Best Of Me |Min Yoongi|

~18~

TN ya no sabía qué más hacer, estaba aburrida y sola, aunque estaba un poco preocupada, ¿adónde podía haberse ido Yoongi solo? Temía a que se perdiera por ahí y se lo comieran los bichos.

O que su prima, la que odiaba, le diera alcohol, ¡eso sería un gran problema! Estaba cien por ciento segura que si eso pasaba, la tonta de su prima era capaz de violar al pobre con tal de decir que estuvieron juntos y tuvieron su noche de juegos.

O su tía tal vez pudo habérselo llevado a contarles sus tristes historias de amoríos.

O-

—Hija, ¿dónde está Yoongi?.—su papá le acarició la cabeza.

—No lo sé, pa, se fue de mi lado con una pizca de enojo.

—Bah, una pizca, ve y búscalo querida, que a de estar aburrido.

La chica asintió y se levantó buscando a Yoongi, rogaba a Dios no encontrarlo con las arpías, de verdad que no quería eso, porque librarlo de sus garras era un dolor de cabeza.

Cuando por fin vio la cabellera azul con su tinte ya bastante gastadito, sonrió, no había nadie a su alrededor y estaba con su celular en la mano.

Con esa vista, del chico mirando su teléfono y luego pasando su mirada a los demás de forma desinteresada, fue que la peli-rosa se dio cuenta de que sí.

Le gustaba Min Yoongi.

Nerviosa se acercó por detrás del chico y lo abrazó, dejando de medio, la cabeza del peli-azul y sus brazos alrededor de su cuello.

—¿Se nos paso el enojo?.—Yoongi subió sus hombros haciéndose el desinteresado, pero vamos, estaba muy nervioso y no quería aceptar el porqué se sentía así—. Ya, vale, no te enojes, a veces soy un poco despistada y no me doy cuenta del cómo los demás me miran, no te enojes, please.

Yoongi no estaba enojado, no podía estarlo, la verdad es que no podía, al menos no con ella.

Puso nervioso sus manos en los brazos que lo estaban rodeando.

—Tienes que convencerme, no porque digas "No te enojes" se me va a pasar el enojo.—si la chica hubiese estado al frente suyo se abría dado cuenta de que Yoongi estaba aguantando reírse.

—Oh vamos, ¿y qué voy a poder hacer yo para convencerte?

—No lo sé, tú dime.

—¡Chicos, la hora loca ya va a empezar! ¿Qué están esperando? ¡vamos!.—los hermanos de la peli-rosa se fueron alegres a donde estaban todos.

Yoongi giró su cabeza hacia el rostro de la chica.

Oh, estaba muy cerca.

—Vamos, ya verás como se te pasa el enojo.—le guiño un ojo y se puso rígida, cogió la mano del chico para llevárselo y este un poco sonrojado entrelazo ambas manos con una sonrisa muy pequeña. 

—Sorprendeme entonces.

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Y sí que estaba loca la noche.

Todos estaban bailando al ritmo de la música, los familiares de la latina eran un desastre total, los hombres habían inflado más bombas y se las pegaban en el trasero y en los pechos, fingiendo ser mujeres, incluso intentaban bailar mejor que ellas.

Habían echo el trencito muchas veces y todas esas veces Yoongi terminaba en el piso riendo a rienda suelta, la latina lo había grabado haciendo muchas cosas que lo hacían reír, para luego mostrarle a sus amigos cómo la había pasado el chico "Jamás me rio de tontadas Min Yoongi".