Déjame Amarte, Mi Niño Romántico (ZhenYi/YiZhen)

¿Que me vas a hacer?

"¿Puedo cortejarte?"

Pov. Autora.

El corazón de JingYi estaba bombeando tan fuerte que creía que se saldría de su pecho. Su respiración se hacía cada vez más pesada. Sentía que su mente se nublaba. Se habían fundido todos los fusibles. Ya no podía pensar con claridad y su cuerpo no reaccionaba.

Zizhen aún lo sostenía en sus brazos con la mirada clavada en el. Parecía un zorro apunto de devorar a su presa. JingYi temió. No quería ser devorado por aquellos ojos profundos como la noche.

Escucho pasos a lo lejos. Alguien venía. Con la poca racionalidad que le quedaba, empujo a Zizhen y se puso de pie. Empezó a correr en dirección contraria a las pisadas y se perdió entre los árboles.

Zizhen sonrió satisfecho por su cometido. Sólo necesitaba esperar un poco. Su conejito era demasiado tímido.

JingYi corrió lo más rápido que pudo. No sabía dónde iba, pero necesitaba salir de ese lugar lo más rápido posible. Después de correr alrededor de diez minutos se encontró con una cascada.

Se preguntó cómo fue a parar a la primavera fría. Sin pensar mucho miró a ambos lados y empezó a despojarse de sus túnicas. Necesitaba calmarse. Estaba ardiendo peor que una fiebre.

Con pasos ligeros se sumergió en las aguas  heladas. Soltó un suspiro. Esto era lo que necesitaba desde hace un buen rato.

Los minutos pasaron y el cielo se oscureció. Salió de la primavera fría y se colocó sus túnicas que se empezaron a adherir a su piel mojada.

Ahora más calmado se dirigió a su habitación. Con sumo cuidado de que nadie más lo viera en esas fechas.

Lo que no sabía es que alguien venía siguiéndolo a unos metros de distancia.

Una vez en frente de su habitación, deslizó lentamente la puerta para luego entrar. Trató de cerrar la puerta pero una mano se posó en ella. Levantado la vista se encontró con los ojos oscuros de Zizhen quien tenía una pequeña sonrisa en los labios.

JingYi tragó saliva y retrocedió dos pasos como mero reflejo.

Zizhen se adentró a la habitación, cerrando la puerta sacó un talismán de sus túnicas y las pegó a la puerta.

A JingYi se le desencajó la mandíbula. ¿Sería violado por la persona que le gusta? Espera, ¿Eso no era algo bueno? No, no lo era pero... ¿El le atrae a Zizhen?

Zizhen empezó a dar pasos hacia el. Y con cada paso JingYi daba dos pasos atrás hasta chocar con la pared.

Zizhen sonrió. Con un par de pasos ya estaba frente al menor. Acorralándolo entre el y la pared. Mientras colocaba ambas manos a cada lado de su cabeza. Viendo como la respiración del menor se hacía más pesada y el sonrojo subía a sus pómulos.

–A-Yi~–Lo llamó.

Los pelos de la espalda de JingYi se erizaron al escuchar el tono con el que lo llamaba su amigo.

–¿Q-Que m-me vas a ha-hacer?– Tartamudeo. Aún no quería perder su castidad.

–¿Yo?– Preguntó inocente–No haré nada que A-Yi no quiera.

Inconscientemente JingYi suspiró aliviado. Al menos no sería violado ¿no?

–¿E-entonces?–Preguntó dudoso.

Zizhen se separó de la pared y le  sonrió. Extendió su mano al menor y este vacilante lo aceptó. El mayor lo condujo hasta la cama he hizo que se sentara. Mientras el se arrodillaba en frente.