DongJu recuerda la primera y única vez que acepto algo de un extraño, incluso lo había hecho porque se iba a morir de hambre. Jamás pensó que ese chico resultaría ser alguien muy dulce y el inicio de todo lo estúpidamente romántico en su vida, todo...
DongJu abrió sus ojos, con una enorme pereza y pensando que hora era.
Miro el reloj al lado de la cama, marcando las ocho y un poco más de la mañana. Podía dormir más, no necesitaba levantarse ahora.
Se dio la vuelta como pudo, recostando su cabeza en el hombro de contrario suspirando con pesadez.
Murmuro entre labios cuando este le abrazo con fuerza, haciendo que lo rodeara igual con sus brazos suspirando pesadamente.
Ya habían pasado cuatro meses desde que tenia una relación preciosa, dos meses desde que había iniciado clases en la universidad y todo era simplemente perfecto.
Despertar con GeonHak a su lado era muy agradable, sus padres dejaban que se quedara cuando tenía los otros días libres, así que usualmente se quedaba a dormir en el apartamento del mayor los viernes, porque despertar con GeonHak dándole besos en su cuello y caricias en su cabello era simplemente maravilloso.
—¿Estas despierto?...
—Un poco...—susurró en respuesta al mayor, acariciando la espalda de este por sobre su camisa con la punta de sus dedos.—Aún es muy temprano...
—Así es...—susurro, hundiendo parte de su rostro entre los cabellos del menor, los cuales habían cambiado a un color más natural como el castaño.—Aunque me dijiste que hoy te encontrarías con KeonHee...
—Ah si... Últimamente no nos hemos podido ver...—DongJu se quejo, apegándose mas al cuerpo cálido del mayor.—Ha estado ocupado en cosas de la universidad...
—Ya veo...—GeonHak besó su cabeza con suavidad, moviéndose para poder quedar cerca de su rostro y llenarlo de besos.—Bueno, ¿y a que hora es?.
—Será para el almuerzo.—respondió, riendo suavemente antes de compartir un beso mañanero.—Así que durmamos un poco más.
—Está bien, si quieres dormir, entonces sigamos durmiendo.—beso su mejilla y seguidamente su cuello haciéndolo reír suavemente.
—Sii~ .—GeonHak rió, porque había descubierto lo infantil y mimoso que podía llegar a ser DongJu.
Compartieron besitos, dejándose llevar lentamente por el sueño.
—GeonHak.—DongJu dejó su cabeza ver en la cama, riendo suavemente ante el suspiro del nombrado.
—Buenos dias mamá.—hablo en alto, acariciando los cabellos de su pequeño novio quien le miraba sonriendo suavemente.
—¿Tu y DongJu desayunarán?.—GeonHak miró a su pequeño quien asintió suavemente.
—Si, iremos en un rato.
—Perfecto.—escuchó a su madre irse cantarina, haciéndolos a ambos reír suavemente.
—Vamos a desayunar, ¿si?.—DongJu asintió, besando por última vez a su novio antes de que este se levantara de la cama, dejando por último un beso en su frente antes de irse al baño.
DongJu lo observó desde la cama, suspirando feliz por su relación actual.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
