Susan
Segundo día de cuarentena voluntaria.
Ya la reunión familiar semanal había culminado, hace horas para ser sincera. Tuve que inventar una excusa creíble para tapar la ausencia de Jenifer. Ya era el segundo día y ella no salía de su habitación, la música seguía sonando y escuchaba como cosas caían al suelo.
Mi padre en cambio se centró en una seria platica con Josefin sobre el "avance del virus", me dio hasta terror escuchar todo lo que decían.
Yo no era capaz de ver las noticias o buscar en Internet, pienso que si lo hago me dará una crisis de pánico y eso conllevaría a uno de asma lo cual me asusta, porque cada vez me vuelvo más torpe centrándome en el miedo y no en buscar mi inhalador.
Voy de mal a peor.
Lo que entendí de su plática fue que el país tiene la tercera tasa de mortalidad más alta del continente, el gobierno no es sincero con la cantidad de casos reales y los hospitales están comenzando a estar a tope.
En mi ciudad las cosas no son mejores. Personas malintencionadas empezaron a robar los locales, hacer compras de pánico (mi padre es uno) e infundir "conspiraciones" ganando alarmar más a las personas.
No sé en qué momento llegamos a esto.
Ahora mismo me encuentro en mi habitación viendo vídeos en Youtube, el bloqueo mental sigue impidiéndome escribir alguna canción, lo cual me causa estrés ya que para mí escribir es mi todo y si no lo hago mis sentimientos quedan atrapados en mi pecho ocasionándome un agotamiento sentimental horrible.
Noto como una canción nueva de Dualipa se hace presente, "Breath my heart" ¿Será buena? Al parecer lleva meses en YouTube y yo ni enterada.
Hago click sobre el vídeo de inmediato. Una satisfacción visual me envuelve por completo, no tengo ni idea lo que dice la canción, pero su paleta de colores es hermosa y el videoclip no se queda atrás.
Escucho como alguien abre la perilla de mi puerta, quizás sea mi papá.
— Es buena —Alzo la mirada de inmediato viendo a Jenifer apoyada contra el marco de la puerta. Me pongo de pie y corro para abrazarla. Se ve tan demacrada, aunque una sonrisa decora su rostro.
— Te extrañé tanto —Empiezo a llenar de besos su rostro— Me tenías tan preocupada —Arreglo su cabello— ¿cómo estás?
Sus ojos se ven apagados, sus labios están secos y su cabello desaliñado. Ella la ha pasado muy mal, sola, apuesto que sin dormir también.
Sonríe— Sólo me encerré para hacer algunas tareas —Alza los hombros con despreocupación— Estoy bien ¿y tú?
Ladeo el rostro— Estoy bien... ¿cómo estás de eso? —Pregunto con cautela. Su apariencia me dice algo, pero sus palabras y expresión me comentan otra cosa.
— ¿Con qué? —Se hace la despistada— Hasta donde sé no ha pasado nada —Sonríe divertida.
— Pe- —Cubre mis labios con su mano.
— No ha pasado nada —Se aparta de mí entrando a mi habitación.
Esto no me parece bien, ¿está evadiendo el problema? ¿O será una manera de auto protección? Pero si no lo habla no se sentirá bien ¿o está bien? Dudo que se haya quedado encerrada haciendo tareas, no soy tan tonta.
Pero ¿debo dejar el tema así? ¿Debo respetar su decisión...? ¿por qué eres así Jenifer?
— ¿Qué dijeron mis hermanas ayer? —se lanza sobre mi cama.
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Mi Amor En Tiempos De Cuarentena [Terminada 🧠] [Editada🧠]
Teen Fiction¿Qué pasaría si conoces a la persona más maravillosa de tu vida? Esa que pone tu mundo de cabeza y no sale de tus pensamientos, pero cuando sientes que todo va perfecto llega una cuarentena y los separa. ¿Aceptarías el reto de llevar un romance a di...