Capítulo 82: ¿Quién se lo dijo?

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La sala de reuniones estaba completamente tranquila y no se oía nada excepto el ocasional tictac del reloj y el barajeo del papel.

La atmósfera era sofocante para todos los demás excepto para los dos jóvenes CEOs. Con dos hombres poderosos en la misma sala, sus auras competían entre sí por el dominio. Sería una sorpresa si la gente acurrucada en la esquina no fuera cautelosa.

Con cada segundo que pasaba, Zheng Tianyi sentía que su humor comenzaba a subir más y más. Yang Feng estaba mirando su propuesta seriamente y viendo que no hacía una expresión de disgusto, significaba que la propuesta podría ser aprobada.

Zheng Tianyi se alegró de haber arreglado el paquete de la propuesta antes de entregárselo a Yang Feng. Quienquiera que fuera ese consultor, hizo un muy buen trabajo corrigiendo los defectos y señalando todos los cálculos erróneos.

A pesar de que estaba fuera por sólo unos pocos dígitos, Zheng Tianyi todavía estaba muy impresionado por esa persona. Aunque la identidad de esa persona fue completamente oculta por Zhao Moyao, había sido capaz de obtener un poco de información de los miembros de la junta que estaban presentes durante esa reunión.

Escuchó que la persona ni siquiera necesitaba una calculadora para darse cuenta de que los cálculos eran incorrectos. De hecho, revisaron todas las propuestas para deliberar en el acto. No se dejó ninguna piedra sin remover porque la propuesta ahora parecía muy idealista y perfecta.

Habían pasado unos minutos mientras Zheng Tianyi esperaba ansiosamente la respuesta de Yang Feng. Golpeando sus dedos sobre la mesa, sacudiendo ligeramente una de sus piernas, y esperando ansiosamente la aprobación de Yang Feng, Zheng Tianyi parecía un niño esperando recibir su regalo de cumpleaños.

Pasando a la última página, Yang Feng finalmente dejó el inusual bolígrafo de metal pesado que le recordaba que podía arruinar por completo una empresa o hacerla más rica con sólo firmar su nombre en un papel.

Zheng Tianyi se sonrió a sí mismo ante el borrador perfeccionado. "Bueno, Yang Feng, ¿qué piensas de la propuesta?"

"Es una propuesta para un centro turístico en Nianjian. ¿Por qué te acercas a la Empresa Yang en vez de a la Corporación Zhao?" Yang Feng levantó la cabeza, con una expresión apática en su rostro.

La sonrisa de Zheng Tianyi vaciló un poco ante la pregunta directa. ¿Por qué si no? ¡La Corporación Zhao ya lo había rechazado! "La Corporación Zheng actualmente no tiene una buena relación con la Corporación Zhao en este momento."

Yang Feng no necesitaba que lo dijera porque ya sabía la verdad. Pero para él, era satisfactorio saber que incluso Zheng Tianyi sabía que la había cagado. Zheng Tianyi debió dejar a su obstinado gatito solo después de romper el compromiso. En cambio, cruzó la línea y llegó a humillarla y avergonzarla aún más.

"Pero esa no es la única razón por la que esta propuesta fue rechazada en primer lugar." Yang Feng sonrió en secreto cuando vio la expresión desconcertada de Zheng Tianyi.

"¿Cómo supo que fue rechazada una vez? ¡¿Quién se lo dijo?! Zheng Tianyi reflexionó mientras era tomado por sorpresa que Yang Feng había oído hablar del rechazo. Pensó que le pagaba a la gente lo suficiente para que mantuviera la boca cerrada, pero por desgracia, nada podía pasar de los agudos oídos y ojos de Yang Feng.

"Propuso abrir una gran atracción turística en Nianjian abriendo un centro turístico. Hubo una idea como esta en el pasado pero fue rechazada porque la compañía no hizo suficiente investigación en la tierra." Yang Feng se puso de pie, no queriendo decir más sobre esta tonta idea.

Mr. Tycoons Daring WifeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora