Estoy afuera de la casa de Alan, mirando como todo lo empaca y lo llevan al camión de mudanzas, es invierno, hay nieve por todos lados, Denver debe estar como Inglaterra, estoy aterrada por tocar la nieve de mi ciudad, sonrió ante mi comentario, la nieve es igual en todos lados, pero la mía tiene algo especial, lo tiene a él, él la ha tocado…
-¿estas lista?
Sophia toma mis hombros, asiento y nos dirigimos al aeropuerto, cuando avisan que es hora de nuestro vuelo el corazón se me sale del pecho, son Horas de viaje, estoy ansiosa, estoy asustada, tengo miedo, tengo terror de verlo y odiarlo con todo mi corazón, tengo terror de que él ya me haya olvidado.
-Alice, despierta…
Siento que me mueven
-hemos llegado
Abro los ojos y Ambos me sonríen
-oye que linda pulsera
-aunque algo infantil –dice Alan-
Miro mi mano y ahí está la pulsera de pulgas, trato de sonreír y la oculto con mi chaqueta, Nos Bajamos del avión y tomamos un taxi
-he arrendado una casa en Denver, sé que no tienes donde ir así que bueno…
-está bien, Gracias Alan
Sonrió y miro el paisaje atreves de la ventana, todo esta tan hermoso, todo lleno de nieve, es Diciembre, los niños juegan afuera de las callen haciendo muñequitos de nieve, sonrió cuando un pequeño le tira una bola de nieve a su pequeña hermana, la madre sale y lo regaña, este va y abraza a su hermana pidiéndole disculpas, no puedo evitar sentirme mal, a pesar de todo extraño a mi familia, a la poca familia que me había quedado.
-hemos llegado –sonríe Alan-
La casa es enorme y es hermosa, entramos y dejamos todo listo
-será hermoso vivir la navidad aquí ¿no crees mi amor?
Alan abraza a sophia y la besa tiernamente
-donde sea, siempre contigo
Observarlos destruye cada vez los pedazos de mi corazón, así que decido subir a mi cuarto, ordeno cada cosa nueva que sophia había preparado para mí, arreglo mis cosas y me acuesto de inmediato, necesito dormir, dormir antes de que sea un nuevo día, he vuelvo, he vuelvo y me siento más perdida que nunca, más fuera de casa…
Al despertar al día siguiente, bajo lista para ir a dar una vuelta
-¿A dónde crees que vas?
Sophia me para justo antes de salir
-iré a dar una vuelta
-no, primero tomas desayuno
Hago una mueca
-Oh no jovencita, ven a tomar desayuno
-no me trates como una niña –sonrió- tenemos casi la misma edad
-Lo recuerdo, pero te gano por un año así que come
Pongo los ojos en blanco y recuerdo mi cumpleaños, lo pase en Inglaterra, Sophia y Alan tenían una torta de manjar, ese día recordé más que nunca todo, lo recordé y el no contesto.
-¿Y Alan?
-fue a comprar mercadería, Mañana nos tienes que ir a dar una vuelta por Denver
-claro –sonrió- ya termine, ¿puedo?
-ve –me sonríe- y Alice
La observo
-si lo llegases a ver…
