¿Te imaginas que tu amigo de la infancia se convierte de repente en tu hermanastro? Pues bien, algo que para mucha gente seria imposible, para mi es una maldita realidad. Lo peor no es que estemos viviendo bajo el mismo techo, el problema es que me...
Por fin es viernes, por fin ha llegado el día de la cita con Lucas. Bueno, solamente ha pasado un día, pero soy demasiado dramática para pensar en eso.
Ayer hicimos lo mismo de todos los días. Nos levantamos, desayunamos, fuimos a clase, vinimos, comimos, hicimos los deberes y otra vez a dormir. Esa es la rutina de todos los días entre semana.
Pero hoy no, hoy es ¡VIERNES!
Me levanto con un poco más de ganas que de costumbre y bajo a desayunar. Cuando llego no veo a mis padres, solo a Luke con una toalla puesta justo para tapar lo que no se tiene que ver.
Madre mía, Virgen de los abdominales. ¿Por que lo has tenido que dotar así? ¿No podía ser el más feo del mundo? Así sería más fácil estar con el, pero no, tenía que ser un puto Dios.
Cuando se gira la cabeza, me pilla mirando sus definidos abdominales y una sonrisa arrogante se forma en sus labios. Madre que vergüenza.
- Ehhh, bu-buenos días - ahora tartamudeo, si es que te digo yo... - Buenos días acusadora - Ehhh! - protesto - yo no soy una acosadora, esta también es mi casa. Si te paseas así, no es culpa de que te veas tan jo- me callo, porque veo que como termine la frase diciendo que se ve jodidamente bien, mis mejillas se vuelven un incendio y no se que pasará. - Jo que... - Nada da igual - siempre queriendo saber todo. Le paso por al lado para prepararme el desayuno, pero me agarra del brazo antes de que pueda pasar. - Me puedes mirar todo lo que quieras enana, si la rama esta así - se señala el abdomen - no quieras saber cómo está el tronco. - y se va, ¡se fue dejándome ahí con la puta boca abierta! ¡Pero que coño acaba de pasar! Dejo todo de lado y me preparo el desayuno.
Cuando termino, subo a mi habitación a cambiarme.
Ya que os es viernes, saco un conjunto un poco más de fin de semana.
Saco una camiseta negra en la que las mangas me llegan un poco por encima de los codos y en la que pone CHIC. Lo conjunto con una falda corta amarilla que hace cuadros con azul y con negro. Tengo que aprovechar estos días en los que hace bueno, me pongo unas sandalias blancas sin tacón y me pinto como siempre, con rímel y un poco de labial rojo.
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Bajo las escaleras y me encuentro a Luke sentado en el sofá y cuando se gira me mira de arriba a abajo una y otra vez.
- Emmm, Luke, ¿nos vamos? - Ehhh si, si, perdón ••••••• Ya es última hora y no he tenido recreo porque han castigado a toda la clase sin él, por culpa de una de las integrantes del grupito de Mélanie.
Estábamos en Inglés, bueno mejor dicho mis compañeros estaban, porque yo no me estaba enterando de nada. Es una de esas asignaturas que se te dan bien, pero dependiendo del profesor te gusta o no, pues bien, a mi me ha tocado a un señor mayor llamado Mariano, que parece que en vez de hablar medita.
De repente, la sirena indica que la clase ya ha acabado, recojo mis cosas y salgo para esperar a Amy y a Nia que no habían salido.
- Eh tu - agh no, tu no. - Hola Melanie, ¿pasa algo? - Solamente una cosa, Lucas es mío, ni se te ocurra acercarte a él. Un pajarito me ha dicho que hoy tenías una cita con él, no vayas porque si no lo lamentarás. - Uy que miedo, ¿que me vas a hacer? ¿Darme con tu cola de zorra? - Uy... Keyla, mira, no quiero tener problemas contigo, pero si tocas algo de mi propiedad lo vas a lamentar. - ¿Crees que Lucas es de tu propiedad? Interesante, porque me ha pedido una cita a mi, seguro que será porque no le gustan las chicas que enseñan todo el culo para que la gente se fije en ella. ¿O será porque debajo de todo ese maquillaje se esconde un troll? - Mira guapa, acabas de crear una guerra. No te lo voy a repetir más de una vez. No-te-a-cer-ques-a-Lu-cas - me dice marcando bien las palabras mientras me apunta con su dedito. - Lo primero, ese dedito para abajo ehh, ¿es que no te han enseñado modales en tu casa o qué? Lo segundo, no-me-da-la-ga-na, si el quiere una cita conmigo y no contigo, te aguantas. Estás muy acostumbrada a tener todo lo que quieres guapa y no siempre va a ser así.- va a hablar pero me doy la vuelta y voy a buscar a mis amigas, agh de verdad que gente más desagradable hay en esta escuela.
