❝Ignorame❞ ➳『•MinSung•』

Capítulo 14

Lee MinHo

Dos días habían pasado desde que me cambiaron de sitio y mi padre casi logra cambiarme de colegio pero para ser sinceros ni siquiera eso puede separarme de mi Han.

Pensé que le haría daño a él pero afortunadamente no le pasó nada y anhelo que siga siendo así.

Aunque estos días en casa haya sido un infierno se que terminará y espero que sea pronto. No soporto ver a mi madre siendo golpeada por cualquier tontería.

No comprendo como ha soportado tanto sin decirle a nadie lo que hemos estado pasando.

—Hyung—me llama mi novio mientras se sube a la cama.

—¿Eh?

—¿En qué piensas?—Dijo mientras recostaba su cabeza en mis piernas y me miraba con una linda sonrisa.

—En el día que por culpa de mi padre no terminamos lo que estábamos haciendo. —Dije con una sonrisa pícara.

No decía la verdad pero tampoco estaba mintiendo, si que pensaba en eso.

Él simplemente se sonrojó y no dijo nada.

—Sung...

—Dime...

En un movimiento rápido me posicioné encima de él agarrando sus brazos a los costados.

—¿No te aparecería terminar lo que habíamos empezado?—susurré en su oído.

—Y-Yo... —se calló al sentir como dejaba besos en su cuello haciendo un camino hasta llegar a sus labios.

Me dediqué a besar sus belfos suavemente y con delicadeza mientras pasaba una mano por debajo de su camiseta acariciando su espalda.

—Mgh~... —se escuchaba los jadeos y leves gemidos de JiSung por toda la habitación mientras me dedicaba a lamer su entrada con mi lengua, cosa que hacia a mi novio excitarse más.

Cuando estuvo bien lubricada su entrada en la que posteriormente mi lengua lamió, introducí tres dígitos, me posicioné entre sus piernas.

—¡Espera!—dijo JiSung con algo de temor a lo que iban a hacer.

—¿Qué ocurre, bebé?

—N-No lo hagas tan duro. —Susurró con vergüenza.

Sonríe de ternura al ver a mi novio así.

—Eso no es lo que dirás después. —Dije con lujuria mientras poco a poco introducía mi miembro en él.

JiSung al principio sintió un dolor enorme así que, esperé unos minutos mientras repartía besos por toda su cara para que se acostumbrará a mi tamaño.

—Hyung...

—Dime, bebé.

—Ya puedes moverte.

Comencé a moverme lentamente haciendo que el castaño gimiera levemente.

A medida que la velocidad de las penetraciones iba acelerando los gemidos de placer de JiSung salían sin cesar.

—¡A-Ah~!—gemía de placer mientras que yo soltaba varios gemidos al igual que él.

—Oh, bebé, eres tan jodidamente estrecho. —Comenté sin parar de moverme haciendo que mi miembro entre y salga de la entrada de mi novio.

En busca de más placer, salí de JiSung, que reclamó al sentirse vacio, y lo cargué haciendo que él se sujetase en su cintura con las piernas.

—¿Hyung que vas a... ¡Ahh~!—gritó de placer al sentir como tocaba su próstata.

Empotré a JiSung contra la pared y entré en él de una estocada mientras dejaba salir un gemido.

Siguió moviéndose haciendo delirar a JiSung de un inmenso placer.

—M-Ne voy a-a...

—Y-yo también—dije como pude entre gemidos.

Después de unas cuantas estocadas más, JiSung llegó al orgasmo haciendo que las paredes de su entrada se comprimieran causándome más placer que acto seguido me vine dentro de él.

—Te amo—susurré.

—Y yo a ti—respondió con una sonrisa.

Cansados, nos acostamos en la cama, nos tapamos con una sábana y nos acurrucamos los dos juntos abrazándonos y cayendo en los brazos de morfeo.

SeungMin iba dando saltitos feliz hacia su casa porque su novio llegaría a su casa pronto y no había quien se le quitara.

Así que mientras abría la puerta principal de la casa recordó que había dejado a sus dos amigos ahí para que el padre de MinHo pensara que no estaba con JiSung y que estaba con SeungMin.

“Tengo que echarlos antes de que llegue HyunJin”. Pensó SeungMin mientras subía por las escaleras sin darse cuenta que al par de tortolitos les había dado por hacer la segunda ronda cuando despertaron de su sueño.

—Hoy estaré con HyunJin, na na na na, y quizás hagamos el ‘sin respeto’—recitaba SeungMin en su mundo mientras abría la puerta donde estaban JiSung y MinHo, quienes al estar tan sumidos en el placer no se dieron cuenta de la presencia de SeungMin en la habitación. —Na na na na... Seguro que...

SeungMin se quedó estupefacto ante la imagen que daban ellos dos y después de unos segundos dejó escapar un pequeño grito de sorpresa.

—¿¡SeungMin?!—dijo Han mientras se ponía una sábana encima de MinHo y él para cubrirse.

—Gracias por la interrupción—dijo MinHo con sarcasmo y frunciendo el ceño.

—Y-yo... —señaló a Han—Ustedes... —señaló a los dos—¡YO NO VI NADA!

Y salió de ahí como alma que lleva al diablo dejando a los dos chicos sin saber que hacer.

Si seguir con lo que estaban haciendo o ir a ver si SeungMin en verdad estaba bien.

JiSung ya supo que escoger cuando su novio comenzó a moverse dándole placer y olvidandose del pobre Kim el cual le habían dejado una imagen que jamás olvidaría.

—Me pregunto si así me veo con HyunJin cuando lo hacemos—se cuestionaba SeungMin en el sofá de la sala con los auriculares puestos para no escuchar a los otros.

—No que va. Mi culo es más grande y redondo según HyunJin.