Estoy volviendo a escribir mi antigua historia en esta cuenta después del problema que tuve en la otra cuenta. Habrá unos pequeños cambios en la historia pero seguirá igual que la otra, espero que les guste
La Sombra entró a la tienda de Wen a las 3 de la madruga en hora de Tierra Firme, vio que se movía entre sueño y decidió despertarla palmeando un poco su rostro, Wen al sentir ese tacto se despertó y vio a la Sombra flotando sobre ella y que poco a poco se alejaba para darle su espacio, Wen se sentó en su cama, se tallo un poco los ojos, y se levantó lentamente y empezó a estirarse.
"Prepárate es de madrugada, al terminar la charla si puedes podrás volver a dormir y levantarte ya lista para la aventura de hoy en la Isla con los demás" Dijo La Sombra saliendo de la tienda de Wen.
Wen lo vio irse y sintió un escalofrío en su columna vertebral, se miró las marcas en su brazo, tomó su espejo y miró la marca en sus rostro, respiro hondo y se lavo la cara, se cambió de ropa interior, se puso una camisa verde manga larga, un pantalón jean, se cambió los vendaje de sus brazos, sus botas de Chica Perdida marrón, se hizo una trenza y salió de su tienda encontrándose con La Sombra que la esperaba.
"Chica Perdida, hoy saldrás de dudas, asique sígueme" Dijo la Sombra flotando hacia la tienda de Pan con Wen atrás de él.
Al entrar a la tienda Wen vio a Pan sentando en su escritorio que estaba mirando a sí dirección, Wen hizo una reverencia y se acercó a su escritorio.
"Ya la traje, estaré cerca si me necesita joven Pan" Dijo La Sombra saliendo de la tienda.
"Toma asiento Wen" Dijo Pan señalando la silla cerca de su escritorio.
Wen obedeció y se sentó en la silla y se puso recta mirando a Pan a los ojos.
"Tú eres de contar historias normalmente" Empezó Peter "Pero esta vez yo te contaré una historia que tiene que ver con tú abuela y conmigo" Explico Peter sin mirar a Wen a los ojos cosa que Wen se sorprendió mucho "Escucha con atención porque no lo repetiré" Advirtió Pan volviendo a mirar a Wen a los ojos cosa que Wen asintió y el se acomodó en su silla "Hace años antes que tú madre y tú nacieran cuando tú abuela Evangelina tenía 15 años de edad al igual que tú, note que estaba aburrida estando en su escuela y en su hogar, pero al momento que iba al parque ella era toda una chica diferente jugando con todos los niños y niñas de su misma edad y de edad más pequeña y una noche tus Bisabuelos hablaron con ella al respecto de comprometerla desde ya para per cebar el negocio familiar uniendo la con otra compañía. Evangelina no lo tomo bien y se fue corriendo del estudio de su padre a su propia habitación cuando vi que se calmo me acerque a ella y hablamos un poco y le conté sobre mi Isla y que si ella quería podía venir conmigo cosa que ella aceptó con gusto y así después de un poco de entrenamiento se volvió una Chica Perdida y una Madre para los Niños Perdidos hasta que bueno... Hubo un contratiempo en un ataque de Piratas..." La voz que Pan se fue quebrando poco a poco "Ella accidentalmente le corto el brazo a un pirata y se puso nerviosa..." Escucho a Wen jadear de sorpresa mientras, Pan al mirarla noto que sus ojos se habían agrandado y sus ojos mostraban horror y su mano derecha casi cubría su boca "De los nervios le dio un ataque de pánico, otro pirata casi la ataca de no ser por un antiguo Chico Perdido de aquí con el tiempo te lo diré..." Dijo Pan frunciendo el ceño un poco "Logré echar al Capitán y a los demás piratas, al voltear a ver a Evangelina ella se había desmayado en los brazos de Chico Perdido que la salvó del otros pirata, él me la entregó y yo la cargue de regresó a una guarida que teníamos para ese tiempo y la acosté en su cama para que descansara" Pan miró a Wen y vio que ella lo miraba atenta "De acuerdo... No te diré más nada pero si te mostraré para ello necesito que tomes mi mano" Dijo Pan tendiéndole la mano derecha a Wen, Wen lo miró y luego asintiendo tomó su mano.
Wen sintió que todo le daba vueltas y al terminar no sintió ni vio a Peter, ella se encontraba sentada en una cama y al mirar quien estaba en la cama jadeo por la sorpresa. Su abuela estaba ahí pero más joven, lo sabía por las fotos que su Abuela le enseñó una vez, miró sus manos y vio que estaban brillando, asique asimilo que nadie la podría ver, ni sentir, ni oír respiro hondo y miro a su Abuela y lo que acontecía.
Evangelina empezaba a despertarse y empezó a mirar a su alrededor de repente se levantó de golpe y corrió hacia la puerta y salió apresuradamente hacia la playa de la Isla para ver el amanecer ahí; Wen vio que su abuela suspiraba profundamente para después sentarse en una Palma y cerrar los ojos para sentir la brisa en su rostro, Wen noto que su abuela se veía hermosa y relajada en esa posición
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No pasó. Mucho tiempo para que un Chico Perdido se acercara a su abuela que curiosamente no ha visto en la Isla pero le parecía familiar
"Hola Evangelina" Saludo el Chico Perdido blanco de ojos verdes y cabello rubio liso.
"Hola William" Respondió Evangelina enderezándose para mirarlo "Si no te importa quisiera ir al punto de lo que paso anoche en la batalla con los piratas" Dijo Evangelina mirándolo a los ojos mientras se levantaba.
"¿Segura que quieres hablar de eso?" Pregunto William mirándola preocupado.
"Es lo mejor" Respondió Evangelina mientras entrelazaba sus manos.
"Evangelina... Primero que todo siéntate" Wen vio como el chico perdido de nombre William tomaba a su abuela de los hombros y hacia que se sentará de nueva estando en arrodillado enfrente de ella "¿Que es lo que recuerdas?" Pregunto William.
"Recuerdo... Que le corte el brazo a un pirata... Luego todo se volvió negro y hoy desperté en mi cama ¿Qué pasó?" Pregunto Evangelina mirándolo con preocupación.
"Después de eso, entraste en pánico... y empezaste a retroceder casi te ataca otro pirata de no ser que racione a tiempo, luego te ... desmayaste, Pan hecho a todos los piratas y te cargo de regreso a la guarida" Dijo William mirando a Evangelina preocupado.
Wen vio que su abuela tenía lágrimas en sus ojos cosa que le hizo derramar lágrimas también su querida abuela no lo hizo apósito fue un accidente. William abrazo a Evangelina cediendo que ella llorara en su hombro con todas sus fuerzas.
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