XXVII

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Jungeun estaba congelada, Jinsoul nunca le había gritado, al menos en persona, no le gritó tan fuerte, ni como para asustarse, pero le extrañó demasiado. Jinsoul solo había sido hasta ahora con ella cortante, bien cortante

—Yo...— habló Jinsoul dándose cuenta de lo que había hecho —perdón, yo...— sus palabras tampoco salían de su boca, se sentó en la cama y sacó un fuerte suspiro para agrupar sus palabras, su cabeza dolía, demasiado, sentía como pulsaba fuerte

—El desayuno está listo— lo único que logró emitir de su boca y salió de la habitación

Jinsoul levantó la vista para verla irse de su habitación, dejándola ahí pensando y las palabras en su boca, con su cabeza dando vueltas y sumando que le dolía mucho

Sin darse cuenta las lágrimas empezaron a aparecer por su rostro, sabía que estaba más irritable y sensible, pero no pensó que diría algo sin pensar, algo que haría que hasta ella misma se sorprenda de sí misma

Quería ir detrás de Jungeun, pero estaba hecha un mar de lágrimas, ¿Por qué no podía mover su cuerpo e ir detrás de ella? ¿Por qué a lo único que estaba atinando a hacer era a llorar ahí sin moverse?

Después de un rato pudo levantarse con la desesperación, a penas dio vuelta en la puerta de su habitación se topó con Jungeun que tenía un semblante serio

—Jungie, yo...— chocaron de frente, Jinsoul trataba de sacar palabras, pero entre el llanto y el nerviosismo casi no la dejaban, solo podía repetir un "yo" constantemente

—Jinsoul— llamó neutra no dejando que siga —Está bien, no has hecho nada malo— tomó el rostro de ella entre sus manos

—Pero...— Jungeun le negó aún con su mirada neutra en ella

—No hay peros— tomó un fuerte respiro —Es mejor que pienses un poco en ti, yo... Me iré a casa y es mejor vernos y hablarnos otro día—

—¿Qué?— Jinsoul no entendía, ella no necesitaba tiempo a solas, solo quería a Jungeun y estar en sus brazos por todo el tiempo posible

—Necesitas estar más tranquila y tomar un tiempo para pensar— acariciaba el rostro de la contraria y limpiaba parte de las lágrimas —Yo... Ya me voy, cuidate, ¿Si?—

Jinsoul no pudo emitir palabra alguna, intentó estirar su mano para pararla, pero Jungeun se había marchado muy rápido y ella cayó de rodillas al suelo

No entendía con claridad, ¿Ella estaba clara que si hacía eso iba a ser peor para la de ojos chocolates? No lo estaba.

Jinsoul como pudo se levantó y se dirigió a su cama, como Jungeun pedía pensó, pero no le ayudaba, le ponía peor, su cabeza dolía como el infierno y sus ojos ya estaban cansados de tanto llorar

¿Por qué se iba y la dejaba así si dijo que estaría ahí para ella? Ni siquiera la dejó hablar y formular bien las palabras para pedirle un perdón, ¿Por qué era tan tonta y no pudo hablar como corresponde? Su cabeza solo se consumía en preguntas y más preguntas

☆*:. o(≧▽≦)o .:*☆

Jinsoul había ido al trabajo con ese ánimo y rostro de muerte, sin embargo, como toda su vida lo ha estado haciendo sonrió forzosa ante los desconocidos

Changkyun notó el desanimo, pero prefiero no molestar con preguntar y solo le dio un largo y calido abrazo antes que se despidan en la salida

Al día siguiente llamó a Jungeun, pero esta no respondió, en ese momento sin querer soltó su teléfono trizando la pantalla con un trizado en medio de toda la pantalla, pero era lo que menos importaba en ese momento

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