Ginger

10.- Carmen.

Ginger's POV.

—¡Ginger!

—¿Sí, Kim?

—¡Por favor!

—Por favor nada, no usaré eso —me enfurruñé sentada como un indio en la cama de mi mejor amiga mientras prácticamente jugaba a que yo era su muñeca y elegía con qué vestirme.

¿Por qué?

Bien, vamos a recordar un poco.

El mismo día en el que Alai y yo fuimos a casa de Kim, fuimos invitadas a la fiesta de Brad.

Celebraría que formalizaba su relación con Kim. Y con formalizar me refiero a "llevamos ya una semana, así que se lo contaré a toda la secundaria, ¡hagamos una fiesta y celebremos como unos locos hasta el amanecer!" y eso básicamente era a lo que estaba obligada.

Ir a una inútil fiesta, que era muy importante para mi amiga.

Voy a golpear a alguien.

—¡Pero no quieres usar nada niña! ¡Esta fiesta no es nudista, eh!

—¡Pues no estoy feliz con ir a esa fiesta, eh! —imité su tono en forma burlona y ella me sacó la lengua de la forma más infantil.

—¿Y si vamos de compras?

—¿En qué clase de película americana crees que estamos? No tengo dinero para pagar un vestido que usaré una sola vez, no me fastidies.

—Entonces usarás alguno de los míos.

—Tus vestidos son, o rosas o más arriba de la rodilla. Y no señorita, no.

—Bien, me rindo. No usarás nada de aquí —asintió sentándose a mi lado— tengo que hacer unas llamadas.

Habló levantándose como si tuviera un resorte pegado al trasero y sacó el teléfono rápidamente.

—Mini Kim, tengo una misión para ti.

—¿Una misión? —pregunté articulando con los labios y ella me empujó con su dedo sobre la frente haciendo que caiga para atrás.

—Mision guacamaya, bebé.

Me levanté y alcé una ceja.

—¿Guacamaya, Kim?

—¡Los guacamayos son rojos! —se excusó golpeando el pie con su tacón.

Rodé los ojos y me eché para atrás.

Este sería un largo día de elecciones.

                                       -×××-

—¡Tía Bonnie, por favorcito! —se quejó Kim abrazando a mi mamá.

—Kim, ya dije que no —habló mi juiciosa e inteligente madre mientras Kim la perseguía.

Yo estaba sentada en el sillón, con los pies sobre la mesita haciendo zapping mientras mi mejor amiga intentaba pedir permiso por mí para una fiesta a la que no quería ir.

—¡Es mi presentación ante la sociedad con nuevo novio! ¡Es algo primordial en este momento!

—Wow, no sabía que Kim podía utilizar la palabra "primordial" en una oración sin necesidad de quemar su cerebro —murmuré ganándome un golpe en la cabeza con un cojín de parte de la morena.

—¡Tíííía! —alargó abrazándola más.

—No pierdas el tiempo, K. Mamá dijo que no —dije cambiando de canal.