•||Capítulo 5: Promesa||•

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Seguía viendo desconfiado el numero del cual le mandaron un mensaje, bajo la mirada expectativa de las chicas que estaban en su departamento.

...:
¡Hola!

Tweek:
¿Quién eres? ¿Y como tienes mi numero?



Estaba seguro que o era uno de sus amantes de noche, siempre se encargaba de no dejarles un numero para que no se vuelvan a comunicar con el.

Craig:
Soy Craig. Craig Tucker, nos conocimos en el café, anotaste tu numero en mi taza de café.

Levanto su mano golpeándose la cara, ahora lo recordó. Aquella acción sorprendieron a las chicas, que se levantaron de sus lugares y se posicionaron detrás suyo a observar. La pelirroja frunció el ceño al leer el nombre de aquella persona y se colgó del cuello de Tweek para poder ver bien lo que estaban por chatear.

Tweek:
¡Oh Craig!, lo siento. ¿Y a que se debe el honor de tu mensaje?


Craig:
La verdad me dio curiosidad el motivo de porque me diste tu número.


Tweek:
Bueno guapo, me llamaste la atención y siéntase afortunado, jamás doy mi numero a nadie.


Craig:
Hahaha ¡vaya honor!.



No pudo evitar soltar una carcajada, eso si extraño a sus amigas, pero solo a una mientras la otra chica comenzó a mirar mal a su amigo. Sonrió mirando aquella charla que estaba comenzando con ese chico atractivo que atendió, antes de poder continuar Reb puso su mano sobre la pantalla de teléfono, levanto la cabeza enarcando la ceja por eso.

─Tweek tenemos que hablar.

─Bien, para que me mires con esa cara ya me estoy preocupando.

─¿Craig Tucker? ¿Un chico alto de cabellos negros, ojos verdes, mala cara y un chullo azul?.

─Mmmmm si ─contesto dudoso.

─Tweek, te conozco bien, y no te desprecio para nada amigo, pero por favor, aléjate de Craig ─aquel pedido si lo descolocó, nunca ella se había metido en sus aventuras.

─Dame un motivo, el tipo esta como uno quiere.

─Es mi primo, y créeme que si le tengo mucho afecto. Y se como eres, no quiero que lo lastimes ─la quedo mirando unos minutos, exhalo el aire que retenía y desvió la mirada.

─Si me lo pides esta bien, no será una de mis conquistas de una sola noche ─levanto la mano como promesa ─Aunque este muy bueno.

─Tweek confío en ti.


Callaron un momento y volvieron a comenzar a cenar, miraba debes en cuando el teléfono, no había respondido el ultimo mensaje, pero si lo hacia seguro Reb lo castraba en ese mismo momento. Suspiro y trato de integrarse a la charla que sus amigas estaban debatiendo.

Por una FotografíaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora