La rata, parte 4

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―Tengo un mal presentimiento Jade, la misión no es tan fácil como la pintaban. Elimina luego a este engreído, pero no te confíes.

La rata había comenzado a perder la paciencia, la estática que se sentía por momentos le hacía sospechar, pero no podía descifrar nada.

―Parece que tienen un truco bajo la manga que desconozco. Hay un ruido de fondo que no puedo identificar o leer. Agente, esta "rata" como me calificó el IRS tiene un par de sorpresas.

―A ver, a ver ―repetía el informático ratonil, mientras tecleaba en una terminal―. Traje SCAR serie N1, FW Rw-0909, boot system IO OS rev1.01, código de entrada rt-0034Eghi@-890... Sí, sí. Ajá ya entré.

―¡Jade!, ¡Jade!, ¡rápido sácate el traje!.

―¡No!, no, ya estoy a punto de atravesarlo estoy a un par de metros.

―Más insoportable ruido estático. Ja, ja, ja. Está hecho, adiós señorita Black.

La katana de la agente quedó paralizada a diez centímetros del cráneo del objetivo.

―Después que no se pueda mover, el traje la triturará hasta reventarla. Lo mismo que les pasó a los dueños de estas otras dos armaduras. Por confiados y por idiotas.

La joven sentía como su cuerpo era presionado, estaba punto de explotar, cuando un seguro rojo saltó y el traje cayó de forma instantánea.

―Bien, bien jugado Tim, pusiste un seguro por si pasaba esto. No eres tan tonto como pensaba, después de todo. ―Se había dado cuenta de su error al subestimarlo, el no poder descifrar la estática lo había puesto muy nervioso.

―Creo que es gameover para la agente. Ejecutó un código y tomó control remoto de los tres trajes que procedieron a atacar a Jade.

Ella quedó vestida con su malla negra, la capucha negra, que dejaba descubierto solo sus ojos, y sus armas. El primer traje con la etiqueta grey en el pecho le arrojó un extintor, lo esquivó con sus rápidos reflejos; el traje white, trató de asirla por la espalda. Logró escaparse, del agarre, con una voltereta lateral.

―Está extendiendo su agonía, los trajes son indestructibles.

―¿Ah sí? ―Saltó sobre el traje grey cortándolo por la mitad a la altura de la cintura usando su daisho en movimiento de tijera. El traje white logró tomarla por la mano derecha. Le cortó la manga con su wakizashi, cortándolo luego en diagonal con la katana.

―¡Qué!, ¡qué!,¡qué!, no puede ser, ¡qué clase de espadas son esas! La miedosa rata trató de huir por algún laberinto.

―Tim, que no salga.

―Hecho, todas las puertas y recovecos quedaron cerrados, la rata está atrapada.

El traje black la atacó usando un par de computadores en cada manga a manera de mazas. Jade dio un salto hacia atrás y se elevó sobre el traje. Usando su espadas lo partió en dos diagonales. Una con movimiento descendente de su katana y la otra con el movimiento ascendente de su wakizashi.

No hay peor rata que una atrapada dicen. Joseph extrajo una escopeta lanza granadas y arrojó un proyectil contra ella. Logró esquivarlo y con celeridad se acercó al hacker. El brazo de Irwin cayó cercenado, junto con su escopeta, cuando se aprestaba a disparar de nuevo.

La agente, le aplicó un torniquete con una banda elástica de su botiquín de bolsillo y le inyectó morfina.

―Ahora me vas acontar todo lo que has hecho y como hiciste para controlar los SCARs. Tim graba todo.

―De acuerdo ―dijo su amigo.

El tipo comenzó a cantar como ruiseñor.

―Hay algo más, Jade. Accedí a las bases de datos de este imbécil. Este sujeto no solo cometió delitos informáticos, cometió asesinatos por encargo, robó aire y vendía filtros falsificados. Fue responsable de la muerte de quinientas personas, que incluyó docientos niños. Incluso distribuyó la peste de manera intencional en tres colegios. Usó los dos trajes que tenía como sicarios, ofreciendo sus servicios en la Oscure Web. Borró todas sus acciones de la red de gobierno, menos la de ser el mejor hacker  por simple vanidad.

―Cruza los datos con Rosie Armstrong, por favor, Tim.

―Ah sí la recuerdo. Veamos. Murió de peste en el colegio GreenHope. Según los registros, ese fue uno de los lugares atacados por las marionetas de Joseph, para distribuir la peste.

La agente estaba de espaldas a la rata escuchando la información, cuando escuchó lo de Rosie, giró en una fracción de segundo y volvió a su posición.

―Viviste más de cuarenta años, se acabó.

La cabeza ensangrentada de la rata cayó al piso, haciendo el sonido de una pelota de cuero mojada.

Apareció la pantalla holográfica del lRS: Agente Jade Black, se ha cargado la recompensa de diez mil unidades a su cuenta. Recibirá un bono especial de quinientas mil unidades, por la información entregada que nos permitirá mejorar nuestros trajes, y un traje SCAR nuevo sin costo. Excelente trabajo agente. La Oficina se lo agradece.

―Sí, sí, nos alcanza, ya deja de tirar de mi brazo. Ya, ya.

―¿Qué van a querer muchachos? ―dijo la señorita Chung, de la pescadería O'Fishy.

―Dos pescados de buena calidad por favor ―respondió Tim.

―Lucy estará feliz ahora, no más ratas ―Lo tomó de un brazo y lo acercó a su cuerpo.

Tim, se sintió flotar entre las nubes.

«¿Se dará cuenta algún día...?», pensó Jade.

Agente BlackDonde viven las historias. Descúbrelo ahora