▩ operación crush jjk ▩ Taekook

• 07 •

Taehyung se ausentó toda la semana, hasta el viernes, dejando a todos preocupados.

Llegó con una vibra distante, fría y apagada, sin duda el hecho de haber sido ilusionado de esa forma hacia que quisiera desaparecer.

Por otro lado, Jungkook estaba realmente confundido y preocupado, su hyung no contestaba los mensajes que le dejaba desde el lunes, no atendía sus llamadas y cuando fue a buscarlo a su casa solo recibió una ola de insultos por parte de su tío y un balde de agua fría que éste le lanzó. Sin duda tenía sentimientos por su hyung, pero aún así tenía algo que superar de su ex novio, realmente Jungkook no sabía nada de nada.

Las horas trascurrian, Taehyung no había ido a buscarlo en la cafetería, lo cual se le hizo tan extraño, incluso cuando él intentó acercarse, Jimin y él se cambiaron de mesa indiscretamente causando un nudo en su estómago y en su garganta, haciendo que sus ojos sintieran la necesidad de estallar en lágrimas.

Hasta que ya, cansado de esa situación, se dirigió a donde estaba el mayor, por suerte estaba solo. -Hyung. ¿Por qué me evita?

-No te estoy evitando, ¿qué cosas dices?

-Usted cree qué soy idiota ¿verdad? ¿Por qué se comporta así? Incluso Jimin me mira mal y su tío, cuando fui a buscarlo, me lanzó agua fría y me dijo insultos hirientes. ¿Qué hice mal?

Taehyung, terminó de sacar sus libros del casillero en cuanto el timbre para volver a entrar a clases sonó. Cerró su locker con impaciencia, deteniéndose ahí mismo, observando hacia el suelo como si hubiera algo interesante ahí. -Si te lo digo, sería peor, espero puedas volver con tu ex pronto.

Volteó a ver al menor, su corazón se quebró de nuevo al ver su mirada cristalizada y sorprendida, quería abrazarlo y socorrerlo, decirle que todo estaría bien, que lo amaba. Pero eso no era algo que le correspondiera a él. -Adiós, Kookie. -Tragó grueso para evitar llorar, emprendió su camino hacia el salón que le correspondía.

-Me topé con Jungkook sacando mis cosas. -Dijo Taehyung, sentándose al lado de su mejor amigo, comenzando a llorar. -Me preguntó qué sucedía y yo... No supe que decir, solo decidí irme.

Jimin aprovechó que el profesor llevaba unos minutos de retraso para levantarse de su asiento y abrazar al mayor, mientras acariciaba su espalda. -Tranquilo, tranquilo, todo estará bien, ¿si? -Repetía, tragandose su propio dolor al ver a su amigo tan roto. -Duerme un rato, grabare la clase para ti.

-Gracias...

El profesor llegó. -Disculpen el retraso jóvenes... -Jimin empezó a grabar la clase, en lo que Taehyung lloraba mientras dormía, por suerte no dieron materia muy importante.

Salieron de clases, Jimin debía quedarse al entrenamiento de su novio, entonces acompaño a Taehyung al auto de su tío, se despidió de él y fue al gimnasio.

Observaba entretenido el partido de práctica, faltaban solo días para el Campeonato y se esforzaban mucho. Amaba ver a Yoongi haciendo lo que tanto ama, jugar.

El entrenador les dio un descanso, Yoongi se acercó a Jimin. -¿Lo hice bien? -Dijo el mayor.

-Lo hiciste perfecto, como siempre amor mío. -Besó sus labios, siendo correspondido y abrazado por el mayor. -¿Quieres algo? -Preguntó el menor.

-Tengo hambre... Quiero una pizza de la cafetería. -Dijo avergonzado, ese día había dejado el billetera en casa y odiaba pedirle cosas a su novio.

-Está bien, tú quédate descansando, iré por ella. -El castaño tomó su billetera, saliendo de ahí rumbo a la cafetería.

