Nieve De Cristal > || Pausada ||

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-Es... es irónico, ¿Sabes?.- Decidió empezar a hablar aquel chico de perfecta sonrisa y perfil impecable. Quién se encontraba deslizando su dedo índice por la ventana empañada debido a la blanca nieve que caía del cielo. Recordándole a un buen amigo que, desafortunadamente sus tiempos no coincidieron por mucho.

A unos pasos de el, se encontraba el pequeño muchacho de cabello negro, y preciosa sonrisa aconejada. Escuchando todo lo que su compañero de vida mencionaba desde lo más profundo de su corazón. Anhelando regresar el tiempo, interrumpió a lo que el contrario mencionó.

-¿Qué es lo irónico, Hope?.- Espero unos segundos cuando el chico frente a el suspiraba y su mirada se envolvía en nostalgia, lo cual hizo que sus palabras se volvieran costosas de pronunciar.

-No pude disculpame con el por no haberlo abrazado una vez más antes de que desapareciera, y pensar que no alcanzaré su corazón... Hace que el mío quemé, aún esté nevando allá afuera.

Y aunque así el destino lo decidió, HoSeok se negaba a creer en el. Por más pruebas que encontrarán y se las enseñasen, algo le decía que no podía ser verdad. A pesar de que dos años habían transcurrido desde que perdió a su alma gemela. No necesariamente de manera romántica, pues era la amistad más bella que podía existir y lamentablemente se desvaneció.

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La música se encontraba a un nivel moderado en el pequeño reproductor que había llevado consigo HoSeok. Practicando al ritmo de está en un pequeño estacionamiento cerca de su universidad. Ya se encontraba ligeramente frustrado por verse estancado en una parte de la coreografía que el mismo había diseñado, realmente por pasatiempo, ya que el bailar le relajaba y hacia expresar lo que sentía.

- ¡Maldita sea!.- Dejó salir una parte de su frustración, quedándose quieto cuando escuchó una voz gritarle desde arriba; donde se encontraba un barandal para la gente no hiciera locuras.

- ¡Lo haces genial, sigue así!.- Exclamó la voz que ya permanecía minutos mirando al chico que tanto practicaba.

Por obvias razones HoSeok decidió mirar a quien le dió aliento de seguir. Cómo primera vista pudo observar los cabellos grisáceos siendo obstruidos por un gorro; seguido de eso una perfecta piel casi blanca cubriéndose por un abrigo color negro y pantalones medianamente azules. Si, el chico imponía una especie de vibra que le llamo la atención a HoSeok.

- ¿Desde cuando estás observando mi fracaso?.- Preguntó HoSeok, claramente subiendo su tono de voz para que el contrario le escuchará. Permaneció examinandolo hasta que el pálido comenzó a bajar los escalones de cemento para dirigirse hacia el. Aunque realmente no se acercó demasiado

- Hace unos cuantos minutos, vine más bien por la melodía. No pensé que alguien estuviera bailando en medio de la nieve.- Miró a quien recién había conocido de arriba a abajo, llevando su mirada de nuevo hacia su rostro y esperando alguna respuesta.

- Bueno... No pienses que hago esto muy seguido, solo quería escapar de los trabajos de universidad y despejarme un poco.- HoSeok realmente no sabía de alguna excusa mejor para ocultar que efectivamente, hacía sus prácticas casi diario. Viendo como el contrario llevaba su mano a revisar la hora en su móvil fue interrumpida una de sus acciones de querer hablar nuevamente.

- Claro... Del fracaso se aprende ahora, si me disculpas necesito marcharme, fue un gusto, chico.- Terminó, girando por donde había bajado escuchando como la voz de HoSeok pedía que esperase un poco, no quiso ser descortés pero realmente necesitaba irse. Dejando el lugar en cuestión de minutos, mientras que el anterior mencionado estaba un tanto confundido de una de la charlas más cortas que pudo tener en su vida con un desconocido.

- No me dijo su nombre...- Murmuró mientras caminaba hacia el reproductor que dejó recargado en el parabrisas de un automóvil, apagando este preparándose para marcharse ya que comenzaba a hacerse tarde, y no era de aguantar mucho las quejas de JungKook "porque sería peligroso estar muy de noche por las calles". Si, la ciudad era hermosa pero horriblemente peligrosa.

Sin duda alguna volvería a reconocer el rostro de aquella persona y no dudaría en preguntar sobre el, hasta entonces seguiría su rutina que no era más que solo universidad.

Por otra parte se encontraba un chico hundido en su habitación dando vueltas en esta ya que se comenzaba a tornar un tanto aburrido el ambiente esperando por su compañero de piso. Habían pasado aproximadamente algunas cinco horas después de la hora en que HoSeok sale de su universidad, y aunque decidieron distintas vocaciones siempre esperaban el uno por el otro al salir de estás. Era de acostumbrarse que HoSeok escapará de vez en cuando y JungKook tuviese que irse a casa solo, aunque eso no le molestaba ya que en el camino chocaba con algunos compañeros y tenía compañía, pensaba en que debería de tener a alguien que estuviese a su lado. Nadie quería permanecer solo toda su vida, ¿O sí?

Algunas veces pensaba demasiado en eso y comenzaba a entrarle miedo, aún era un joven que estaba aprendiendo a dejar ir las cosas. Comenzó a adentrarse mucho en sus pensamientos y en cuanto menos lo esperaba la puerta del piso se abrió, y tan pronto una voz que reconoció preguntó por el salió de una manera un tanto inmediata pero con un ceño ligeramente fruncido.

– ¡HoSeok, llegas tarde! Acaso no sabes que hay personas peligrosas allá afuera. Debes de se.- Su palabrería fue interrumpido cuando el chico mencionado anteriormente comenzó a hablar sobre su nuevo "hallazgo"

– JungKook, no me lo vas a creer. Un tipo extraño que parecía sacado de una película de Sherlock Holmes halago mi baile, ¿No es fabuloso?.- Y aunque no quería mentir sobre que las cortas palabras de alguien que no conocía le habían emocionado, lo había hecho. Observo la expresión del menor cambiar a una que compartía la alegría que estaba sintiendo en ese momento, y antes de que ambos empezarán a reír JungKook no dejo pasar la palabra "extraño", pasando a un lado y cerrando la puerta.

– Espera... ¿Extraño? Tus papás no te advirtieron sobre los extraños o qué. HoSeok, tienes que tener más cuidado a la hora de entablar un diálogo con alguien que no conoces. Quién sabe, pudo haberte noqueado y te hubiera llevado en algún automóvil con vidrios polarizados y no te hubiera visto de nuevo. ¿Ya me comprendes?

Y a decir verdad, HoSeok no pudo evitar reír ante tal alucinación de su compañero, y claro, amigo suyo. Claramente aquella persona no podría llevárselo de esa manera.