Para que Severus comenzara su aprendizaje fue un dolor de cabeza, el único que estaba disponible era Thomas Riddle, un hombre re muy carismático que poco y aceptaba a alguien más para aprendizaje pero tuvo que aceptar hacer su aprendizaje en Estados Unidos.
Aún no podía creerlo cuando envió nueve cartas, de las cuales solo Riddle no tenía estudiantes, al aceptar Severus envió todo lo que el hombre le pidió, sus notas en los 7 años cursados, comportamiento, el historial de todo lo bueno y malo e incluso recomendaciones de los profesores, no pidió la de el director porque no le agradaba, y aunque todo era desfavorable gracias a los estupidos griffindors, una semana despues ya tenía lo necesario para viajar. Se iría a Estados Unidos y estaba resplandeciente. Necesitaba alejarse un tiempo de londres mágico.
El maestro Riddle aceptaba un solo estudiante, al que consideraba mejor aún así, severus sabía que el hombre era obsesivo con trabajar y crear, tenía una reputación que mantener, siempre estaba siendo seguido por el ojo público. Su trabajo era maravilloso en pociones y el deseaba seguir ese camino
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Luego de la media tarde, Severus y su padre caminaban por el callejón Diagon, hacían las últimas compras para el viaje de severus y también para Tobias, quien se preguntó porque no había venido aquí antes. Bueno lo sabía.
Se enteró tarde de que su familia era mágica, luego vinieron los problemas económicos, Eleine tenía un estilo de vida que el no pudo ofrecerle y ambos se molestaron con el otro. Severus quedó en la disputa de peleas, alegatos y luego el alivió del adulto fue que se fuera a estudiar a ese colegio. Allá no aguantaría hambre ni frío.
Su matrimonio fracasó cuando encontró a su mujer en la cama que compartían junto a un hombre que tenía dinero, lo sabía por sus zapatos y el buen estado de su ropa.
Faltaba solo un día para que su hijo regresara a casa en su 14 cumpleaños pasaría navidad y enero en casa, Tobias irracional golpeo al hombre y Eleine quedo atrapada en los golpes.
Para su ira y melancolía ella lo culpo por los golpes, dijo que lo había encontrado con una mujer y reclamarle por esto el la había golpeado.
Tobias no era un santo, habia tenido problemas antes con su mujer, pequeños apretones de cuello, jalones, apretón del brazo, algunas cachetadas pero nunca un puño y menos así.
Severus le creyó a su madre y el no quiso romper su seguridad. Dejo que lo acusaran y meses después la mujer se marchó mientras tobias enfermaba de fiebre y gripa.
Lo que no sabía Tobias, es que su hijo sabía todo esto, los vecinos le contaron de las muchas veces que su padre trabajaba y su madre lo engañaba, luego peleas en la casa.
Para severus sus dos padres eran problemáticos, no los juzgaba no era de él hacerlo, pero no los odiaba, amaba a su madre que huyó y volvió, y amaba a su padre que era un hombre que no sabía a veces controlar su ira pero que busco motivos para mejorar.
- Lily!!!! - Saludo Tobias a la muy embarazada Lily Evans que caminaba con su marido y un niño casi de un año, Severus no entendía la necesidad de tener hijo ahora cuando recién salían del colegio, acaso estaba embarazada en la graduación, tontos adolecentes hormonales pensaba el prince, disfrutar de la juventud el baile, las discotecas antes de que buscaran una responsabilidad de 24/7
- Hola Señor Snape - Saludo, su sonrisa en los labios era pequeña pero segura
- Vaya, ya tienes un hijo y estás esperando otro, felicidades niña - Alegre como lo era hace años dijo su padre. - Viste severus, deberías darme nietos ahora que estoy vivo, Evan debe estar alardeando de sus nietos.
