Sólo él,fue el único capaz de descongelar su corazón frío. Ayudarle en sus peores momentos,comprenderlo y hacerlo sentir como nadie jamás le había echo sentir.
Pero los sentimientos del albino estaban muy confusos. No los comprendía.
Ahora debe de a...
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El peliblanco llegó como todos las mañanas a su salón,sentándose en su respectivo lugar para luego mirar un rato por la ventana. Desde ayer,estaba algo desanimado,¿razón? Talvez fue aquella pregunta que le había echo Valt.
Sabía que Valt no la hizo con malas intenciones,porque era obvio que estaba ausente de este tema de su vida. De echo,nadie sabía la realidad que aquel chico ocultaba.
–Shu.–.El llamado miró hacia la dirección de aquella voz.
–¿Valt? Buenos días. Es raro verte aquí tan temprano...
–Si. Esque,quería saber el por qué te pusiste así ayer...–.Dijo el peliazul asercándose al puesto del chico. Este arrugó el seño,no quería hablar al respecto.
–No es relebante.
–Claro que lo es...Shu,soy tu amigo...Puedes decirme lo que sea...–.Dijo el chico mirando atentamente al albino. Quien abrió un poco los ojos.
Otra vez sintiendo aquella sensación que aceleraba su corazón.
–V-Valt...Hablamos después...–.Dijo sin más mirando hacia otro lado.
–Está bien.–.Respondió el chico yendo a su lugar.
Shu miró hacia un punto vacío por un rato. ¿Sería capaz de decirle? No estaba seguro,pero sabía que si seguí guardando ese sentimiento,poco a poco este lo destruiría.
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Se me olvidó comentar que la mayoría de los capítulos de este libro serán cortos. Pero intentaré subir dos capítulos al día.
