Profe, quiero un 10!

Capítulo 13

—Mierda...

Se quejó el castaño. Se levantó por el fuerte dolor de cabeza, tomó mucho y era de esperarse que quedaría así.

Mientras abría los ojos poco a poco se percató en una presión en su pecho moviéndose de arriba a abajo al ritmo de su respiración, miró y se dio cuenta que era Jungkook, le preguntó que hacía ahí pero no le respondió, aún dormía.

Al acomodarse notó algo fuera de lo común, estaba desnudo, abrió los ojos asustado y también vio al menor desnudo.

—¡MIERDA! —gritó alterado logrando que volviera el dolor en su cabeza

—Tae... —se levantó somnoliento mirándolo —¿Estás bien?

—¿P-por q-qué esta-ss desnudo? —su respiración se agitó

—Tae cálmate

—¿Kookie te hice daño? —estuvo al borde del llanto —Kookie, estaba borracho, no me acuerdo de nada, por favor perdóname, no quería, no quería —lo abrazó

—Tae... —sonrió —no me hiciste nada, bueno si hiciste, pero no algo que yo no quisiera

—¿A qué te refieres? —lo miró —¿Dejaste que te violara?

—Si me gusta, no es violación

—Carajo... —susurró, tomó su cabello y lo hizo hacia atrás, cerró los ojos y suspiró volviendo a mirar al menor —Kookie si yo te violé...

—¡TAEHYUNG! —gritó y comenzó a reír —me duele el trasero y me gusta, ¿ok? Tu no me violaste pero si crees eso... —agarró su celular y dio click —escucha

Kim Taehyung —comenzó a sonar la grabación —¿aceptas coger conmigo a cambio de un 10 en todos los exámenes de tu curso?

—Yo Kim Taehyung acepto con mucho gusto, ahora quítate la ropa

—¿Ese soy yo? —preguntó el castaño sin poder creerlo

—Sí —respondió el menor volviendo a guardar el teléfono —y como ya escuchaste, después que la pasaras muy bien conmigo me debes un 10

—¿Qué? —lo miró furioso —¿Te aprovechaste de mí, Jungkook?

—Algo así —habló por lo bajo —pero valió la pena

—¿Te estás escuchando? —reclamó —Jungkook el que me violó eres tú

—Tu me pediste que me quitara la ropa —gritó

—¡Hubieras dicho que no!, ¿no era más fácil que te largues y me dejes? —suspiró —me decepcionaste Jungkook, incluso creo que eres peor que Jennie

El castaño volvió a mirar el techo notando la mirada del pelinegro en él, se sintió mal por lo que le dijo y lo sabía pero no quería retractarse, tampoco le gustó que Jungkook haya aprovechado el momento cuando estaba inconsciente para pedirle un maldito 10.

—Profe, yo sólo quería un 10 —mencionó el menor con su voz quebrada

—En todos los cursos, Kookie —se volteó mirándolo fijamente —¿Por qué te acostate conmigo?

—Porque quería

—¿Porque querías? —frunció el ceño —¡porqué mierda querías!

—¡PORQUE ME GUSTAS! —gritó sintiendo sus mejillas arder —me gustas Tae... y no puedo suprimir ese sentimiento, cada vez que te veo se vuelve más y más fuerte y... y... —sollozó

—Ya, ya Kookie, perdón, no llores

—Idiota —miró molesto

—¿Qué? —alzó la voz —¡Encima que te consuelo!

—Diciéndome no llores las lágrimas no se van a ir mágicamente

—Buen punto. Entonces... ¿Quieres un abrazo? —sonrió

—¿De quién?

—De mí, pues, de quién más

Jungkook rió por lo que dijo Taehyung y se acercó a él para recibir su cálido abrazo.

—Kookie yo te quiero

—Pero no me quieres aprobar

—¿Quieres un 10? —preguntó sobándole la espalda

—Sí —contestó tierno —haré cualquier cosa Tae, lo que sea

—¿Lo que sea? —sonrió ladino viendo asentir a Jungkook —¿te bañarías conmigo?

—¿Qué? —se alejó indignado —te quejas que está mal que hayamos cogido y ¡¿ahora vienes y dices que nos bañemos juntos?! Tu sí que me decepcionas

—Kookie va a ser un rato, ¿sí? —se acercó a él y mordió el lóbulo de su oreja

—Tae... eres un pervertido —miró fingiendo enojo

—Oh sí, soy muy pervertido Kookie —afirmó —y eso que no has visto todo

—Imbécil —sonrió y lo besó, segundos de hacerlo el castaño se despegó de él riéndose —¿Qué? —preguntó confundido

—No sabes besar —se giró burlándose

—Y tu sigues apretando a alcohol

—Gracias —se levantó de la cama —me iré a cepillar, te espero en la ducha

Minutos después Jungkook entró donde el castaño le esperaba sintiendo el agua caliente cayendo en su piel, Taehyung lo tomó de la cintura y lo besó salvajemente comenzando otra vez con el placer sexoso que tanto les gustaba.

—¿Harías lo que fuera por un 10, Kookie? —dijo con la voz entrecortada por la excitación

—Sí~ —respondió —lo que fuera, maltrátame si quieres

—Estaba deseando oír eso —lo volteó contra la pared nalgueándolo y comenzado a penetrar rápidamente dejando salir gemidos ahogados del menor

Se disfrutaron, se desearon, se enamoraron.