𝑯𝑬𝑨𝑫𝑷𝑯𝑶𝑵𝑬𝑺 | VMIN

IV

A la mañana siguiente se despertó más temprano, quería visitar la biblioteca en las primeras horas del día y apostaba que estaría un poco vacía, era lo que deseaba.

Repitió la misma rutina de ayer, ducharse, cambiarse, desayunar y subirse al bus con los audífonos puestos. Desde que comenzó a usarlos le encantaron, como eran inalámbricos, solo tenía que ponerlos en sus oídos y podía moverse libremente.

Ahora entendía el término "manos libres", sin duda tenía que acostumbrarse a muchas cosas de la ciudad.

Al llegar a la biblioteca le entregó su carnet a la señorita del mostrador, así podría tomar de nuevo el libro que lo había encantado, Las Maravillas de Grecia.

Se sentó en la mesa que estaba ayer y aprovechó que no estaba Hani para sentarse en su lugar, tan concentrado estaba en el libro que no se percató que alguien estaba sentado frente a él.

Y era el mismísimo Kim Taehyung, tanto deseaba conocerlo y teniéndolo en frente, no sabía que era él.

Su vista estaba sumida en el dibujo que había sobre los dioses griegos, para hacer el ambiente relajante se puso uno de sus audífonos y el otro lo dejó frente a él, tardaria unos minutos en acostumbrarse a leer con él.

Una vez estuvo acostumbrado, tomó el otro sin percatarse que no era suyo, era de la persona frente a él y se dio cuenta cuando escuchó música diferente a la del otro audífono. Al igual que él, Taehyung se confundió al escuchar música suave en su audífono, algo que nunca escucharía.

"Disculpa, creo que haz tomado mi audífono chico"

Jimin se quitó el audífono ajeno tímidamente y lo miró, entregándoselo con una sonrisa.

"Ya decía yo que la música suave estaba sonando raro, estaba dudando si algún duende me dio un hongo alucinógeno en la noche"

Esa fue la primera vez que Taehyung sonrió desde que Hani lo abandonó, no habría imaginado que un chico con las mejillas abultadas y rosadas lo haría reír sin decir ningún chiste.

Ambos se devolvieron sus audífonos con una sonrisa y también fue la primera vez que Jimin interrumpió su lectura para hablar con alguien

Desde ahí fue que comenzaron su amistad, Taehyung no sabía que Jimin era el mejor amigo de su ex-novia y Jimin no sabía que él era el chico más popular en la universidad, pues ninguno mencionó sus nombres.

Después de intercambiar unas palabras con Taehyung, su percepción de él cambió, su voz pidiéndole su audífono era tan grave que le dió escalofríos, pero cuando entablaron una conversación pudo ver su bonita sonrisa cuadrada y que entendía sus malos chistes.

Sus clases transcurririan bien mientras sus amigos no le pregunten por estar tan sumido en sus pensamientos.

Ahora que lo había conocido, había sentido algo diferente de conocer a los amigos de Jungkook, al ver su sonrisa cuadrada, una extraña electricidad recorrió sus brazos e hizo que recoloteara su corazón.

Tenía tantas preguntas en su cabeza, ¿así era su voz o la forzó? Era tan bonita como para ser real.

Sus movimientos a pesar de ser tan naturales, eran varoniles, estaba sentado de lado y de vez en cuando peinaba su cabello con sus largos dedos en los pocos minutos de la plática.

Para ser la primera vez que lo veía, había quedado encantado, lástima que no sabía su nombre, pero si sabía que tenía una sonrisa cuadrada y era guapo.

-Espera Jimin, vas muy rápido, tus palabras parecen un rap, ¿estás diciendo que te topaste con un chico guapo?- Le preguntó el más sonriente del grupo con curiosidad.

YoonGi lo miró entendiendo la situación, ¡no se había dado cuenta que Jimin tenía preferencia por los hombres!, Min YoonGi era tan inteligente pero esta vez sus neuronas no estaban funcionando.

-No sabremos si es guapo si no lo hemos visto, describelo Park- Dijo JungKook, el era hetero, pero su miedo a las chicas no lo dejaba coquetear con libertad.

-Bueno, sus facciones eran tan varoniles y finas, cejas pobladas.... ¡No lo sé! Me distraje con su sonrisa, era muy bonita- Relató Jimin avergonzado, desde que Taemin lo terminó, ningún chico le había llamado la atención.