La otra parte de la historia

Hell no

-Agh, de todos los pobres diablos me tenía que tocar el- dije harta ya que ese modelo estaba siendo el más solicitado por todas las mujeres, por su físico, claro esta, ya que se presume que carece de cerebro.

-Si no te gusta, puedo derivarselo a Belen- Dijo retándome, ya que el es el más consciente de este lugar de que es mi rival en esta competencia y que tenia muchos conflictos con ella.

-Ni hablar, asignamelo a mi-dije mientras arrebataba la tablet de sus manos para ver el expediente.

-Me quieres decir por que es que en la actualidad todos los famosos quieren un sicario en su circulo? por que hasta el día de hoy no lo puedo comprender- dije mientras examinaba el documento.

-Ya sabes, por seguridad, últimamente los fandoms están muy locos e incontrolables, Una vez Andy biersack me contó que una mujer se desnudo en la puerta del bar donde estaban, solo para que ellos salieran y se tomaran una foto con ella- Conto riéndose.

-Ya veo que cumplió su cometido... -La voz salió de mis labios con un tono desagradable- Por dios, la gente de hoy en día esta totalmente loca- Dije mientras se abría el ascensor dejándonos ver lujosos autos y otros tipos de automóviles.

- Nunca voy a dejar de amar este lugar-Dije sonriendo caminando hacia donde estaban las motos, ya que estas eran mi debilidad- Entonces... donde sera mi encuentro con este Don juan?- Mientas reía junto Rob el empezó a estallar en risas, y escucho que alguien carraspó su garganta, cuando me gire y quedé frente a sus ojos a solo unos metros de distancia, realmente no sabía en qué lugar ocultarme

-Prefiero el termino Romeo, suena más elegante, también puedes decirme  rey de reyes si te apetece- Dijo Federico presumiendo su presencia {Que maravillosa primera impresión} pensé, fui hasta donde el se encontraba y me presenté

-Isabella-comente mientras extendía mi mano, pero el me miro de arriba a abajo desnudándome con la mirada

-Que placer el mio, de haberte conocido de esta manera, querida, así que contigo pasaré el resto de mis días?- dijo seductor

-Todos los días no, corazón, solo eventos especiales- Lo mire incrédula mientras esas palabras salían rasposas de mi garganta

-Al parecer no te contaron la información completa querida- dijo sonriendo de lado, instantáneamente miré a Rob pidiéndole una explicación

-El señor Ferrari necesita una guardaespaldas que actúe como si fuese su pareja, ya que lo persiguen importantes personas que quieren verlo muerto- yo solo rodee los ojos

-Yo no voy a ser tu novia, con muchísimo esfuerzo podría aparentar ser tu hermana adoptiva, pero tu novia? De ninguna manera

-Que pasa bebe, le tienes miedo al éxito?- dijo con un dejes egocéntrico en su voz y me acerque aún más a él decidida a pegarle una cachetada, pero sus hombres me lo impidieron.

-No sé en qué circo trabajarás, payaso, pero yo no seré la prenda nueva de nadie, y mucho menos para que me anden presumiendo- Una parte de mi no me dejaba ocultar mis pensamientos, incluso sin pensarlo esas palabras salían de mi ser

-Amor, no deberías complicarlo tanto, sabes que al final caerás a mis pies- dijo muy cerca de mis labios y después se alejo- Nuestro vuelo sale dentro de 6 horas, creo que eso es tiempo suficiente para empacar tus cosas y demás- dijo yendo detrás de su montón de gente

- A este pobre diablo tendré que "cuidar"?- dije mirando a Rob, totalmente indignada por cómo me trató

- Ya te lo dije, si no quieres se lo asignó a Belén, pero ella será tu jefa y créeme que tú no querrás eso

- Y cuánto tiempo debo cuidar a este cretino?

