El cazador Saiyajin

Parte 4

Capitulo 4: The White Fang

Después de que ambos faunos se conocieran, Blake recordando que había invitado a Goku a la casa de sus padres, se dispuso a guiarlo, mientras ambos caminaban estos hablaban, bueno realmente era Goku el que estaba hablando, le contaba a Blake que venia desde el reino de Mistral y que ya había pasado un mes desde que había salido de su casa, le contó sobre como tenia que matar Grimm durante la noche porque no le dejaban dormir, también sobre como en algunas aldeas en las estuvo la mayoría de personas lo trataban mal solo por tener su cola de mono, esto claramente molesto a la pelinegra que en ese momento decidió hablar, diciéndole al pequeño Saiyajin que el propósito del White Fang era evitar ese tipo de cosas; Goku que previamente no había entendido el objetivo de la organización, ahora si entendía, y le agradaba la idea de ayudar a lograr cumplir dicho objetivo.

Varios minutos después, ambos faunos, llegaron al centro de la pequeña aldea de la isla, en este lugar se encontraba una gran casa, bueno mas que una casa era una mansión con un estilo japones, en el frente de esta habían dos sujetos que estaban vigilando la casa del jefe de la isla, Ghira Belladona, el padre de Blake; al estar enfrente de su casa los guardias reconocieron rápidamente a la hija del jefe, ambos la saludaron así como también saludaron a Goku que dio una sonrisa y saludo de igual forma.

-Vaya Blake, no pensé que tu casa fuera tan grande- le dijo Goku a su amiga, que solo puso una sonrisa nerviosa.

-Bueno, que te digo Goku, es lo que pasa cuando tu padre es el jefe- dijo un poco apenada de su posición gracias a su padre.

-Ya veo, eso me recuerda que en casa, mama y yo teníamos la carpa mas grande de todas- recordó Goku su estancia con la tribu Branwen; ambos ahora estaban en frente de la puerta de la casa, y ambos se quedaron parados, como si estuvieran esperando algo. -Oye Blake, ¿estas bien?- pregunto confundido porque su amiga aun no abría la puerta.

-¿Eh?, si Goku estoy bien, es solo que hace mucho no veo a mis padres y tengo miedo que estén enfadados conmigo.- Respondió Blake posando su mirada en la puerta.

-Ay Blake, no hay de que preocuparse, estoy seguro que estarán felices de verte. Me acuerdo que siempre que salia por la noche mi mama se alteraba mucho pero siempre estaba feliz cuando regresaba a casa- dijo Goku intentando subir los ánimos de la chica Fauno. Blake dio una sonrisa, puede que no haya conocido a Goku desde hace mucho tiempo, pero tenia que admitir que todo lo que decía el Saiyajin era con buenas intenciones, era como si en su interior supiera que alguien como Goku nunca la dejaría sola.

-Tienes razón Goku- fue la respuesta de Blake que empezó a tocar la puerta. Unos segundos mas tarde un hombre bastante alto, de complexión musculosa, abrió la puerta puso una gran sonrisa al ver quien estaba al frente de él.

-¡Blake, que alegría verte! Hace mucho que no regresabas a casa, me tenias preocupado- dijo el hombre mientras le daba un fuerte abrazo a su hija.

-Hola papa- fue la respuesta de Blake quien solo se disponía a dar una sonrisa y corresponder al gesto de su padre, el abrazo duro unos segundos hasta que fue interrumpido por una voz.

-Vaya Blake, tu papa si que es alto- decía Goku mientras compraba la diferencia de alturas con su mano. Ghira, el padre de Blake, tan pronto como escucho la voz de un niño soltó su abrazo y lo busco el origen de dicha voz, y antes de que pudiera decir algo, Blake hablo.

-Ay, perdóname Goku. Por un momento olvide que estabas aquí- se disculpo la chica fauno, que después se puso al lado de Goku. -Papa el es Goku. Goku el es mi papa, Ghira Belladona- presento a ambas personas.

-Hola- dijo Goku mientras movía animadamente tanto su cola como su mano.

-Un gusto joven Goku- saludo mientras analizaba al pequeño niño, dándose cuenta por su estatura que no podía ser mayor que Blake, y también noto como tenia una katana amarrada a su cintura. -Bueno, no hay porque quedarse parados aquí, entren- dijo el jefe de la isla.