Un Adiós, es para siempre.

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"Aborta, si es que es mio".
Esas fueron tus últimas palabras antes de marcharte.

Las lágrimas caían de mis ojos como cascadas.
Nunca debí de confiar en Él.
Nunca me debí de enamorar.
Todos me lo habían advertido,  pero no hice caso y caí en sus brazos.

Yo lo amaba.
¿Cómo podía no hacerlo? Él simplemente era perfecto.
Yo por él hacía todo.
Incluso luchar por la rivalidad de muestras familias para estar juntos.
Era capaz de hacer todo lo que él me pidiera.
Pero ahora él se va de mi lado.

La historia se repite, y yo no hice nada para evitarlo.
Primero su tio-abuelo con mi abuela.
Luego su hermano con mi hermana.
Y ahora él conmigo.

Siempre fuimos las tres un juguete que puedes desechar.
Un juguete que no vale la pena conservar.
Como siempre después de dejarnos embarazadas, ellos se fueron detrás de otra chica para satisfacer sus necesidades.

El honor de mi familia fue manchado otra vez, ya que cada vez mi vientre era más visible.
Mientras que más crecía mi vientre, los murmullos de la calle eran más notorios.

La depresión no podía ser la solución.
No me podía ahogar en mi propia miseria.
Ya falta poco y nacerá.
Tomo una hoja de papel y comienzo a escribir.

                                                        "Para el amor que algún día te tuve.
Dejame decirte que no te odio por hacer esto.
Ni a ti, ni a tu familia.
Más bien, aún te amo.
Y si, me duele que me dejes por otra, que tu intención solo era el de "rebajar " él nivel de mi clan.
Pero déjame decirte que, este bebé,  fue el fruto de un amor descontrolado.  Del amor que un día te tuve.
Este hermoso bebé algún día va a restaurar el honor de mi clan, yo voy a estar tan orgullosa de él, tal y como mi madre lo estuvo alguna vez conmigo.
Voy a triunfar junto con él, a tal punto en el que te arrepentirás de no haberlo aceptado.
No te deseo el mal.
Te deseo éxito y mucho amor.
Amor que no se va a comparar como el mío.

Con amor,
La dueña de este miserable corazón".

....

Escrito esto, la joven cerró el sobre para luego entrar en proceso de parto. Sin saber que nunca podría ver a su hijo crecer,  debido a que dio su vida, para que comenzara una nueva.

Un adiós,  Es para siempre. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora