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Capitulo 6

La adrenalina estaba consumiendo cada fibra de mi cuerpo, temía que mi corazón fuese a salirse de mi pecho. Nuestras cabezas voltearon instantáneamente a la carpa de nuestros amigos que lentamente se abría, no teníamos como decirles que se quedaran allí. Tess salió de la carpa junto a Evan para estirarse y saludarnos, antes de que pudiera hablar les advertimos haciendo señas con los pocos músculos que reaccionaron. Ambos se agacharon delante de la carpa mientras Tess cogía su celular. El oso parecía estar tranquilo muy tranquilo disfrutando de nuestros sandwiches

— ¿Estas loca? — le susurré a Ella mientras recogía una rama del suelo

Ella me miró, relajada —Shh, tranquila. Lo vi en Animal Planet — Ah claro, ahora me siento muchisimo más segura

Con mucho cuidado se incorporó y tiró la rama lo más lejos que pudieron sus brazos, el oso fue corriendo hacía la rama. Nos miramos triunfantes, su plan había funcionado a la perfección

Tess y Evan vitorearon del otro lado — ¡Eso es! ¡Stella te adoro! — festejó Tess antes que su celular comenzara a sonar estruendosamente, haciendo voltear al oso en nuestra dirección. Los cuatro nos miramos, sin saber que hacer

— ¡¿Cual es el plan B?! — pregunté nerviosa, el oso se volvía a acercar a toda velocidad hacia nosotras y no se veía muy amigable

— No hay plan B. ¡Corran! — dijo Ella

Todos tomamos distintos caminos para poder distraer al animal, Tess ya había advertido al guardabosques asi que era cuestión de tiempo hasta que apareciera, solo debíamos distraer al oso. La adrenalina había consumido todo mi cuerpo para cuando volteé a ver a Ella, el oso estaba por alcanzarla

— ¡Aquí osito, osito! ¡Wuuu, mírame! Soy una suculenta veinteañera sin estabilidad emocional — grité al oso al lanzar una piedra en su dirección. Mala idea, el oso volteó hacia mí y comenzó a perseguirme muy enojado

Corrí lo más lejos que pude y a la velocidad que mis piernas podían soportar, corrí tan rapido que tropecé con una piedra y caí al suelo raspando mi frente con el pasto seco. Cerré mis ojos instantaneamente, si así iba a morir pues no quería verlo

— ¡Nooo! — Ella se había puesto delante mio, protegiéndome del oso y recibiendo un rasguño en su abdomen. Grité de dolor junto a ella antes que la ambulancia llegara, junto a dos camionetas blindadas. Socorrieron a Ella colocándola en una camilla y llevándonos a los cuatro de regreso a toda velocidad. El medico había anestesiado a Ella por toda la sangre que estaba perdiendo. El oso la había marcado cerca de la costilla, no era un rasguño grande pero aún así, si se le daba por curiosear podría entrar en un estado de shock. Mi cabeza no dejaba de dar vueltas, me sentía tan culpable, ¿por qué había hecho eso?

Tess y yo nos tomamos de las manos mientras que Evan acompañaba a una Stella inconsciente por el pasillo del hospital. Esperamos y esperamos noticias hasta que Sophie entró a toda prisa al hospital, al vernos se enfadó tanto que comenzó a discutirnos sobre lo que había pasado y yo no podía sentirme aún mas culpable

Evan salió por la puerta y caminó hacia nosotras — Esta bien — suspiré aliviada — Han podido cerrar la herida y ya despertó. Vamos, síganme — todas seguímos a Evan hasta llegar al cuarto. Se paró en seco antes de abrir la puerta — Debo advertirles que la han sedado bastante y esta algo.. bueno ya lo verán — dijo abriendo la puerta

La habitación era algo pequeña para cuatro personas lo que nos hizo amontonarnos al rededor de la cama. Stella tenía buen aspecto para alguien que fue atacada por un oso, dejé caer un par de lagrimas involuntarias al pensar que debería haber sido yo y todo esto era mi culpa