❝ Sólo es el comienzo ❞
Se suponía que su padre debería haber estado allí, pero no, su padre por segunda vez no había estado allí.
Se encuentra tan furioso, con todo el mundo, jamás se imagino que un sentimiento tan feo se podía experimentar, el querer explotar y decirle muchas cosas a una persona.
Que inconcientemente en el momento son dichas, pero que hieren a la otra persona de lo peor.
Así que, al parecer quita su furia en aquel inmenso pasto inocente, arrancando las pequeñas plantas con sus dedos, sentado en el piso mirando ésta mientras sus dientes rechinan.
Siendo un molestoso ruido, pero no hay nadie con él.
Sólo él y ese inmenso parque a donde llegó luego de correr sin paro alguno.
Todo comenzó desde temprano, cuando se levantó y recordó las palabras de su padre.
❝ No te preocupes, estaré allí en tu cumpleaños, campeón ❞
Al sólo recordarlo vuelve a desquitarse con el césped, su progenitor le había mentido.
Cruelmente jugó con sus sentimientos.
Él nunca pensó que su padre llegaría a mentirle.
Pero la prueba era esa.
Ya estaba hecho, y siente su corazón estrujarse, mientras sus ojos color chocolate se cristalizan rápidamente, reteniendo sus lágrimas hace un puño su mano.
Y aprieta sus dientes todo lo que puede.
Pero es inevitable no poder llorar.
Se siente tan sensible y solo.
No quiere creer lo que está pasando.
Pero sin embargo a pesar de lo necio que se pone por no derramar una lágrima, estás resbalan por su rostro sin remedio alguno.
Cayendo sin medida, empapando el rostro del niño a los segundos con aquellas gruesas y saladas lágrimas, llenas de dolor, de dolor que expulsa su tierno corazón.
No grita, sólo solloza bajito, siendo su llanto escuchado sólo por él.
Quiere morder su labio inferior para que no suelte ningún jimoteo del llanto, pero es imposible cuando su respirar por la nariz empieza a ser pesado y no lo deja respirar correctamente, teniendo su pequeña boca la obligación de estar abierta levemente.
Sus ojos pican y su pecho nuevamente se estruja dentro de él, jamás pensó que algo así podría llegarle a pasar.
Pero esta pasando.
Mientras su vista está borrosa por las lágrimas, empieza a recapacitar en una pequeña cantidad.
Apartando la mano inmediatamente del césped que por un tiempo estuvo dañando, y se arrepiente ahora.
Soltando más lágrimas y haciendo sus dos manos en puños que están ahora en su regazo.
─Lo. . . lo lamento ─dice en un murmuro tan bajo que sólo él logra escuchar, pero va dirijido para aquel inmenso césped.
Ha de sentirse tonto, pero su mente se lo dice, le dice que se disculpe, y él lo hace.
Las lágrimas lo están agobiando, lo están sofocando demás.
Así que no piensa en nada más y sólo se tira al pasto, haciendo que su espalda choque un poco fuerte y mueca se haga en su rostro, pero no importa, no ahora.
Y sus ojos caen al cielo, viendo este, pero lo que más lo atrae, es la luna, está que está en su máximo esplendor, tan grande y redonda, tan brillante y hermosa, definitivamente es una de las cosas más bellas que ha visto en el mundo.
No le cave ni la menor duda.
Un suspiro se expulsa liberalmente de sus labios y cave en cuenta que ha dejado de llorar, no sabe cuando pero no se ha dado cuenta.
Sólo su vista está clara, y con ello puede apreciar a la luna, que es tan. . . ¿excite una palabra exacta para definirla completamente?, no lo cree.
Es que se ha robado su atención sin siquiera hacer algo, sólo estar allí, manteniéndose, y él sólo no puede dejar de suspira ante aquella maravillosa vista, es perfecta.
Sus ojos los siente pesados, y a la vez hinchados, pero sin embargo esa no es excusa para quitar la vista.
Y sólo se mantiene, mirando y mirando, suspirando por muchas veces y las ráfagas de viento chocando con su cuerpo, pero no importa, no ahora.
Se siente bien, el lugar tan silencioso, como si no hubiera nadie, y en específico no lo hay, pero es tan cálido a pesar del viento que corre.
Siente como si alguien soplara su cuerpo, pero ni eso lo inmuta para querer irse de allí.
Siente que al final del día, algo malo no le ha pasado.
La luna a hecho que olvide el altercado con su padre, que olvide porque está allí.
Parece hipnotizado, y se siente bien, porque encuentra calidez por dentro cuando por fuera no la hay.
Encuentra un refugio en sólo esa esfera preciosa, que no hace nada, no habla, no se mueve, pero está allí.
Con los latidos de su corazón retumbando dulzonamente en sus oídos, siendo la melodía perfecto para el lugar perfecto.
No lo sabe aún, pero la luna es su nuevo refugio, algo que no lo ve directo a los ojos, pero se siente observado, algo que no lo escucha, pero se siente escuchado.
Algo que le transmite muchas cosas, pero recién se está dando cuenta.
Todo cambiará, porque sólo bastó un día para que algo grande crezca.
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! v e n u s n o t t e ¡· Gracias por llegar hasta aquí ❤
¿como te encuentras? Ojalá que muy bien uu.
¿Te gustó el capítulo?, como dije serán cortos y no tan largos.
⬆Recién comienzo haciendo historias hetero y no me quiero sofocar tanto.
⬆Así que empiezo con algo suave.
↪¿Alguna idea de lo que pueda pasar después? y.y
☁ Recuerda que vales mucho, y que brillas inmensamente ☁
☁ Cuida bien de ti, sonríe, se feliz ☁
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Ojos brillantes como la luna ©
Teen Fiction꧁❝ Ella tiene los ojos brillantes como la luna ❞ ¡!┊Él sabe que nada es fácil, y que todo tiene obstáculos, cosas difíciles, pero cada vez se refugia en la luna siendo su acompañante. ❝ Ella brilla como la luna ❞ ¡!┊Ella sólo quiere vivir normal, pe...