En perfecta formación , al ritmo marcado por los tambores , las bayonetas caladas en sus mosquetes y con gritos al unísono en francés de Viva el Emperador , el regimiento francés avanza .- Tranquilos . Que nadie dispare . Dejad que se acerquen .
Transmiten la orden los sargentos , entre ellos Jesús , de la exigua tropa que defiende el reducto . Antes de colocarse en posición , se mueve por detrás de las dos líneas que su pelotón ha formado .
La primera línea , con hombres pegados al parapeto y con sus mosquetes apuntando al regimiento francés . La otra línea , dos metros detrás , rodilla en tierra , esperando con los mosquetes cargados y los cañones apuntando al cielo de la mañana .
Los artilleros franceses mueven los cañones y disparan .- ¡ Agachaos ! - grita el sargento cuando ve acercarse las bolas esféricas de hierro .
Dos de ellas se estrellan contra el parapeto levantando una columna de polvo . Otra se eleva al cielo por encima de las cabezas de los soldados españoles y termina su trayectoria en el río .
El sable del capitán Lasalla brilla con fulgor , cuando el sol incide en el . Lo mantiene en alto , mientras observa avanzar a la columna de uniformes azules franceses , en apariencia imperturbable como dicta las ordenanzas militares y también por orgullo de clase social .
Y es que la nobleza obliga no solo a ser superior , sino a demostrarlo en el campo de batalla .
A unos setenta metros , la columna francesa se para y la primera línea pone rodilla en tierra y la segunda línea se queda de pie . Ambas líneas alzan los mosquetes , y apuntan hacia el parapeto .- ¡ Agachaos que graniza ! - ordena Jesús .
La misma orden se da en la línea y todos los soldados españoles se agachan . Pronto se oye el estruendo de la descarga de los mosquetes franceses , seguido por un centenar de balas de mosquete impactando en el muro del reducto o pasando por encima de él , silbando en el aire .
- ¡ La madre que los parió ! ¡ Gabachos del demonio !
Quién exclama es Don Raúl , un molinero de la misma edad que Jesús, y que sirve en su pelotón , llevando el uniforme de voluntarios del Batallón .
Jesús se vuelve y le ve como agarra el bicornio con la mano y mete un dedo en el agujero provocado por una bala de mosquete .- Querían hacerte la raya en el pelo y no se han enterado de que ya no usas peine - le dice jocosamente su sobrino Luis .
- Si salimos de está niño , te vas a enterar de lo que vale un peine - le responde Don Raúl .
- Se acercan . Preparados - ordena el capitán .
El sargento Jesús toma su puesto en la fila y apunta el mosquete de anima lisa contra los franceses . Estos siguen con su avance , atravesando el humo , producido por su descarga de mosquete .
A cincuenta metros los franceses vuelven a pararse , gritar su ¡ Viva el Emperador ! y sus dos primeras filas a ponerse en posición de disparo .- ¡ Fuego ! - ordena a voz en grito el capitán Lasalla a la vez que baja su sable de infantería y apunta con el al enemigo .
El sargento Jesús que ya está acariciando el gatillo de su mosquete lo lleva con el dedo hacia atrás . La llave de chispa golpea al percutor provocando una pequeña detonación cerca de su rostro , con chispa y humareda incluida . A su vez , la bala esférica sale del interior del cañón del mosquete , seguida por otra chispa y otra humareda . Ambas chispas y humaredas son producto de la pólvora al quemarse .
La fuerza del retroceso que causa el disparo del mosquete provoca que la culata golpee su hombro .
Con el humo , no puede distinguir si ha abatido a algún francés . De echo , el interior del cañón al ser liso , provoca que los mosquetes sean menos certeros .
Hasta el punto que es necesario que el enemigo esté muy cerca , para que un mosquete sea efectivo y letal , e incluso se necesitan varios mosquetes para detener o causar verdadero daño a una columna enemiga .
La mayoría de las balas esféricas se perderán yendo muy alto o caerán al suelo y las balas que llegan no siempre matan , causando heridas leves o superficiales . < Aunque los matasanos causan más muertos que el enemigo > piensa Jesús .
Nada más disparar , retrocede entre la humareda que se ha formado con la descarga de los mosquetes . La segunda línea se levanta agachada y se acerca a tomar posiciones en el parapeto . Mientras los franceses descargan sus mosquetes .
Entre el humo , la segunda línea que protege el humo dispara sus mosquetes . Mientras Jesús al igual que la mitad de su pelotón recarga el mosquete con rapidez .
Cuando la segunda línea retrocede , Jesús se acerca al muro agachado , apoya el mosquete y baja el cañón . El viento levanta algo la humareda y ve como los franceses avanzan . La única diferencia es que el orden ya no es el mismo , señal de que se han causado bajas , aunque el número de cuerpos de pie , tapen los cuerpos caídos .
Apunta de nuevo y dispara el mosquete . De nuevo el humo provocado por el disparo le ciega , los ojos le empiezan a escocer y la sal de la pólvora le hace tener sed . Nada más terminar de disparar retrocede para que otro soldado ocupe su puesto .
El dispositivo de tener a la mitad de la guarnición disparando mientras la otra mitad recarga , permite que se haga un fuego continuo sobre la columna enemiga .
Al retirarse y volver a cargar el mosquete , nota que le pitan los oídos por los estampidos de las continuas descargas . Ve a sus compañeros y subordinados con el rostro y sus largas patillas cubiertos de restos de pólvora impregnada . < Dentro de poco vamos a parecer que somos negros del África , más que españoles > piensa con un humor macabro a la vez que resignado .
Uno de los soldados cae y pronto se acercan los dos críos que tocan el tambor del batallón para socorrer al caído , llevandole arrastras hacia atrás .
Otra descarga y de nuevo mientras la línea retrocede , el sargento Jesús toma el relevo , avanzando entre el humo , para volver a disparar su mosquete .
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LA BATALLA - escrito por Jesús Quintela .
Narrativa StoricaAño 1808 . La revuelta que comenzó el 2 de Mayo en Madrid cuando los soldados de Napoleón se llevaban al destierro al resto de la familia real , se ha extendido como la pólvora . En toda ciudad y pueblo , los españoles de todas las clases soc...