–¿Hola?.- El chico de cabellos grises atendió la llamada que estaba entrante en su móvil, esperando por una respuesta de la otra línea.
–YoonGi, que alivio escuchar tu voz. ¿Porque no respondiste las primeras veces que llamé?.- Una voz femenina habló, un poco molesta por no tener respuesta al instante en que marcó el número de este.
–No sé si estás enterada de que en las clases de la universidad no puedo atender llamadas. Pero te lo informo ahora.- Respondió de manera sarcástica, mientras observaba las acciones de la niña menor que estaba con él. –¿Para que llamas?
–¿Para que más? Quería preguntar cómo ibas con la enfer-. Sus palabras fueron interrumpidas por el chico, inmediatamente escuchando su voz.
–Te había mencionado que no le llamarás así, me hace sentir extraño.
Aunque YoonGi sabía que el nombre estaba correcto, quería vivir engañado por palabras menos duras.
Ella solo pudo soltar un suspiro, tomando en cuenta lo que el contrario dijo, decidió preguntar por el nombre en que todo se escondía.– Bien, ¿Cómo está yendo lo de la "fractura"?.
–Realmente no lo sé, estoy empezando a creer que todas esas sesiones no tienen sentido.- Y como era de esperarse, la otra línea no tardó en reprochar ante tal palabrería.
–No seas tonto, claro que funcionará.- De repente hubo silencio, escuchandose como algún objeto había caído al suelo; seguramente.
– Uh, creo que tengo que colgar, de nuevo un tipo está intentando escapar por los pasillos. Dile a Soon que pronto la veré."Peep". La llamada había sido cortada, dejando a YoonGi un tanto desilusionado.
Y escuchó la voz que lo traía de vuelta al mundo.
–Tío, ¿Era mamá?.- Preguntó la pequeña silueta que ahora se encontraba sentada a un lado, y apoyándose en su brazo.– ¿Que dijo? ¿Me extraña?.
"–Te ama demasiado, pronto estará aquí."
[ . . . ]
En otra calle de la ciudad se encontraban dos chicos, caminando a un paso relajado. Ya que por fin habían tenido tiempo de arreglar todo por la mañana.
–JungKook, creo que hoy no podré regresar contigo a casa.- Habló el mayor de ambos, observando como su compañero no estaba con los pies sobre la tierra.- Hey, ¿Estás ahí?
El pelinegro aún no despejaba su mente de todo lo que había pensado por la madrugada, prestándole atención pasados unos minutos a quien estaba hablando.
–Ah, claro. Yo igual tardaré en regresar a casa.- Conocía a HoSeok, y sabría que comenzaría a preguntar en que se mantendrá ocupado como para llegar tarde, el mismo lo sabe, no tenía nada que hacer después de la universidad. Pero quería salir a distraerse, lo necesitaba.–Wow, ¿Saldrás a comer con alguien?.-Aquello fue lo primero que se le pudo venir en mente, a pesar de que JungKook no era mucho de salir con amigos, no se podía descartar la idea.
–Si, si. ¿Recuerdas que te mencioné sobre terminar un trabajo? De eso se trata. Y pedí ayuda para poder guiarme un poco.- No le gusta el tema de tener que mentir, pero crear una expectativa a decir la realidad...
JungKook era otra persona que vivía en un mundo de sus propias mentiras. Después de todo, la mayoría vive así.
–Perfecto, algún día presentame a ese guía. Podría ser una buena amistad, ¿Que opinas?.- De inmediato apareció esa perfecta sonrisa, tan confortable para JungKook.
–Oh, claro que si. Le mencionaré sobre alguna salida de tres más adelanté. Seguro serán buenos amigos.- Respondió el más chico un tanto nervioso por la pequeña mentira que se alojaba allí.
Pronto los chicos continuaron hablando sobre el mismo tema, hasta que salía otro, y otro. Entre aquellos dos nunca había silencio, a menos de que esté sea necesario.
Cómo de costumbre, la plática hacia el camino menos largo. Y cuando menos se dieron cuenta; tenían que separarse para cada uno tomar el camino que debía.
Por el camino a su clase JungKook se preguntaba quién podría ayudarle a ser su guía, en un trabajo que no se dejó. Pronto vino alguien a su mente, un buen amigo, Kim YuGyeom.
En pocas palabras es el amigo más cercano de JungKook, la persona en quien más confía. Una amistad desde adolescentes no se disuelve tan fácil.
[ . . . ]
–¡YuGy!.- En cuánto logro divisar al mencionado fue a tomar asiento a su lado.– No sabes lo bien que me sienta verte aquí.– Mostró la distintiva sonrisa que siempre ha mantenido para el chico de su misma edad. Y que lo delataba, disimular no estaba en su vocabulario.
– Kook, estamos en la misma clase. Siempre me ves aquí, pero venga, sueltalo. ¿Que sucedió?.- Esperando a qué no saliera algún disparate de la boca de su amigo, solo se abstuvo a observarlo.
– Pasa que le dije a mi compañero de piso que llegaría tarde porque se supone que voy a salir contigo para hacer un trabajo que efectivamente no nos encargaron. ¿Que tal, eh?.- Dijó de una manera rápida ya que se encontraba un tanto nervioso por la reacción del otro chico.
– ¿Y como planeas seguir la mentira?
.-De nueva cuenta un JungKook comenzó a hablar de manera acelerada, haciendo que apareciera una tenue sonrisa en su rostro.– Bien, yo le diré a HoSeok que mi pila se estará acabando, así que le pasare tu número para que pregunte cómo vamos. Solo necesitas responder como si yo estuviera contigo, realmente es muy simple.- Habló JungKook manteniendo la misma sonrisa con la que había llegado.
Al mismo tiempo Yugyeom no encontraba tan efectivo el plan que se le ha contado. Puede que HoSeok llegué a pedir alguna foto para comprobar, después de todo, no se conocían. ¿Cómo confiarse de unas simples palabras "Si claro, está conmigo"?
En fin, no sería capaz de rechazar alguna propuesta contraria si el chico mantenía su mirada en el. La mirada de JungKook es muy cálida, a pesar de que esos bonitos ojos no soporten más. Reconocía que se veían lindos, pero detestaba aquello.
No le quedó de otra que aceptar, de no hacerlo pronto llegaría un poco de culpa; que aunque no le afectaría demasiado; no se trataba de alguien cualquiera, así que terminaría aceptando.
"El inicio de tus colores se acercan, no permitas que se escapen, Jeon."
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Nieve De Cristal > || Pausada ||
Fiksi Penggemar"Mi corazón sigue ardiendo, te encontraré nuevamente"