Opuestos (Thorki)

Alianza

 El rey de Asgard, Odín, se encontraba vestido con su armadura dorada, que tenía incrustadas pedrería que representaba su valor, su astucia, y sus guerras ganadas, trasmitidas de generación en generación. Luciendo una barba larga blanca, llevando un parche negro en su ojo izquierdo, resultado de la guerra, y con su cetro dorado en la mano derecha. Su mujer, Frigga, vestía con un impecable vestido de seda amarillo, con piedras preciosas adornando su cuello, y los más distinguidos aretes acorde a su vestido, con un tapado fino que caía por su espalda hasta el suelo. Ambos estaban al comienzo del Bifröst, al igual que su primogenito varon, Thor, el dios del trueno. Quien con dieciocho años, medía un metro ochenta, tenía una complexión física fuerte, gracias a los arduos entrenamientos y batallas ganadas a su corta edad, su cabello era rubio y le llegaba hasta los hombros, sus ojos eran de un azul profundo, que habían arrancado más de un suspiró a las mujeres de todo el reino. El hombre ahora estaba vestido con su armadura que oscilaba entre dorado con gris plata, el cual tenía pedrería que significaba el valor en batalla, así como las guerras ganadas; el Mjölnir, martillo con la que el dios del trueno canalizaba los rayos, estaba en su cintura. En tanto a su ceño no podía fruncirse más de lo enojado que estaba. Se había levantado esa mañana como cualquier otra, con intenciones de entrenar y luego ir a la caverna a pasar el rato con sus amigos, y quizás dormir con una bella mujer, pero su padre ya tenía otros planes. Le había contado una historia de conquista en la que su padre fue partícipe, desistiendo de invadir Jotunheim, el mundo de los gigantes de hielo, prefiriendo la paz en lugar de la guerra, y para esa paz, es para lo que lo necesitaba a él. 

_ ¿Es muy tarde para escapar? _ preguntó irónico el rubio en voz baja a sus amigos. Fandral, Hogun, y Volstagg, mejor conocidos como los tres guerreros, estaban de pie detrás de Thor, y una mujer de pelo negro en coleta, con armadura, al igual que los otros tres, era Lady Sif, una gran amiga del rubio. _ Este día no podía ser peor. 

_ Tal vez no esté tan mal. _ bromeó Fandral, recibiendo la mirada molesta del rubio. _ ¿Qué? _ se quejó recibiendo la mirada desaprobatoria de los demás. _ Él es un principe, estos arreglos matrimoniales son normales en la realeza. 

_ No lo entiendes ¿verdad? _ habló Sif seria. _ Su padre lo está obligando a casarse con el enemigo. Con un asqueroso Jotun. 

_ Es necesario para evitar la guerra. _ comentó Hogun sin apartar la vista del largo puente que se erguía frente a ellos, con una fila de soldados a cada lado de este, preparado para recibir al príncipe de Jotunheim y a su padre. _ Creo que Thor debería verlo como lo que es. Un simple acuerdo político. 

_ Es sencillo para ti decirlo, _ dijo Volstagg, mirando a Fandral. _ no debes acostarte con él. 

_ ¡No me  voy a acost...! _ dijo Thor bajando la voz, al notar que estaba gritando. _ No me voy a acostar con él. Ni siquiera quiero dormir en la misma habitación. _ se quejó suspirando, volviendo su mirada por donde llegaría su prometido. Porque sí, era un hombre, era el hijo de Laufey. _ Mi vida se terminó. 

_ Vamos, Thor, no es como que le debes fidelidad o algo. _ dijo Fandral. _  Podrás tener a cuanta mujer se te antoje en tu cama aún después de casado, no te preocupes. _ Thor suspiró por cuarta vez esa mañana. Claro que sabía que podía tener un harem de mujeres si eso quisiera, pero no dejaba de tener esa sensación de sentirse atado. Thor regresó su mirada al puente con los colores del arcoiris y luego de escuchar al guardián de dicho puente anunciar la llegada del príncipe de Jotunheim, vio como al final del puente se abría una especie de portal, del cual comenzaron a salir cinco Jotun, que hacían honor a su nombre, ya que eran enormes criaturas de hielo, los cuales rodeaban a un Jotun más grande e imponente, que el rubio reconoció como el rey, ya que iba un paso adelante del resto. Y detrás, venía cinco Jotuns más, protegiendo a un jotun que era bastante alto, tanto como Thor, pero que era muy bajo comparado a su raza.