Liars Ever After [Para siempre mentirosos]

Capítulo Cuatro

Disclaimer: Naruto pertenece a Masashi kishimoto, los personajes en esta historia son usados sin fines de lucro. Esta historia pertenece a bleuxe y fue recuperada de su página de Wattpad, todos los créditos van para ella. Yo solo soy la traductora. (:

AN bleuxe: esto tiene un lemon si no te gusta eso, entonces no leas esta historia porque tiene una calificación de M o saltea los capítulos que te harán perder la trama. Y gracias a todos los que les gusta esta historia. No soy dueño de Naruto ni de las fotos.

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04

(...)

Hinata cerró la puerta de su casa lo mejor que pudo o al menos dificultó el regreso de los pequeños ladrones al entrar. Después de encerrarse con un invitado que podría llamar un desconocido perfecto. Agarró los troncos que quedaban para la chimenea, sabiendo que la electricidad se cortaría por un tiempo debido a la tormenta.

Sintió que él estaba directamente detrás de ella sentado en el sofá observando todos sus movimientos y también podía sentir que el ambiente entre ellos había cambiaron desde que ella le pidió que se quedara. Vertió el encendedor alimentado sobre la madera y pegó la mecha cayendo en la chimenea. Ahora su hogar se sentía mucho más acogedor y visible.

"E-Entonces, Tobi, ¿eres de aquí?" Hinata sintió que necesitaba conocerlo mejor y realmente era desconcertante esperar en silencio hasta la mañana.

"¿No, y tú?" decidió darle la vuelta a la pregunta porque tenía curiosidad.

"No, emigré aquí hace unos años... debes haber hecho lo mismo?" ella agarró el atizador del fuego y comenzó a pinchar la llama.

"En realidad, solo por negocios con el Amekage,"

Hinata parpadeó un par de veces asegurándose de que lo escuchó correctamente. Continuó acariciando el fuego porque quería cambiar ligeramente el tema.

"Entonces, ¿de dónde eres y por qué venir aquí de todos los lugares?" Obito preguntó, viendo que le gustaba jugar con fuego literal y figurativamente.

"El país de Hierro... Vine aquí porque era el último deseo de mi padre que yo viera su país de origen", Hinata quedó hipnotizada por las llamas con las mentiras suavemente escapaban de sus labios.

"Debes estar acostumbrada a la nieve sobre la lluvia o no estar acostumbrada a ver ninjas corriendo", dijo mientras pensaba que tal vez por eso sentía que ella estaba fuera de lugar porque no era de aquí en absoluto, pero aún así.

"Es bastante conveniente que venga desde la tierra del Hierro viendo que ese país está bajo el control de los samurais y que por eso es conocido como tierras neutrales", Obito nunca podría perder su naturaleza de sospecha, especialmente cuando se trataba de personas. Realmente creía que confiar en alguien no valía la pena, no en su vida, no desde que Rin murió.

"Sí, supongo que es cierto", finalmente decidió sentarse en el sofá desde la parte más alejada de él. Parecía increíblemente triste y distante ahora que él podía ver su rostro.

"Extrañas de dónde eres..." ni siquiera tuvo que preguntar porque podía decirlo.

"Sí, lo hago", Hinata no vio la necesidad de mentir sobre esto. Extrañaba a sus compañeros de equipo Kiba y Shino, su antigua sensei Kurenai, su clan y especialmente a Naruto.

Ella lo miró y vio que sus guantes estaban junto a la chimenea. Finalmente, viendo una parte de su piel, la excitó y ella no estaba segura de por qué, pero tenía que ver debido a que él la escondió tan bien. Su mano derecha estaba tan pálida en comparación con su mano izquierda que parecía fantasma. Era especialmente extraño que sus uñas estuvieran pintadas de negro con un anillo de acero en su pulgar.