjiro correspondió el abrazo con algo de dificultad, las heridas causadas por las apuñaladas que le dio Akaza le dolían un montón, sentía como sus latidos iban cada vez más lentos, como sus pulmones se comprimian y como el aire le faltaba, se sentía ahogado
¿Así era morir?
Era horrible
Kanao solo se mantenía aferrada a él sollozando sin consuelo alguno, pronto la ambulancia llegó y se llevó a Tanjiro directo al hospital, Kanao fue con el para no dejarlo solo
Porque aun sigo soñando que estarás al despertar,
—señorita...— levanto su mirada y la fijo en el doctor quien solo la observó con pena y tristeza —lo siento mucho...
—¿que...?
—Murio...
Desempolvo los recuerdos que un día yo viví
—no... ¡No, Tanjiro no puede estar muerto! ¡No!— gritaba a todo pulmón con las lágrimas cayendo como si de una cascada se tratara, se levantó y corrió hacia el lugar donde suponía que estaba el, el doctor trató de detenerla pero ella solo seguía corriendo
Se detuvo de golpe, se quedó ahí parada observando como unos enfermeros llevaban el cuerpo de su novio a la morgue, tapó su boca con las dos manos, el tenía sus ojos cerrados y su piel estaba pálida, se notaba que no estaba respirando, ella solo se mantuvo allí parada temblando
—Tanjiro...— cayó al suelo de rodillas rompiendo en llanto, el pasillo se lleno de los lamentos de Kanao en cuestión de segundos —¡Tanjiro!
Como si fueran retales de lo que sentí por ti...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