Se quedó observando la vitrina, aprovechando que casi no habían estudiantes. -Hola, por favor me da un slice una pizza, una soda, dos pastelillo de chocolate, una leche de fresa, un sándwich de queso extra, agua embotellada y cinco empaques de gomitas-Pidió su orden.

Si, el mayor solo le había pedido una pizza, pero sabía que su Yoongi no se llenaba fácil, así que decidió comprarle uno de los pastelillos, el agua, la soda y el sándwich. Cuando le entregaron la comida, la guardó en una bolsa, pagó, agradeció y se fue de ahí, mientras devoraba uno de los empaques de gomitas.

-Jimin Hyung. -Era la voz de Jungkook que sonaba en sus espaldas. Lo ignoró y siguió caminando.

-¡Jimin Hyung!

-No soy nada suyo, mocoso. -Contestó, ya harto de la voz de ese tipo que rompió cruelmente el corazón de Taehyung.

-Por favor, dime por qué Taehyung es así conmigo. ¡Por que ustedes son así conmigo!

Jimin soltó una risa burlona, volteandose a verlo. -¿En serio quieren saber? -Dijo, observando también a Seokjin, no se había percatado que venía con él.

Jungkook asintió con la cabeza y Seokjin solo tenía su mirada perdida. -Ok, perfecto. -Dijo Jimin.

Retrocedió unos cuantos pasos, hasta quedar más cerca del cabello cherry. -Le gustas a Taehyung, lo besaste, lo ilusionaste y le hiciste creer un futuro, para que ahora vengas con que te gusta tu maldito ex, porque si, los escuché, y estoy seguro que Seokjin te contó porque es un maldito traidor ahora que lo veo, ya que él sabía que te gustaba tu ex y aún así, decidió dejarte seguir ilusionando a Taehyung.

Seokjin habló. -Te juro que esto tiene explicación...

-No, nada, ustedes me dan asco. -Jimin los observó indiferente y con rabia, devolviéndose al camino rumbo al gimnasio.

Al regresar, le entregó los alimentos a Yoongi, quien los comía gustoso. Mientras que Jimin comía su pastelillo y le contaba lo sucedido.

-Deberías dejar de preocuparte tanto por eso.

-Tienes razón...

El entrenador llamó al equipo. -Debo irme, gracias por la comida, bebé.

-De nada, ¡suerte!

Vio a su novio correr la cancha hasta llegar donde estaban los demás jugadores, el entrenador como ejercicio final los puso a practicar lanzamientos.

Los tres turnos de Yoongi, fueron tiros perfectos, tanto así que su instructor lo dejó salir antes que el resto, fue hacía donde Jimin quién celebraba sus logros.

Caminaron hasta el estacionamiento, subieron al auto del mayor y fueron a un parque, se sentaron en una banca a observar el atardecer y disfrutar la compañia del otro. Estaban tan perdidamente enamorados, eran la pareja más envidiada de la institución, incluso por personas homofóbicas.

Cuando ya era tarde, Jimin pidió permiso para quedarse a dormir en casa de Yoongi, lo consintieron, se desviaron a la casa del menor y éste empaco lo que iría a necesitar. Fueron a la casa del mayor.
Mientras Yoongi cocinaba, Jimin hacia unas cuantas tareas, hasta que recibió una llamada de Taehyung. Contestó.

-¿Dónde estás?

Jimin soltó un amargo suspiro. -En casa de Yoongi hyung. ¿Qué ocurre?

-Jungkook me ha dejado ochenta y tres mensajes y quince llamadas pérdidas. ¿Qué hago? ¿Debería hablarle?

-Bloquea su número y borralo.

-Eso haré, gracias. Te amo.

-Yo igual, trata de dormir.

Colgó la llamada, dejando de nuevo el celular a un lado y continuando con sus tareas, terminó, cenaron y ayudó a Yoongi con los pendientes de él.

Fueron a lavarse los dientes, para finalmente dormir, Jimin desvaneció sus preocupaciones en el hombro de su novio.