El jabón, el otaku y el emo

Capítulo 15: "Gracias"

Y mientras Luciano lloraba, con pasos lentos se acercaba un chico alto y delgado pensando si preocuparse por la persona que estaba llorando o no.
Gabriel se acercó a Luciano y le preguntó qué le pasaba mientras le acariciaba un poco el hombro.
Lu no podía responder, estaba completamente destrozado y su llanto no era nada controlable. El chico alto se quedo con él, le dio un paquete de pañuelitos y Lu los aceptó.

Pasaron unos minutos muy largos hasta que por fin Luciano pudo decirle algo a Gabriel.

—Gracias...

Luciano se levantó, aún llorando pero sin hacer sonidos y tuvo que levantar bastante la cabeza para ver a Gabriel, quien le preguntaba si estaba bien.
Pero en el momento en que Gabriel vio los ojos de Lu se quedó tonto por un segundo. Lo vio frágil y destrozado, pero a la vez sintió amor.

Él quería irse, y eso estaba haciendo. Pero Gabriel no dejó que se vaya solo.
Lo acompañó hasta la parada del colectivo. No hablaron en casi todo el camino pero el emo se mantuvo muy cerca del chico alto.
Antes de que se despidieran intercambiaron números, y sin avisar Luciano le dio un fuerte abrazo a Gabriel. Él también lo abrazó, el pequeño lo necesitaba.

Camino a su casa ambos se quedaron pensando en todo lo que pasó. La parte mala de la historia es que uno durmió feliz de conocer a un nuevo amigo, y otro llorando por perder a alguien.