-Em... Déjame ver... Tienes un mes de prueba y si es que el te aprueba, te quedaras él tiempo que te necesite- dijo mientras tecleaba algunas cosas en su tablet

-Pero que bien... Que tan malo puede ser esto?- dije ya que sabía que me había metido en un gran problema- Rob, diles por favor que mandanden todo al arsenal de mi casa  y cuida a Héroe por mi, por favor- le pedí mientras terminaba de  acomodarme para volver irme una vez más.

-Ese perro ya tiene más letras de mi apellido que de el tuyo eh- comento con un tono alegre, riendo, ya que siempre lo cuidaba cuando yo estaba en misiones - Con gusto lo haré

Cuando subí al ascensor tuve la maravillosa suerte que se detuvo un piso después de el que iba a ser mi destino, dejándome ver a Belén {Lo que me faltaba, este día no podía ser peor, verdad?} Pensé

-Buenas tardes- Le dije de manera educada, ya que mis valores y modales eran lo último que iba a perder.

Ella solo me miro desde arriba hacia abajo, despreciándome con la mirada- Vi que te asignaron a Ferrari.

-Estas en lo correcto- le contesté.

- Que suertuda eh, no te lo cojas en el mes de prueba para que te contrate, sería algo típico.- siguió hablando, pero mi cabeza se bloqueo de la ira que tenía en ese momento

-Querida, a mi me contratan por el talento que tengo, jamas me acostaría con alguien solo por un puesto- rei mientras lo decía, recordándole que yo era muy consciente de lo que había hecho para llegar hasta donde ella estaba hoy en día - Algunas tienen suerte o talento y otras solo andan lamiendole el pene a los que que les da de comer- dije para dar final a nuestra charla ya que el ascensor había llegado a mi destino.

Completé todo el papeleo en administración, aunque no llegue a informame sobre el caso, así que guarde el expediente en mi bolso para leerlo más tarde.

El camino no fue extraño, ya que estaba acostumbrada a dejar la ciudad muy seguido, pero siempre me lamentaba de lo mismo durante el viaje, Héroe... lamento siempre haberlo condenado a una vida llena de soledad, ya que toda la vida fui una persona muy activa y siempre tenía algo para hacer, solo volvía a la casa agotada y el siempre me acompañaba hasta la cama, solo para dormir, ese perro fue lo más cercano a un hermano o incluso una pareja que tuve y de eso  no me caben dudas.

Apenas puse las llaves en el cerrojo, pude escuchar como sus garritas se acercaban rápidamente hacia la puerta, ya que sus uñitas provocaban un dulce sonido contra las baldosas, al abrir la puerta el ya estaba ahí para recibirme... mi querido y preciado  bulldog francés

- Hola bebe, mira quien llego a casa!- Le dije abrazándolo fuerte ya que a él siempre le gustaba eso, pedí comida para la cena, ya que se me había hecho tarde en separar todo lo esencial , pero no encontraba a Heroe por ningún lado, hasta que lleve los ojos hacia mi valija y ahí estaba el, con su juguete de chupete dormido dentro de ella.

Le saque una foto para el recuerdo, quizás la enmarque y dejé en mi mesita de luz, es simplemente lo mejor que me pudo haber pasado...  Aunque mi alma se partia el verlo entender que me iba, ya que no era la primera vez, pero siempre deseaba que fuese la ultima.

Unos minutos mas tarde el delivery llegó, y al fin pude quitarme las ganas de una hamburguesa que tenía. Obviamente Hero también comió delicioso como yo, ya que era domingo de antojo, cuando ya había dejado todo listo para mañana me fui a la cama con Héroe.

Ambos ya estábamos agotados de tanto jugar, cuando ya estaba en la cama con mi bebe al lado me predispuse a leer el informe de Ferrari y ahí pude entender el por que necesitaba un sicario o alguien altamente capacitado en su equipo de seguridad, este querido modelito se ensució mucho las manos para llegar hasta donde esta hoy en día,"claro, ahora todo tiene sentido" pensé....