3 | THE CASTLE

224 36 5
                                    


├  3 | THE CASTLE ┤

—¡Menos mal! —exclamó Eden cuando Severus también fue seleccionado para Slytherin

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.




—¡Menos mal! —exclamó Eden cuando Severus también fue seleccionado para Slytherin.

Un chico alto y rubio le dio unas palmaditas a Severus en la espalda al sentarse. El mismo chico le había preguntado a Eden un minuto antes si sus padres eran magos.

—N-no —contestó Eden nerviosa por la mirada penetrante del chico, debía de tener unos quince o dieciséis años. Parecía un Dios griego—, son juristas.

—¡Ah, una sangre sucia en Slytherin! —anunció para sus amigos—. Salazar te habría asesinado personalmente.

Eden tembló de pies a cabeza y el grupo de chicos enormes que la rodeaban se desternillaron de la risa. Al parecer les resultaba muy gracioso aterrorizar a una niña.

—¿Qué es sangre sucia? —le preguntó Eden a Severus en un susurro cuando se sentó a su lado.

Severus la miró asustado.

—¿Le has dicho a alguien que eres hija de muggles?

—Me lo han preguntado, ¿qué se supone que tenía que hacer? ¿mentir?

—Tenías que haber dicho que eras adoptada, o algo —dijo Severus con desaprobación—. Sangre sucia es como llaman de forma despectiva a los nacidos de muggles. En Slytherin no hay demasiados, por no decir ninguno.

Eden había esperado que su primera noche en el castillo fuera especial, que se lo pasara bien al menos. Pero el tal Lucius Malfoy hablando sobre Salazar Slytherin queriendo asesinarla la había dejado con mal cuerpo. Miró a la mesa de Gryffindor y vio a Lily riendo y hablando con unas chicas que también habían sido seleccionadas para la casa de los leones. Le dieron muchas ganas de estar allí sentada, quizá también con Sirius y James, que le habían caído bien. Ellos estaban ahora sentados con otros dos chicos, uno enclenque y gordo y otro con aire desaliñado y cicatrices en la cara.

Si Slytherin no admitía a nacidos de muggles, ¿entonces por qué el Sombrero la había sorteado ahí? Y más importante, ¿por qué había dicho que algún día se lo agradecería?

Severus conversaba animadamente con el prefecto, Lucius, y Eden se fijó en un niño también de primero que se había sentado frente a ella. El niño parecía contrariado. No había tocado su plato.

—¿Qué te pasa? —le preguntó Eden.

—No... —el niño levantó la vista y se aseguró de que nadie mayor lo escuchaba— No debería haber quedado en esta casa.

—Ya somos dos —Eden sonrió irónicamente—, ¿tú por qué no? Yo porque soy una —bajó la voz y acercó su cara a la del chico— sangre sucia.

El niño abrió los ojos impresionado de que la chica se llamase a sí misma así.

—Es muy raro que un hijo de muggles sea Slytherin —dijo—. Salazar, el fundador de la casa, instruyó al Sombrero Seleccionador para que aceptara a gente astuta, ambiciosa, pero nunca hijos de muggles.

Resiliencia | sirius blackDonde viven las historias. Descúbrelo ahora