Era de tarde,Shu,como adiario,tomó su bicicleta para irse con dirección a su hogar.
–Oye Shu...–.Dijo una voz conocida.
–Oh Valt. ¿Pasa algo?–.Respondió el albino colocándose su casco.
–Eh,¿puedo acompañarte?
Shu lo miró por rato,mientras arqueaba una ceja. Para luego suspirar.
–Si es por lo que te dije hoy...
–No es solo por eso. Tú eres mi mejor amigo,y yo quiero estar ahí para ti siempre...–.Dijo el peliazul firme,cosa que asombró a Shu,casi nunca hablaba así.
–...Está bien.
–¡Genial!
–Pero Valt,¿cómo te irás?
–Ehhh,pues yo pensaba irme caminando...–.Sonrió el peliazul colocando una mano en su nuca.
–Como quieras. Vamos.
Shu empezó a pedalear,y era seguido por Valt. Ambos veían puntos diferentes,intentando sacar plática. Pero resultaba algo imposible. Ese momento era muy incómodo para ambos.
–...Shu.
–Si.
–...¿Por qué jamás...?
–Valt,te dije hase rato que no quería hablar más del tema.
–Lo sé pero...Shu,todo este tiempo...¿Estuviste solo?
–Ya me he acostumbrado.
–Si pero...¿Dónde está tu padre?...
Shu paró en seco,cosa que imitó Valt.
–¿Shu?
–N-No me gusta hablar mucho de él...–.Respondió mirando el suelo.
–...¿Por qué?–.Valt se le asercó.
–No quiero hablar de eso. Ahora,así que no preguntes.
–¿Enserio?¿estás seguro?–.Dijo el chico acercándosele.
–¡Ya te dije que si Aoi!–.Expetó enojado Shu,mirando a Valt atentamente.
–¡Oye! ¡Solo quiero ayudarte!
–¡No necesito tu ayuda..!
–Shu,todos necesitamos ayuda de vez en cuando...
–...Yo no.–.Dijo seriamente.–...Adiós Valt.–.Luego de ello,empezó a pedalear. Alejándose poco a poco del rango de visión de Valt.
–Shu...Yo sé que necesitas ayuda...–.Susurró el peliazul mirando en dirección a Shu.
*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*
Aviso: Al terminar esta historia,empezaré otra. Solo que no será Shu×Valt.
Si no Fubuki×Aiga.
Solo quería avisar por si querían leerla.Cuídense mucho y hasta la próxima.
ESTÁS LEYENDO
Only You | Shualt
Hayran KurguSólo él,fue el único capaz de descongelar su corazón frío. Ayudarle en sus peores momentos,comprenderlo y hacerlo sentir como nadie jamás le había echo sentir. Pero los sentimientos del albino estaban muy confusos. No los comprendía. Ahora debe de a...